NOTA DE AUTOR :
La canción de cuna que se menciona en este episodio es un canto tradicional alemán, llamado Weist du wie viel Sternlein stehen
Como dato aclaratorio. En esta historia los apellidos de Elsa, Anna y su familia es "Arnadarl" ya que es el nombre de Arendelle en Nórdico antiguo, según la canción que canta el coro en la capilla cuando coronan a Elsa en la película.
Frozen y demás personajes pertenecen a Disney. Esta es una obra de ficción y no es una historia apta para niños.
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Un corazón helado
por Berelince
6 El sauce y el sol...
Kyla nació la noche de una terrible tormenta que azotó Corona a finales de Octubre tal y como su abuela, mamá Jenell lo había predicho. Ella le había sugerido tan peculiar nombre a su hijo menor Redmond porque aseguraba que su pequeña nieta saldría victoriosa en cualquier cosa que se propusiera y porque sería muy diferente. Una persona que no iba a echar raíces en el reino y quizá en ningún otro lugar a menos que una influencia poderosa le obligara a ello.
La primeriza pareja siguió cada una de las recomendaciones de la matrona porque mamá Jenell había sido una sabia muy prestigiosa del Concejo Real hasta su dimisión, poco tiempo después del nacimiento de Kyla, cuando la princesa Rapunzel fuera raptada de los aposentos de sus padres. La orgullosa mujer se había tomado como afrenta personal el haberle fallado a su Rey, pero el monarca quiso conservarla cerca, por lo que le encomendó la dirección de la Academia del Sol, la institución que preparaba a todos los sabios del Sur del continente. Ese nombramiento le permitía al soberano mantenerse en contacto con mamá Jenell y consultarla cuando necesitara, pues solo un necio habría dejado ir a una sabia poseedora de tan peculiares ojos.
Y no era solo porque la mirada de mamá Jenell brillara con esa enigmática tonalidad amatista, sino porque su vista traspasaba la carne, los secretos, las mentiras y algunas veces hasta el tiempo.
Mamá Jenell podía conocer la naturaleza de una persona solamente con observarla y nada escapaba del escrutinio de su contemplación. Ni pasado. Ni emociones. Ni intenciones. Era una mirada antigua e imposible. Ciertamente preciada para un gobernante cuando se trataba de lidiar con cualquier tipo de conspiración, nombramiento real o inclinación de la balanza en algún tratado comercial.
Redmond y su esposa Emma supieron que su hija Kyla pasaría mucho tiempo con su abuela cuando los ojos cerúleos de la bebé se tornaron púrpuras al cumplir los seis meses de edad y vieron repetirse en la criatura aquella condición que se presentaba en algunas mujeres de la familia Frei desde antes que sus ancestros se asentaran en Corona tras estancias en poniente y provenientes de la mítica ciudad de Alejandría.
Era verdaderamente una fortuna que los ojos violetas se presentaran en una tercera generación (hecho que se sabía había tenido lugar cien años atrás según el árbol familiar), luego de ocho queridos nietos con perfectos ojos azules, grises y marrones.
La primera etapa de su vida, Kyla lloró y lloró. Lo hacía todo el tiempo. Desde que estuvo en la cuna, hasta que aprendió a hablar, y solo la presencia de mamá Jenell podía tranquilizarla la mayoría de las veces.
La mujer la acunaba y la mecía entre los brazos, acariciándole la mata oscura de cabello que se ensortijaba en las puntas. Miraba fijamente los ojitos amatistas de la niñita que le brillaban con profundo sentimiento.
Mamá Jenell le sonreía y le cantaba a su pequeña nieta que no dejaba de prestarle atención, como si el rostro de su abuela fuera increíblemente fascinante y de alguna manera pudiera transmitirle el significado de las palabras que le entonaba.
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Frozen Fanfic | Un Corazón Helado
FanfictionElsa es la reclusa Regente de Arendelle y Kyla la errante Sabia de Corona con la que se escribe desde la infancia a razón de una vieja promesa. La Profecía del Invierno Eterno, aguarda. Los caminos del destino se entrelazan y los sueños se convierte...