HOJAS EN BLANCO

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Estaba oscureciendo decidí hablar con Alonso así que baje y camine hasta el auto, mientras más me acercaba mas nervioso me ponía. Abrí la puerta y Alonso estaba dormido, tenía su cara sobre el volante.
Me quedé un largo rato a su lado, acaricie su cabello bese su mejilla y despertó.

-Te dije que me dejaras solo no que te quedarás a sentir pena por mí como siempre lo haces

-Alonso yo no...-fui interrumpido-

-Jos de verdad quiero estar solo- Me acerque para besarlo pero se alejo-Largo -Salí y fui de regreso a casa, me senté en la cama y mire a un punto fijo. No se cuanto tiempo pase así, Alonso entro-

-BIEN, TENÍAS MUCHAS GANAS DE VER EL DIARIO ¿NO?, TOMA-me tendio el diario y la llave -ABRELO-tome el diario-

-Alonso

-ABRELO, QUERÍAS VERLO ¿NO? AHÍ LO TIENES

-No

-ABRELO

-No, no lo haré si tú no quieres -dije mirandolo-

-JOS ABRE EL DIARIO DE UNA PUTA VES

-¿Seguro?-Quería abrirlo pero no podía, algo en mí quería abrirlo y ver todo lo que esté contenía, pero algo en mí otro yo decía que no lo hiciera o pagaría graves consecuencias-

-SI, HAZLO AHORA- Me resigne, abrí el diario, lo hojee, pase las páginas confundido, frunci el ceño-

-¿Encontraste lo que buscabas?-pregunto fastidiado-

-Alonso aquí no hay nada- Literal, solo habia hojas en blanco-

-Pues claro, no soy una niñita para escribir en uno -y sin decir mas salió de la habitación junto con el diario y la llave-

Narra Alonso:

Salí de la habitación y solo tengo algo que decir... te amo tinta invisible

CONTINUARÁ...
ALIVILLALPANDO
   

SIN ESCAPEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora