Narrador omnisciente.
Meses después.
Michael se dedicó los últimos meses a estar con Luke, conocerlo aún más y que el rubio lo conociera aún más. Sin duda alguna, para Michael el rubio era perfecto, día a día veía más cosas que le gustaban del chico.
En el caso de Luke, se sentía muy bien con la compañía de Michael, encontraba sus abrazos muy cómodos y tiernos. Pasaba mucho tiempo en la casa del teñido y viceversa. Michael le estaba devolviendo la felicidad a Luke.
- Sólo multiplica eso en forma de cruz y ya está el resultado, Mike. - Luke señaló el ejercicio en la libreta del teñido.
- Oh, eres muy inteligente, Luke Hemmings.
- Sigo sin saber por qué me llamas por mi nombre y apellido.
- Me gusta como suena en mi boca, cada vez que lo digo siento el sabor de tus labios, Luke Hemmings. - Michael sonrió.
- Eres muy tierno, gatito.
- Lo sé. - Michael dejó su libreta y abrazó a Luke.
- Por cierto, Calum dijo que sus papás saldrían el fin de semana y que quería hacer un fin de semana de chicos. - Luke tomó la mano de Michael.
- ¿Quieres que vaya contigo?
- Por supuesto.
- ¿Ashton irá? - Preguntó Mike.
- Obvio, él y Cal son novios desde hace unos meses.
- Así que sólo los veremos besuquearse mientras tú y yo jugamos bingo. - Michael empezó a reír y Luke se contagió de su risa.
- Probablemente. - Luke abrazó a Michael.
- Lukey.
- Gatito.
- ¿Quieres ir al parque?
- Síp.
(...)
Los dos chicos salieron de la casa y caminaron unas cuadras hasta el parque cercano.
- Fresa!.
- Frambuesa, Luke!. - Michael reía.
- Pero el helado de fresa es más rico que el de Frambuesa.
- Arrepiéntete. - Michael miró serio a Luke.
- Bien, bien. Que sean dos de frambuesa. - Luke pidió por fin y la chica de la heladería rodó los ojos y les sirvió los helados.
Luke le entregó el helado a Michael y ambos salieron de la heladería. Caminaban por el parque y miraban al cielo.
- El día está muy bonito. - Dijo Luke.
- Ni tanto. - Michael hizo una mueca.
- ¿Por qué lo dices? - Luke volteó a verlo.
- Tú eres más bonito. - Michael sonrió y Luke se sonrojó.
- Gatito. - Luke tomó un poco de helado en su dedo índice y lo llevó a la nari del teñido, dejándolo con la nariz llena de helado.
- Joder, Luke. - Michael se limpió.
Luke estalló en risas.
- El helado te queda bien. - Lukese sonrojó por enésima vez en la tarde.
Ambos chicos se sentaron en el césped a terminar sus helados.
- Gracias. - Dijo Michael.
- ¿Por el helado? - Preguntó Luke.
- Por todo, por el helado, por dejar que me acerque a ti en estos últimos meses, por dejarme abrazarte y de vez en cuando robarte unos besos. - Michael se sonrojó.
- Estos últimos meses han sido muy distintos a como había sido mi vida anteriormente. Yo casi ni salía de mi casa luego de lo de James. Pero tú me has hecho volver a sonreír y a querer salir de mi habitación. Gracias a ti por eso. - Luke le sonrió a Michael.
- Te quiero, Luke Hemmings.
- Y yo a ti, Michael Clifford.
Los chicos se abrazaron.
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Happiness
RomanceLuke es un chico feliz, hasta el momento no tenía ningún tipo de problemas, hasta que ocurre algo muy inesperado y devastador que acaba con la felicidad y afecta su estabilidad emocional. Pasa el tiempo y Luke sigue con su tristeza hasta que conoce...