No digas adiós [Levi x reader] (En edición)

Capítulo 10

L E C T O R A

Las altas hierbas predominaban principalmente en el camino que nos dirigía a las anteriores instalaciones de la Legión de Reconocimiento, lugar en donde pasé mi primer año después de haber ingresado a la brigada. 

Me había quedado sin palabras a tan solo estar a metros de llegar. Creí que el lugar no estaría tan mal después de recordar que tiempo atrás Erwin había ordenado un severo mantenimiento a la estructura para no dejarla en completo abandono, esto en caso que la llegáramos a necesitar en un futuro. No obstante, ahora pienso que tuve altas expectativas respecto a lo antes mencionado, pues con solo verla desde fuera sabía perfectamente que tendríamos que dedicarnos las próximas horas a un arduo trabajo de limpieza. 

Me giré a ver a Levi quien se encontraba a mi lado izquierdo, soltando un suspiro cargado de cansancio. 

—Dios, no quiero ser tu mejor guerrera. 

—Así que ya te estás mentalizando, ¿eh? —a juzgar por como él me respondió supe que su irritación había comenzado al percatarse de las circunstancias del cuartel—. Bien por ti.

—Voy a desaparecer en cuanto lleguemos —afirmé tranquilamente—. Así que desde este momento te aviso que no me busques, porque estaré muy escondidita en lo profundo del bosque.

Aún si manteníamos una fluida caminata con nuestros caballos, sorprendentemente aceleró su paso hasta quedar a mi lado y tomar mi brazo con aquella mirada fulminante que tanto lo caracterizaba cuando algo no le gustaba. Hasta ese entonces, supe que no solo me había condenado en ese momento, sino que también por todo lo que restaba de la semana. 

Me metí en la boca del lobo. 

—¿Ah, sí? —tragué saliva en cuanto su rostro se acercó al mío—. Me pregunto como es que harás eso sabiendo que tendré la vista puesta en ti, además del mocoso de allá —se refirió a Eren fulminándolo igualmente con la mirada aunque este no lo viera. 

Traté de remediar mi error, soltando una risa mientras agitaba la mano negando —¿Verdad que si te creíste mi actuación? —bufé aparentando estar ofendida—. ¿Tu crees que yo dejaría que los demás y sobre todo tú se encargaran de todo? —me crucé de brazos sin soltar las riendas del caballo— ¡Oh, vamos! ¿Quién diablos crees que soy?

—Una floja —respondió rápidamente a lo que me quedé sin palabras, había dado en el blanco—. Tú piensas que no te conozco, pero no es así. 

—Supongo que gracias por conocer mis aspectos malos, —resoplé con un toque infantil— eso era todo lo que necesitaba. 

—Pensé que querías un cumplido —mencionó sin más volviendo su vista al frente.

—¡¿Acaso a eso lo llamas un cumplido?!

—El antiguo cuartel principal de la Legión de Reconocimiento tiene un buen aspecto, pero es una base alejada de los muros y de los ríos. Al cabo de unos años se volvió innecesaria, así que pensé que nunca más la volveríamos a utilizar, sin embargo, llegaste tu Eren —las palabras de Auro me sacaron del ambiente juego-caótico que empecé con Levi. 

Solté un suspiro —Este cuartel es una de las mejores estructuras para que podamos tenerte, es por seguridad —el asintió más atento—. Si bien, es verdad lo que dice Auro, tiene algunas desventajas, pero debo admitir que es una de las más grandes de entre todos los cuarteles en los que hemos estado. 

—Tuvieron que abandonarlo —recalcó nuevamente mi compañero, utilizando palabras y tonos similares a los que usaba Levi—. Es innecesaria veas por donde le veas, pero por algo estamos moviéndonos otra vez aq— como por arte de magia, el caballo de Auro tropezó con una de sus pisadas en una ligera roca que sobresalía más que las otras, por lo que al ser un brusco movimiento mordió su lengua de forma brutal.