Luke es un chico feliz, hasta el momento no tenía ningún tipo de problemas, hasta que ocurre algo muy inesperado y devastador que acaba con la felicidad y afecta su estabilidad emocional.
Pasa el tiempo y Luke sigue con su tristeza hasta que conoce...
James tocó la puerta de la casa de Luke, segundos después la mamá del rubio abrió la puerta encontrándose con el novio de su hijo.
- James, pasa. - Dijo Liz con una sonrisa.
El chico abrazó a la mamá de su flamante novio y entró. Liz cerró la puerta detrás de ella.
- Hola, señora Hemmings, ¿Dónde está Luke? - Preguntó el rubio.
- Está en la cocina con Jack. - Liz respondió. James se dirigió a donde la mujer le indicó.
Al entrar, vio a Luke sentado mientras hacía una competencia de quién comía más fresas con su hermano Jack.
James se acercó y abrazó a Luke por detrás y éste se volteó sorprendido de ver a su novio tan temprano en su casa.
- Hola, príncipe. - James besó la mejilla de su novio.
- Hola, mi amor. - Respondió
- Ya ganaste Luke, iré a ver una película y te dejaré con tu novio. - Jack golpeó levemente a James, sacudió el cabello de Luke y subió las escaleras en camino a su habitación.
- ¿Qué haces aquí tan temprano, preciosos? - Preguntó Luke levantándose de su asiento y tomando la mano de su novio.
- Es que te extrañaba, cielo.
Ambos chicos unieron sus labios en un cálido y tierno beso.
- Vayamos a mi habitación. - Sugirió Luke, com la más inocente intensión.
(...)
- Amo el sabor de tus labios, Lucas.
- Y yo el de los tuyos, Jamie.
- No me gusta que me digas así suena a chica. (Jeimi)- James hizo un puchero.
- Tú me dices Lucas, estamos a mano tontito. - Luke sonrió.
- Si hay algo que nunca quisiera dejar de ver es tu sonrisa, la sonrisa de mi atractivo novio.
- Yo no soy atractivo, tú sí.
- Nop, yo soy como excremento de vaca. No sé como me escogiste entre tantos y tantas pretendientes.
- Yo no le hacía caso a más nadie, sólo a ti desde que te cambiaste de colegio.
- Te amo.
- Yo más, Hemmings.
- Sería bonito que un día tú seas James Parker De Hemmings.
- Sería un placer. - Besó los labios de su novio.
Los dos chicos pasaron toda la tarde entre besos y risas. Ya era hora de que James volviera a su casa.
- Bebé, ya mamá salió de casa, llega en unos minutos. - Dijo James guardando su celular y levantándose del suelo.
- ¿A qué hora sale su vuelo?
- Sale a las 7 am. - Respondió James.
- Te divertirás en Miami, bebé.
- Te extrañaré muchísimo.
- Son sólo tres días, no es tanto. Y también te extrañaré. - Dijo Luke mientras agarraba a su novio por la cintura.
- Tres días sin ti serán como una eternidad, después de dos años de relación, no me imagino sin ti, Luke. - Besó a su rubio novio.
- Te amo, te amo muchísimo, bebé. Eres el dueño de mi corazón, nunca lo olvides, te amaré siempre, siempre mi príncipe azúl. Mi gran amor. - Luke abrazó a James y besó su cuello.
- Siempre estaré contigo, así no lo esté. ¿Entiendes? Así yo esté en Miami y tú aquí, mi corazón estará contigo, porque es tuyo.
- Ahora no quiero que te vayas, príncipe.
- Yo tampoco, pero tienes razón sólo son eres días. Te llamaré a cada rato.
- ¿Me enviarás nudes? - Preguntó Luke con una sonrisa pícara.
- Será una sorpresa, mi amor. - Besó a Luke.
Anbos chicos se agarraron de la mano y bajaron a la sala a esperar a la mamá de James.
- Luke
- ¿Sí?
- Te amo, no quiero que lo olvides. Eres mi felicidad.
- Y tú la mía. - Besó a su novio.
Llegó la mamá de James y el chico se despidió de la señora Hemmings y besó a su novio por un largo rato hasta que su mamá tocó el claxon de nuevo.
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Luke tiene 16 años James tiene 17 años. Es mayor que Luke por unos meses.
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