No digas adiós [Levi x reader] (En edición)

Capitulo 25

—¡Cállate, que no eres mi madre!— El grito que dio Jean se escuchó claramente hasta en la segunda planta de la casa.

Para este tiempo, ya me había acostumbrado a que ambos chicos se pelearan por pequeñeces. Ya me había hecho una idea, pues aún con los castigos que ponía para que ambos mejoraran su relación como compañeros, estos tipos de problemas no cesaban, así que me di por vencida.  

Nos habíamos movido a este lugar con intención de mantener a salvo a Eren y Historia, ya que esta última tenía una conexión a todo lo que estaba sucediendo dentro de los muros según a palabras del pastor Nick y era de vital relevancia ponerla a salvo, ya que lo último que pudimos escuchar por parte de ella fue la realidad de la familia Reiss.

Después de terminar con la severa limpieza de los dormitorios en la planta alta, por fin tuve la oportunidad de bajar para cerciorarme de que todos estuvieran bien y ver si necesitaban algo. Aunque al bajar, las palabras se quedaron en mi boca al ver lo productivos que estaban. 

—Sasha, ¿qué metiste en tu bolsa?— La sonora voz de Armin llamó mi atención. 

—Nada que se parezca a un pan.

—Devuélvelo.

—Vamos, chicos debemos acabar la limpieza antes de que llegue el Capitán Levi.— Pidió Eren preocupado. 

Por sorpresa la única que había captado mi presencia en el lugar era Historia quien se había mantenido callada todo el tiempo desde que cruzó la puerta. 

—Déjame ayudarte.—  Quité casi más de la mitad de la leña que la rubia poseía en sus manos. 

—Gracias.— Murmuró sin energía. 

Le dedique una pequeña sonrisa para después dirigirme a la pequeña zona a un lado de la chimenea en donde colocábamos toda la leña que se utilizaba para hacer los alimentos o para poner fuego durante las noches ayudando a calentar el lugar.

Al girar, no pude evitar reír al ver como todos rodeaban a Sasha presionándola para que sacara el trozo de pan que había escondido en su pequeño bolso.

Pero en cuanto Levi cruzo el umbral de la puerta todos callaron. Eren con sus manos apretó más el palo de escoba mientras que negaba en repetidas ocasiones y es cuando entendí su temor al ver como el azabache rebuscaba por debajo de la orilla de la mesa sin despegar la vista de nosotros. 

En ese momento quise desaparecer cuando Levi encontró suciedad debajo de esta. 

—Tuvieron tiempo de sobra.— Casi todos nosotros carraspeamos nuestra garganta —Me sorprende que haya suciedad aún cuando tu estas, ____.— En sus bolsillos rebuscó un pañuelo para limpiarse el polvo que se habían quedado entre sus dedos. 

Por nerviosismo coloque una mano sobre mi cabeza —Lo siento, lo siento. Tendré más cuidado en esta parte.— Jeager me miró extrañado, porque claramente esta era la zona que tenía limpiar. —No te preocupes de allá arriba que Eren hizo un buen trabajo. 

No quería que Eren fuera regañado otra vez por lo mismo, así que esta vez seré yo quien lo cubra. 

—No importa.— Me dio una rápida mirada —Luego hablaremos de eso.— Ahora se fijo directamente en el orbes esmeralda. —Eren, Hange quiere experimentar contigo. 

—P-Por supuesto.. 

(...)

El grito proveniente de el titan de Eren después de transformarse aturdió a mis oídos. Observé el intento de este por ponerse de pie, pero enseguida de hacerlo cayó de cara al suelo.