Prometo cuidarte [Frededdy]

Capítulo 17: Despertar

-Familiares del joven Fazbear- llamo un doctor.

-¿Como esta mi hijo?

-¿Fred está bien?- preguntó Freddy.

-La operacion fue un éxito y el joven esta fuera de peligro. Necesita descansar, pero estará bien.

-¿P-Puedo verlo?- preguntó el castaño.

-Si, pero solo por unos minutos. Acompañeme.- el doctor se dio la vuelta. Freddy le dio una mirada a su madre, recibiendo un gesto con la mano de que siguiera al médico, y así lo hizo- Aquí es- anunció una vez frente a la puerta- recibiendo un "Gracias" por parte del castaño.

Miro un momento la puerta. Tomo una bocanada de aire y entro a la habitacion. Ahi estaba. Fred en una cama, el aparato que marcaba su ritmo cardiaco sonaba con cierto ritmo. Su respiración era tranquila, estaba dormido. Sus facciones estaban completamente relajadas. Se acerco a su cama y se sentó.

-Hola, Fred- hablo en voz baja- no tienes idea de cuanto me asustaste. Nos asustaste a todos. No debiste hacer eso, pero, al menos estas bien... En cuanto despiertes vamos a levantar la denuncia en contra de Golden, su abuelo dijo que no queria saber nada de el.

Se quedó en silencio, solo escuchando la respiración de azabache, la cual llegaba a contagiarle cierto sueño. Como una canción de cuna.

-Cuando cantamos te pedí que te quedaras conmigo. Me dijiste que te usara como quisiera, pues quiero tenerte a mi lado. Y, cuando despiertes, voy a estar a tu lado.

-Disculpe- hablo una enfermera entrando a la habitación- la hora de visitas terminó.

-Si, ya voy.- se levantó y plantó un beso en la frente del contrario- Te amo...

-Tranquilo, pronto va a despertar y podrá hablar con él- le calmo la mujer, a lo que el castaño asintio.

-Tambie te amo...

Una suave, pero grave voz se escucho detras de ellos. Fred miraba a Freddy mientras tenia pintada una pequeña sonrisa. Su angel guardián habia despertado. El moreno no pudo evitarlo y corrio hacia el pálido para abrazarlo con todas sus fuerzas.

-Agh- se quejó, ya que Freddy presionaba ligeramente la herida.

-Lo siento, es que... me alegra ver que estas bien- hablo tímido.

-No podria dejar a mi osito, tenia qie quedarme para cuidarte- hablo casi en un susurro, pero el castaño lo escuchó perfectamente, provocandole un sonrojo.

-Gracias por quedarte- dijo abrazándolo con mas cuidado para despues besar sus labios.

Estaban frios, como siempre. De hecho, Freddy nunca sintio la piel de Fred calida, siempre estaba helada. No estaba seguro de si eso era sano, pero el azabache casi no mostraba tener problemas con su temperatura corporal. Y decimos "casi" porque cuando recien obtuvo su cuerpo e intento abrazar a Freddy este se estremecia de forma violenta al sertir el frio sobre su piel, incluso temblaba algunas veces. Freddy siempre se preguntaba si era posible transmitirle algo de su calor; y aunque nunca lograba calentar la piel del palido si hacia que sintiera menos frio del que era usual. Quiza por eso a Fred le gustaba tanto abrazarlo. Era su opuesto perfecto. Junto a él dejaba de ser ese témpano andante para poder sentir algo de calidez. Y eso era bueno.

-Disculpa, hijo-hablo el mismo doctor que lo habia guiado a la habitacion- ¿puedes salir un momento? Necesitamos revisar al joven Fazbear.

-Claro- Freddy le dio otro beso en la frente para despues salir de la habitación. Afortunadamente, ninguno de los presentes hizo una mueca de desagrado ante la escena, incluso la enfermera actuo enternecida por ese gesto.