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Narrador omnisciente.

Todos en el pasillo veían la sonrisa que llevaba Luke en su rostro mientras caminaba, algo que el rubio chico no hacía desde hace algún tiempo, por obvias tazones. Pero Luke ahora tenía una nueva razón para ser feliz, y esa era Michael con quién llevana ya dos semanas noviazgo.

Muchos saludaban a Luke, pues a pesar de todo era muy conocido en el colegio, tal vez por ser el chico más candente de el Instituto, o ppr esa fachada de ángel que poseía, con sus ojos azules y su cabello rubio casi dorado, conquistaba a cualquiera, la lista de chicas y chicos que babeaban por él era considerablemente larga, sólo que Luke no le tomaba importancia.

- Hola, Luke. - Saludó con una sonrisa el chico de dos casilleros después del de Luke, Jaden.

- Hola, Jaden. - Luke le sonrió también.

El chico de cabello castaño metió un libro, cerró su casillero y se dirigió a la salida.

Luke buscaba su libro de historia en su bolso para guardarlo, pero una voz femenina a su espalda lo interrumpió, haciendo que se volteara.

- Hola Lucas. - Saludó Arzaylea.

- Hola, Arz. - Luke le sonrió.

Arzaylea mordió su labio inferior y en un abrir y cerrar de ojos besó a Luke.

El beso duró menos de 3 segundos, puesto que Luke se separó empujando a Arzaylea.

- Qué mierda, Arzaylea. - Luke se limpió la boca. - ¿Por qué me besas? - Luke ardía de furia y oía risas de un grupo de chicas a unos cuantos metros de ellos.

- Fue un reto de mis amigas, lo siento nene. - La chica hizo una mueca.

- Pero tú eres lesbiana, mierda. - Luke se limpió la boca de nuevo.

- Ya te dij... - Fue interrumpida por un chico de cabello negro, Luke inmediatamente reconoció la voz

Michael.

- ¿A la tortillera se le antojó la banana? - Michael escupió seca y fríamente. Parándose frente a Luke. Arzaylea frunció el seño por la acción del pelinegro. - Alejate de mi novio, lagartona. - Arazylea huyó hacia sus amigas.

Michael sonrió y se volteó a ver a Luke.

- Michael ella me besó, yo no... - Michael lo interrumpió.

- Y tú te callas. Camina. - Michael cerró el casillero de Luke y lo tomó fuertemente del brazo. A duras penas Luke pudo cerrar su bolso que estaba abierto.

Michael arrastró a Luke por todo el pasillo y el estacionamiento hacia su auto. Le hizo una seña al rubio para que subiera y éste obedeció sin decir nada.

-

Michael se paró en un semáforo en rojo. Mirando directamente al frente, callando a Luke cada vez que intentaba hablar. Pero el rubio no se daría por vencido.

- Príncipe, yo no la quise besar. - Luke insistió

- Luke. - Michael respiró tranquilamente. - Te dije que no quiero oirte, por favor, cállate y dejame conducir en paz.

- PERO POR QUÉ NO, MALDITA SEA. - Luke perdió el control.

- No me grites. - Michael nunca volteó a ver a Luke y arrancó  auna velocidad muy alta, aún cuando el semáforo seguía en rojo.

Luke se asustó.

Llegaron a la casa de Luke. Michael le pidió qur bajara de su auto, Luke estaba entre molesto y dolido con el pelinegro.

- ¿No me vas a hablar? - Luke preguntó serio.

- Tengo cosas qur hacer, baja. - Michael dijo suspirando.

- Bien, como quieras. - Luke bajó del auto. Corrió furico hasta la puerta de la casa, azotándola y cotriendo de nuevo pero hacia su habitación, el rubio agradecía que mo había nadie en casa.

Se tiró en su cama frustrado.






























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Volví:3

HappinessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora