La Diosa Griega No Conocida [Nico Di Angelo]

Capítulo 18:Confesión 1.

Percy.

Annabeth había dejado sorprendidos a todos menos a mí que sabía que eso pasaría, es decir, ella había cambiado mucho desde que conoció aquel chico. Dejó la arquitectura de lado para "dedicarse" a estudiar agricultura.

Todavía recuerdo aquel día.

Por fin comenzó el campamento de verano, estaba tan entusiasmado en ver a annabeth, desde hacía mucho que no la veía.

La encontré en su cabaña, acostada leyendo un libro de agricultura, me había sorprendido ya que ella prefería los edificios que a la tierra.

- ¿Me extrañaste? -pregunté sonriendo, gesto que desapareció al ver que no contestaban-. Annabeth, estoy hablando contigo.

-Estoy muy ocupada, Percy -contesta sin mirarme-. Quirón quiere que vaya a una misión para traer a un nuevo campista. luego hablamos.

-Lamento interrumpirte, solo quería saludar mi novia.

Salí furioso de allí inmediatamente, no sé que demonios le ocurría, pero no me estaba gustando para nada.

***

- ¿Cómo estas querido Percy? -dijo Quirón.

- ¿Con quién ira Annabeth?

-Con un hijo de Deméter, ¿Por qué la pregunta?

-Creo que alguien ya me cambio -susurro viéndolos a ambos demasiados cerca, mi novia estaba abrazando a aquel chico como solía hacerlo conmigo.

- ¿Estás bien, Jackson? -parpadeo al escuchar a la diosa de la Paz.

-Creo que si.

Ella comenzó a reír: - Sabes, he visto y escuchado que los héroes dirán que siempre estarán bien, aunque no sea así. Pero, como cambia la cosa cuando se trata de una chica.

-No entiendo su punto de vista. Además, deberíamos estar organizando un plan para acabar con el mal y no estar discutiendo algo estúpido.

-Perseus, sé que estas mal por tu ex novia, ¿Por qué mejor no ver a tu alrededor? -se acercó a mi oído y susurro- ¿porque no elegir a alguien mejor que la hija de Atenea?

Con su cabeza, señaló a su hija.

-Usted debería hacer lo mismo con Nico.

ESES.

Aquello que pronuncio el hijo de Poseidón no hizo más que dejarme un poco mal. Nico era gay y punto, no me metería allí, mucho menos cambiar su orientación. Se que Hades no está conforme con aquello, es más, podría desatarse una guerra entre él y Apolo. Y, como ustedes saben, puedo hacer cualquier cosa para que haya paz, y si para eso Nico debe gustarles las mujeres, lo haré.

-Hola - me sobresalto al escuchar su voz, su vista viajo hacia la bebe que tenia en brazos.

-Nico...

-¿Y cómo haz estado? -pregunta y se sienta a mi lado. Comienza a jugar con Andrómeda.

-Bien, ¿y tú?

Estaba muchísimo más guapo que la última vez que lo vi, sus labios estaban algo rosaditos, levanto la mirada hacia él, veía a todos lados.

- ¿Te encuentras bi...? -no pude terminar con mi pregunta, uso fríos labios me lo impedían. Demonios, ¿por que me hae esto?

Esto estaba muy mal, yo estaba casada con Ramsés y el salía con Will, le gustaban los hombres, tenía a mis hijos aquí, ¿Qué iban a pensar si me veían con él en estas condiciones?

Nico hizo que nos separamos después de un rato.

-Amor, te extrañe -murmuró para que yo sola lo escuchase. Abrí los ojos como platos y me reí, había tomado.

-Nico, no soy Will – cerro los ojos fuertemente.

-Lo siento. Me he equivocado de nuevo -y dicho esto se fue dejándome algo dolida y estúpida. Me enojaba que sea así, no poda la bebé comenzó a llorar.

-Andrómeda, amor no es momento de llamar la atención como te gusta. Mamá no está bien.

-Hermana, tanto tiempo sin vernos. Veo que tu hija ya ha nacido -sonríe inocentemente Hera-. Cuanto daría por volver a tener un hijo con Zeus.

- ¿Por qué no lo tienes? -le pregunto ya sabiendo la respuesta. Al parecer Zeus por el momento no quería saber nada sobre ella. Y no se lo cuenten, pero creo que se estaba viendo con una tal Sally.

- ¿Cómo está Ramsés? ¿Por qué no ha venido?

-Tiene asuntos que resolver -pronuncio cortésmente.

-Oh, veo que esos asuntos son tener hijos con otras, ¿verdad? ¿Cuántos hijos ya tiene fuera del matrimonio que tiene contigo? Mmmmm... creo que tres o cuatro con el que viene, ¿no?

-No nacerá el que está en el vientre de aquella arpía, no lo hará.

- ¿Segura? - comenzó a reírse fuertemente llamando la atención de todos los campistas, incluyendo a los dioses.

Y ahí, supe que era el momento de hacerla ver mal ante los ojos de mi hermano. Se que no sueno como aquel dios de la paz, pero había aguantado mucho tiempo.

-Que no haya matado a los hijos que tuviste con él en el Olimpo en aquella reunión del pacto de los tres grandes -comienzo a alzar la voz-, cuando todos estábamos preocupados y angustiados de que mis hermanos no pelaran, y tú te escaparas y pasarás el rato con Ramsés, ¡el marido de tu hermana!, no quiere decir que no podre con ella.

Vi los ojos de mi hermano, llenos de furia y decepción.

Te hare pagar por lo que le hiciste a mi tercer embarazo.

Y acá está el capítulo. Espero que les guste y me parece que en el próximo se vendrán más confesiones: Nico.

Mañana es mi cumpleeeee :D 16 años ya lpm