—Disculpen la interrupción; pero no creo que sea el lugar adecuado para demostraciones de afecto— les dijo Ehan molesto.
El pasó de largo y entro en su oficina cerrando de golpe la puerta; algunos de sus compañeros presenciaron la escena y eso sólo significaba que antes de almuerzo toda la empresa se enteraría que el señor Hilton encontró a su secretaria besándose con su esposo frente a su oficina.
Sebas la observó con mirada de preocupación, él se sentía culpable por lo sucedido y no quería que su jefe se desquitara con su chica.
—No te preocupes Sebas—.lo tranquilizo Hanna— de seguro solo está de mal humor.
— ¿Estas segura?, si quieres pueden ir a explicarle que fue mi culpa y que nos perdone por lo sucedido.
— ¡No!, no...Digo...no te preocupes. No será necesario— le dijo ella esperando convencerlo, no se quería ni imaginar qué pasaría si Sebas entraba a esa oficina — regresa a tu puesto; me encargare de esto.
— ¿Segura?
—Totalmente. Ve tranquilo.
Sebas suspiro preocupado pero le hizo caso a su esposa; solo esperaba no causarle problemas.
Cuando Hanna estuvo segura que Sebas ya estaba lejos; tomo su agenda y se aproximó a la oficina de Ehan.
Toco la puerta con miedo pero cuando él le dijo que pasara y ella trató de parecer relajada.
—Señor Hilton— dijo Hanna entrando a la oficina— vengo para que organicemos su agenda de esta semana— camino hacia el centro de la oficina y ahí espero de pie a que él le dirigiera la palabra.
Los segundos pasaban y Hanna ya se empezaba a preocupar.
— ¿Esa es tu venganza?— le pregunto Ehan de entrada, él estaba parado cerca de la ventana pero la observaba únicamente a ella.
— ¿Que?
—Quiero saber si esa es tu venganza por no haber confiado en ti hace cinco años. ¿Acaso piensas restregarme en la cara la feliz que eres con él?
— ¡No!...yo no...Yo...
— ¿Tu qué? — dijo Ehan acercándose a ella y tomándola de los hombros.
—Yo no lo planeé Ehan, Sebas sólo estaba despidiéndose de mi...
— ¿Sabes lo que me costó no alejarlo de ti y molerlo a golpes. Ahí, frente a todos?— gruño.
—Ehan...
—Lo odio Hanna. Sé que no tengo derecho pero no soportó verlo; y menos a ti con él.
Hanna guardo silencio esperando a que Ehan se calmara; se encontraba muy alterado.
—Lo siento— dijo a final— no volverá a suceder.
Ehan la soltó y se alejó de ella; sentía sus manos temblar y ver la imagen de Hanna besando a Sebas una y otra vez en su cabeza no ayudaba.
Sentía los celos destrozarlo por dentro.
"Fue tu elección" le repetía su conciencia una y otra vez.
—Por lo que veo; todavía no haz hablado con el sobre la verdad— le dijo Ehan girándose a encararla.
—No hemos tenido la oportunidad.
—Te quedan seis días Hanna; no estoy dispuesto a claudicar en esto.
—Lo sé. ¡En ningún momento te he pedido más tiempo!
Ehan la observó con la furia y la pena recorrer su venas; él no sabía que se podían sentir dos emociones tan contradictorias al mismo tiempo pero si era posible.
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Nuestra Segunda Oportunidad. Saga: NYC N° 3
RomanceSi tu hermano te afirmara que se acostó con tu prometida. ¿Le creerías? El mundo de Ehan Hilton se vino abajo en el momento que las fotos de su hermano y su prometida juntos llegaron a sus manos; pero mas lo destrozo fue el que su propio hermano se...