Canícula |L.S|

|27|: Culpa.

*Escuchen la canción, es Happy de Marina and the Diamonds*

Capítulo 27.

Nick y las chicas subieron al Aveo gris que pertenecía al castaño. Entre los tres, subieron a Harry inconsciente en el asiento trasero; sus ojos estaban cerrados y entre alucinaciones mencionaba el nombre de Louis. Riley iba con él intentando hacer que despertará, cuando lo logró, todos desearon que volviera a dormir.

El llanto era incontrolable, era como si hubiera perdido algo sumamente valioso para él. Temblaba sentado en el sillón de piel mientras que veía las luces de la ciudad por la ventana, sus ojos estaban rojos y es que él hubiera deseado sólo pensar en Louis, pero no, la muerte de su hermana seguía tocando su corazón y simplemente cualquier cosa podía desatar un ataque como este. Sus manos golpeaban el asiento delantero y nadie podía calmarlo, nadie sabía que hacer.

—Es mi culpa, todo es mi culpa siempre. Ella estaría viva, Gemma seguiría aquí y me aconsejaría sobre que hacer con Louis. Mi madre recordaría llamarme cada semana si solamente mi hermana estuviera viva— murmuró dando golpes esta vez más ligeros. Sus gritos eran desgarradores, parecía hacerse añicos conforme el tiempo pasaba y nadie podía hacer nada.

—Harry— Nick habló desde el asiento del conductor mientras que estacionaba él auto en una esquina— ¿Qué paso con Louis?

Y esa era la pregunta que a todos aterraba, porque todos suponían que las cosas volverían a lo mismo, pero esta vez Harry fue más lejos y la culpa lo carcomió por completo. Porque recordaba la cara de Louis cuando él mismo le aventó los billetes a la cama, aquellos ojos vidriosos que no pedían otra cosa más que se quedará.

Harry volvió a llorar, nadie jamás lo vio tan sensible y frágil, que creyeron que se rompería en cualquier momento. Sus labios temblaban intentando formar palabras mientras hipaba por el sentimiento contenido.

—Harry, tranquilízate por favor— murmuró Riley mientras tocaba sus rizos y los peinaba hacia atrás con sus dedos es un gesto de comprensión.

—Quiero estar solo— murmuró intentando abrir la puerta.

—No bajarás del auto.

—¡Quiero estar jodidamente solo! ¡Mierda! — gritó, pero nadie intento hacer que los seguros subieran para que el ojiverde saliera. Al contrario, Nick volvió a arrancar él auto y se dirigió de nuevo al campus.

Cuando llegaron, todos bajaron del auto, incluido Harry, el cual caminó rápidamente hacia las escaleras del edificio y se perdió dentro de él.

—Nick, ¿Crees que estará bien? — Riley preguntó cuándo Harry ya no estaba cerca para oírlos.

El viento de esa noche era suave y el frío casi no se sentía en absoluto. Entre los tres se miraban preguntándose lo mismo, ninguno sabía que había pasado entre los dos chicos y no querían inducir a Harry a una nueva crisis.

Nick frunció los labios al mismo tiempo que arrugaba el ceño, sus ojos se perdieron en él edificio de baldosas grises pensando en su amigo, el cual parecía estar totalmente destrozado.

—No lo sé, por ahora tenemos que hablar con Louis— mencionó el castaño.

—Es un hijo de puta, ni siquiera le importa lo que pasa con Harry— Blake murmuró molesta. Estaba harta de Louis y su drama de jovenzuelo—. Si lo quisiera no estaría tras de Theo, ni de otros chicos.

—¿Recuerdas cómo eras tú hace un año? — Riley se dirigió a Blake—. Te daba miedo aceptarlo, hasta ahora no admites lo que sientes por miedo a que te rompan. Probablemente Louis este igual.

—Es diferente— murmuró la castaña, dolida por el comentario de Riley. Creía que ya había olvidado toda esa mierda por la que pasaron.

