EN SUS MANOS

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Desperté en la habitación. Maldita sea.

-¿Mónica? - Mencione al mirarla de pie sobre el marco de la puerta, me talle los ojos sin saber en que momento había parado de llorar. Me giré al costado solo para mirar el reloj, el cual marcaba las 8:00 am-

-Joven Canela despierte -Se adentró a la habitación-

-¿Cómo sabes mi nombre? -Me incorporé sobre la cama, el limpio color blanco de este sitio me mareaba. Me hacía sentir como un maniático-

-Debo de saberlo trabajo aquí -Sonrió, tal ves para mostrarme confianza o sólo por ser cordial. Aún así me sentía atrapado en un sueño, un sueño de esos pesados que juras que es real. Pero cuando despiertas te das cuenta que no lo fue. Desearía que fuera eso, despertar en casa. Con mi padre sobre el sofá-

-El señor Alonso lo espera en su despacho-Mónica llevaba un uniforme que le hacía ver como enfermera, levantó las persianas y el sol aún lucían cálido y ligero.

-¿Ahora? -Me pase las manos por los ojos una ves más y ahora lo único que quería era romperle la cara a este imbécil-

-Si, vamos - Me levanté, me cepille los dientes y me moje la cara. Me miré al espejo y en cuanto lo hice sentí un leve mareo, será por que ¡Claro!, estoy secuestrado y mi mente trata de procesarlo. Seguí a Mónica-

-¿Para qué me necesita? ¿Qué hará conmigo?

-No lo sé -Susurro y siguió el rumbo por el largo pasillo-

-¿Crees que me deje ir? -Bajamos unas grandes escaleras y me impresionó de verdad la cantidad de elegancia y glamour que había en el lugar. Mónica no respondió-

-Es aquí - Mencionó y se fue. Toque y escuche un pase, por lo tanto entré. Sentía como mis piernas pesaban a cada paso-

-Siéntate-Me indicó y lo hice como cualquier otra persona lo haría . O cualquier idiota cobarde como yo lo haría -Mira seré lo más claro posible,tú te casaras conmigo

CONTINUARÁ....

ALI VILLALPANDO

SIN ESCAPEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora