Después de dar por terminada su relación y dejar la mitad de sí mismo entre los brazos de SeungCheol, Jihoon había recogido parte de su ropa y sin importarle mucho el estado demacrado que tenía, condujo con su beetle toda la noche hasta casa de su madre en Busan. Estaba alterado y no había dejado de llorar en todo el camino, pudo haber tenido un accidente y gracias a la intercesión divina, llegó vivo. Eran las tres de la mañana cuando lo hizo, tenía miles de llamadas pérdidas en su celular por parte de SeungCheol, pero apagó el aparato antes de caer en la tentación de responderle, simplemente llamó a la puerta sin descanso hasta que su madre le abrió y luego se aferró a su abrazo como cuando era un niño.
Él pasó dos semanas enteras enterrado en sus sábanas, lamentándose y deprimiéndose, muchas veces lo asaltaron las ganas de levantarse y volver a Seúl y decirle a SeungCheol que había sido una mala decisión, que no podía estar sin él, que podían trabajar en lo que habían hecho mal y volver a intentarlo, pero el miedo de hacer las cosas aún peor lo ataba a la cama, no quería al mayor fuera de su vida. Lo quería a su lado a toda costa, así no fuera como un amante.
Esa noche mientras hablaba con Jonghyun, volvió a sentirse exactamente igual que la noche en la que terminó con SeungCheol, pero se controló para no ponerse a llorar ahí mismo frente a su hyung, comió sin mucho apetito y antes de irse a dormir, extrañamente se sintió invadido por una sensación de ligereza. Finalmente se había sacado de encima todas las cosas que no había podido decir.
Durmió las ocho horas necesarias y se levantó el viernes a primera hora, dispuesto a preparar el desayuno para él y para su hyung ese día, no tenía planes aún, pero ya encontraría algo que hacer. Mientras estaba terminado de rellenar los sándwiches, Jonghyun se apareció en la cocina frotándose un ojo.
—Es muy temprano para que estés despierto, ni siquiera yo me levanto a esta hora. Desperté porque escuché a Thor muy inquieto.
Jihoon miró al chucho que estaba a sus pies, ladrando y chillando por algo de jamón. Todo ese tiempo lo había estado apartando con el pie hacia un lado, porque otra cosa que él no soportaba, además de los bebés llorones, eran los perros. Se encogió de hombros ante Jonghyun y le pasó al mayor un plato con tres sándwiches, tomando uno para sí mismo.
—¿Dormiste bien?
—Bastante bien la verdad, me ayudó hablar contigo, hyung. Gracias por escucharme.
Jonghyun le sonrió mientras iba hasta la sala e instó a Jihoon para que se sentase a su lado en el sofá. Él lo hizo tranquilamente y comió un poco en espera de que el mayor le dijera algo. Desde que era bastante joven, Jonghyun había sido un gran amigo, alguien en quien confiar y aunque no hablase muy a menudo con él, lo apreciaba bastante.
—No sé si quieras seguir hablando al respecto, pero quiero que me escuches —empezó el mayor, con el plato en su regazo—, ayer no dije nada porque creí conveniente que te desahogaras, pero me gustaría darte mi opinión y algún consejo al respecto y luego estará en ti si lo sigues, ¿bien?
Tragó saliva y asintió, ordenándose no apartar la vista y prestar atención a todo lo que Jonghyun tuviera que decir.
—Es más que obvio que SeungCheol ha sido y es alguien importante para ti, ustedes no sólo fueron pareja por mucho tiempo sino que fue tu amigo antes de ser tu novio, por lo que entiendo que te asuste el no verlo formar parte de tu vida, pero en este momento deberías de pensar un poco más en ti mismo. Si de verdad estás resuelto a rehacer tu vida con alguien más, deberías cortar todo tipo de relación con SeungCheol, porque aún a estas alturas no has logrado sanar la herida que su rompimiento dejó y la idea de tenerlo como amigo, en lugar de aliviarte, te lastima más de lo que crees.
Jihoon, aunque bien parecía mirar directamente a Jonghyun, tenía la mente en otro lado, sin preocuparse de lo que sus ojos capturaban. Su hyung tenía razón, lo sabía, sus palabras eran los pensamientos que había estado ignorando, lo mismo que su madre había querido decirle pero que él no la dejaba. No podía ser sólo un amigo de SeungCheol, porque no lo veía de esa manera.
Todavía estaba locamente enamorado.
El baúl en lo profundo de su mente se abrió y todo su contenido se derramó sobre su cerebro, preguntas como: ¿Por qué no puedo olvidarlo? ¿Por qué me es tan difícil avanzar? ¿Cómo pudo él seguir adelante tan pronto? ¿Dejó de amarme realmente? ¿Qué pasó con el amor infinito que me juraba? Seguidas de muchas más y varios lamentos, amenazaron con salir de su boca, pero en su lugar sólo se puso a llorar.
—Pero yo no quiero borrarle de mi vida, no quiero, hyung —lloriqueó, limpiando en vano las lágrimas en sus mejillas.
—Entonces díselo, deja el estúpido orgullo y miedo a un lado y pregúntale si pueden volver a intentarlo —dijo Jonghyun, acariciándole el cabello a modo de consuelo—, no te ahogues en un vaso de agua, a veces las cosas son más simples de lo que crees.
Él negó con la cabeza, todavía intentando limpiarse la cara—, él ya está saliendo con alguien más, hyung. Ya no me quiere.
—Aún así debes hablar con él y darle el cierre que merecen a esa relación, ahora deja de llorar y come.
Jihoon hizo caso, aunque no disfrutó de la comida como habría querido en un principio. Jonghyun no mencionó el tema de nuevo y luego de comer salió a trabajar, Jihoon tuvo ganas de hacerse un ovillo en su cama y volver a deprimirse, pero en su lugar se dio un baño y se obligó a si mismo a salir de casa; no podía permitirse ahogarse en si mismo otra vez, aún tenía mucho que pensar, pero no lo haría en esas cuatro paredes.
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Somos (+ que) Amigos ➳ JiCheol
Romance"Sólo somos amigos" Es lo que siempre dicen Jihoon y SeungCheol, pero todos saben que es mentira. "Sólo somos amigos" es lo que quieren hacer creer a los demás aún cuando ni ellos mismos lo hacen. "Sólo somos amigos" es la mentira más grand...