Medidas // Golden x Freddy x Fred // Yaoi #FNAFHS

Capítulo diez: Tú

— ¡Estoy en casa! —Llegué a mi hogar como a eso de las seis de la tarde, estaba algo agotado, pero el helado junto con la conversación del chico de cabellera morada me alegraron un poco. Miré a una esquina y vi unas maletas, curioso, ¿Quién habría venido?

—Oh Freddy, ¿Ya llegaste? —Salió de la cocina mi madre, yo asentí y ella me sonrió, noté que llevaba una bandeja de bebidas en la mano, lo cual me dijo que alguien posiblemente estaba todavía por aquí.

—Ma', ¿Quién vino? ¿Y todas esas maletas? —Pregunté con curiosidad.

— ¿Por qué no te diriges a la sala y lo compruebas tú mismo? Ahorita voy para allá —Se fue a servir otro vaso de té frío, mi curiosidad y dudas aumentaron, y no tardé en ir al living de mi casa.

Entré y me sorprendí al ver a la persona que menos pensé que vería en este mundo.

Pero allí estaba, sentado, sus ojos posando y concentrados sobre algunas cuantas fotos de un Álbum viejo de mi madre. Y también estaba algo que extrañaba tanto de él, su hermosa sonrisa.

—... Frederick... —Suspiramos al mismo tiempo Fred y yo, el nombrado nos volteó a ver la cara, y su sonrisa se ensanchó aún más. Era él, su cabello castaño, sus ojos azules y su piel tostada lo corroboraban, nuestro primo de Inglaterra de verdad estaba aquí.

¡Había cambiado tanto desde la última vez! Él es casi la imagen viva de mí ahora

—Vaya Teddy, estas más guapo de lo que te recordaba~. —Comentó levantándose y dejando el libro con las fotos para acercárseme y darme un doble beso en ambos cachetes, Fred y yo nos quedamos un poco desorbitados, no recordábamos a Frederick de esa manera. —Así se saluda en Europa, acostúmbrate. —Me dijo.

— ¡Jajá, No estamos en Inglaterra! el que debería acostumbrarse eres tú. —Me reí por tales estupideces, me revolvió el cabello. Me sonrojé un poco, pues me recordaba a las caricias que me hacía Golden.

— ¿Y cómo te ha ido en tu nueva escuela? ¿Ya tienes algún amigo? —Preguntó de manera casual volviéndose a sentar en el sofá a mi lado.

—Bien, entré hace una semana, y ya tengo a tres amigos. —Ladeé la cabeza con una sonrisa. — ¿Y tú? ¿Qué haces aquí? —Ahora me tocaba a mí preguntar, el suspiró de cansancio.

— ¿Tu sabes mi hermana Toddy? —Me volví a reír, ¿Esa diva también estaba aquí?

— ¿Ella también está aquí? —Pregunté divertido.

—Aquí en tu casa no, pero aquí en este país sí. —Dijo burlón.

—Wow, gracias por el dato, ahora sé que mi casa es un país y el resto de _____ es otro. —Estallamos en carcajadas, nada había cambiado entre los dos.

—Cambiando el tema, ¿Cómo van las cosas con Edy? —Me preguntó cambiando su semblante divertido a uno serio. ¡Se me había olvidado! Frederick es uno de los pocos familiares que saben de mi problema con Fred. Ambos se conocían, inclusive llegaron a entablar conversaciones los dos. Me sorprendía que cuando estaba con mi primo nuestras peleas disminuían, y normalmente nos la pasábamos peleando por la atención de Frederick.

—Freddy, recuerda que éramos niños. —Me habló Fred, yo suspiré. —Por cierto, ¿Podrías dejarme hablar con Frederick? —Me estaba dando algo, ¿Desde cuándo Fred pedía algo de esa manera? Normalmente me gritaba u obligaba a la fuerza.