Apenas se despertó, se dio cuenta que Max ya se había ido. Se dió una ducha y se cambió de ropa, los chicos habían traído algunas cosas de su casa y las habían colocado cuidadosamente en el armario de la habitación de invitados.
Salió de la habitación y se extrañó de que todo estuviera en silencio. Bajo las escaleras y no vio a nadie. Decidió explorar la casa. Encontró una habitación donde había un piano. Tessa, había tomado clase de piano cuando era niña, claro que no tocaba desde los nueve años, pero todavía se acordaba cómo se hacía. Se sentó y comenzó a tocar.
La música la llenaba de alegría y la hacía olvidar lo malo, necesitaba desesperadamente olvidar lo ocurrido la noche anterior. no había hablado con nadie sobre eso, nadie tenía necesidad de saber. Termino la canción.— un tema muy triste, pero hermoso — dijo una voz, procedente de la puerta a sus espaldas.
Tessa se sobre saltó. Era Rafael.
— me asustaste — dijo respirando hondo.
— lo siento — se disculpó él acercándose — Beethoven ¿no? — dijo Rafael señalando el piano.
— sí — afirmó Tessa — disculpa no debería... yo n-no... No debí...
— tranquila — Rafael se acercó - es de mi hermano — señaló el piano — se lo regalé cuando nos mudamos de Wodshat a España. — suspiró — pensé que al verlo, le darían ganas de tocar de nuevo. Es un gran pianista, pero dejo de tocar hace años.
— ¿por qué? — preguntó Tessa.
— dejo de tocar desde... — Rafael parpadeo, como acordándose que no tenía que hablar de ese tema — no importa. Tocas muy bien Theresa — dijo cambiando el tema — ¿dónde aprendiste?
Tessa tenía la impresión de que iba a decir algo importante, algo que nadie más sabia, excepto él y su hermano. Algo escondían esos dos. Lo dejo pasar, después lo averiguaría.
— gracias, tome clases de niña — fue lo que dijo, luego preguntó — ¿dónde están los chicos?
— los chicos fueron a hablar con el director del colegio — respondió Rafael, acercándose más a ella — Cassandra lo convencerá para que ustedes puedan retomar las clases después de que regresen, Le dirán que tiene que salir del país por cuestiones personales y que tú estás enferma y de reposo hasta nuevo aviso. No se comunicará con tus padres. En cuanto a ellos ya los han llamado y le dijeron que te irías de excursión por unos días con el colegio.
— está bien — Theresa se levantó — creo que iré a hacer maletas.
— Theresa — la llamo Rafael.
— ¿sí? — ella lo miró.
— me gustaría enseñarte a usar tu magia, para que puedas defenderte con ellos — se ofreció — claro, si tú quieres.
— por supuesto — quería aprender todo lo que pudiera — hago maletas y bajo.
— no te preocupes, no será necesario, sus cosas más valiosas llegarán a la casa automáticamente.
— de acuerdo — dijo sentándose nuevamente — ¿por dónde empezaremos?
Después de las lecciones que le dio Rafael ya están listos para marcharse. Todos estaban reunidos en la entrada, esperando a que llagara el transporte, que los llevaría directo a Ghosttime.
Max estaba hablando con Thalía, era la primera vez que hablaban desde la noche anterior. Thalía estaba asintiendo y luego abrazo a Max. Tessa sabía que a ella le gustaba Max, y eso estaba bien, ellos no eran hermanos de sangre, pero aun así no dejaba de ser extraño.
Gabriel, estaba jugando con Monzerrath y Cassandra.
Tessa no había hablado con ninguno, desde la conversación de la noche anterior y la verdad no tenía ganas de hacerlo. Sonaron unos golpeteos fuera de la Casa.-- ya llegó su transporte — anunció Rafael — vamos.
— vamooos — dijo Cassandra entre suspiros.
Tessa no dio crédito a lo que vio. En la entrada de la casa, estaba un carruaje negro, con una "W" dorada a un costado. Del carruaje, tiraban unos caballos negros, muy hermosos, pero lo que le sorprendió fue el cochero, era un enano.
— es un gnomo — dijo Rafael, como si le fuera leído el pensamiento — la mayoría de ellos trabaja en los medios de transporte terrestre, Y es por eso que prefiero otro medio de transporte. — miro hacia el carruaje y se estremeció —los gnomos, están totalmente dementes, y si les das un coche...
No término la frase, pero Tessa entendió perfectamente.
— ¿las personas no se asustarán al ver la carroza del infierno por las calles del pueblo? — le preguntó a Rafael.
— los simples no la pueden ver — afirmó.
Tessa le sonrió.
— adiós - se despidió — y gracias por todo.
Él sólo asintió y entró de nuevo a la casa.
El carruaje arrancó con una sacudida muy fuerte, hizo que todos los que iban en él se sacudirán violentamente.— Tessa — dijo Gabriel, cuando el carruaje se estabilizó lo más posible — si quieres hablar...
— no quiero. no estoy de humor para hablar — dijo muy bruscamente, suspiró y miró a otro lado — solo... déjame, Por favor.
— como quieras — había una pizca de dolor en la voz de Gabriel.
Tessa sabía que estaba siendo muy dura con Gabriel, él no se merecía que ella lo tratara así, pero ella no estaba en condiciones de conversar con nadie.
Apenas llegaran, se iría lejos de ellos. Iría a buscar un lugar seguro donde esconderse y buscar a esa otra persona que Eveline necesita para el sacrificio, después se olvidaría de todo lo que tenga que ver con los Clearsthon. También se iría porque no quería poner en peligro a ninguno de ellos, más de lo que ya estaban, no quería que ellos pagaran por ella.Rafael tenían razón, los gnomos estaban totalmente locos y además parecían tener un instinto suicida. el carruaje se zarandeaba violentamente y, en más de una ocasión, estuvieron a punto de volcarse o estrellarse. Iban muy veloz. Cuando el carruaje se estabilizó de nuevo, Tessa miro por la ventana, al hacerlo abrió mucho los ojos, un humo blanco estaba envolviendo el carruaje, ahogó un grito, Miro a los demás y se dio cuenta que todos estaban totalmente normal, al parecer verse envueltos en una nube de humo, era normal para ellos.
Cuando la nube se dispersó, Tessa se quedó boquiabierta. A los costados de la carretera, había unas praderas hermosas, estaba anocheciendo, pero las flores se veían perfectamente, habían de todos los colores y eran iluminadas por unas pequeñas lucecitas diminutas, de todos los colores.— bienvenida a Wodshat — susurro Max frente ella — esas luces, son hadas silvestres.
— son hermosas — fue lo único que dijo y lo dijo sin ánimos.
Max capto el mensaje, dejo de hablarle y miro a otro lado
Tessa vio por la ventana un cartel que decía: bienvenido a Ghosttime.
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Luna Sangrienta
FantasyTiempos oscuros se acercan. Muchas verdades saldrán a la luz, y un misterioso secreto será revelado.