—Probablemente sea diferente, porque ellos no llevan conociéndose mucho y son chicos, pero eso no quita que sean sentimientos— Nick intentó evitar una pelea entre las chicas que parecían iniciar una discusión.

(...)

La mañana fue totalmente amarga. Louis abrió los ojos, era sábado y por primera vez quería visitar a su familia, hacia tanto que no hablaba con su madre y sus hermanas que parecía una eternidad. Paso sus manos por su cabello y se sentó en la cama, el sabor agrió en su boca no tardo en aparecer recordándole todo el whisky que había bebido una noche antes.

Caminó hasta él baño y vomitó. Le dolía levemente la cabeza, y la sed que tenía era similar a la de una persona en el desierto; sus ojos le ardían y al verse en él espejo ni siquiera se reconoció. No era él, se veía pálido, con los ojos hinchados y algunas marcas en su cuello que le recordaban al autor de dichas huellas.

Trémulamente regresó a la cama, sin querer salir de su habitación. No quería estar sólo, pero tampoco quería salir con toda su mierda emocional inundando su mente.

Dieron las tres de la tarde, Louis seguía recostado en la cama, con su computadora encima reproduciendo el capítulo 12 de la primera temporada de Shadowhunters. No había comido absolutamente nada, sólo había salido a llenar dos botellas de agua de a litro de una garrafa del pasillo y de las cuales sólo le sobraba media botella.

Theo fue a la habitación de Louis a las ocho de la noche, su nariz estaba roja por la gripe y su voz era aún más gruesa. Louis no le permitió entrar, no quería verlo. Pero hubo a quienes sí les permitió entrar, a Nick y Blake (Riley se había ido con su familia).

—¿Qué quieren?

Nick comenzó: —Saber que paso entre ustedes dos ayer. Harry entró en crisis y...

—No me interesa Harry, ya pueden irse— murmuró frívolamente Louis, sentado en su cama, mirando a los dos chicos que estaban posados en la cama que perteneciente a Harry.

—Mira, imbécil. A ti no te importa, pero a nosotros sí, somos sus amigos y no queremos que vuelva a ponerse como ayer. Sólo aléjate de él— Blake estaba tan enojada que explotó contra Louis. Su mirada era demasiado pesada que el ojiazul decidió ver el suelo.

—No me hables así— habló molesto y pausó para tomar aire—. Y sobre su amigo, no me interesa, ya se los dije.

—Mira, Tomlinson. Tal vez alguien te rompió antes o una mierda cliché así, pero no tienes porque hacer lo mismo con las personas que de verdad te quieren y valen la pena. No tienes que ocultar tus sentimientos sólo por miedo a que vuelvan a romperlos— declaró la castaña con un poco de comprensión es su voz, pero con la misma expresión dura de hace un rato. Louis la miró y se preguntó cómo es que Blake le había dado al clavo.

—Harry me ha tratado como una prostituta y ustedes me vienen a decir esta mierda, creo que él que debería venir a dar la cara es él— explicó.

—¿Qué? — dijeron los dos chicos al unísono.

—Me dio dinero ayer después de acostarnos.

Ambos chicos se miraron y Blake unió las piezas del rompecabezas, dando con la verdadera razón por la que Harry había perdido la cabeza la noche anterior.

—Nick, era la culpa. Por eso él golpeó a Malik.

—¿Harry golpeó a Malik?

—Sí, pero no fue por ti, no te creas tanto— musitó Blake en un intento de herir el ego de Louis y consiguiéndolo al instante.

—Estaba bailando con él cuando apareció Harry, ¿Cómo quieres que tome las cosas, ah? — preguntó Louis cruzando los brazos en su pecho y mirando con una sonrisa burlona directo a los ojos de Blake.

Gracias por los 20,000 <3 y yo sólo quiero decirles que lxs amo demasiado. 

¿Team Louis o Team Harry?