(Ghosttown)
Yuffie caminaba tranquilamente por las soleadas calles de Vergel Radiante, disfrutando de su paseo sin ningún tipo de preocupación, metida en los pensamientos de su mundo, aislada de todo, hasta que llegó a la casa de cierto hechicero ya que necesitaba de su sabiduría para solucionar ciertos problemas personales.
Pero al entrar a la casa no había rastro de Merlín – "Vaya parece que Merlín no está en casa, tal vez está con todos los demás en el castillo" – Dijo mientras se disponía a marcharse si no hubiera sido porque el ordenador de Cid no paraba de producir molestos ruidos – "Y ahora ¿Qué le pasará a este trasto?" – Dijo mientras se acercaba a la máquina, pero no entendía nada de todos los datos que aparecían en cuestión de segundos por la pantalla y no se atrevía a tocar nada por miedo a volver a dañar la máquina; por lo que se disponía a irse como si nada nunca hubiera pasado hasta que de repente escuchó algo que la detuvo.
"Mayday, Mayday, aquí Naminé sigo viva, ¿Alguien puede oírme?" – Dijo cierta voz que nunca pensé en volver a oír por lo que al principio pensó en que eran sólo alucinaciones suyas pero por curiosidad Yuffie volvió a acercarse al ordenador y pulsó un botón para luego hablar - "Na – Naminé ¿Eres tú?" – Dijo esta, sin creérselo ella misma, ¿Se estaría volviendo loca?"
"¡Sí, sí, sí! ¡Yuffie soy yo, Naminé!" – Cuando oyó eso no se lo podía creer, Naminé seguía viva pero cómo era posible, ella misma vio los restos de la nave y francamente era un milagro que sus amigos hubieran sobrevivido a aquel impacto.
"¡Oh dios mío! – Grito de alegría cuando por fin proceso todo – "¡Naminé eres tú! Pensábamos que habías muerto pero no es así ¡Sigues viva! – Volvió a gritar ya que era algo a celebrar.
"Yuffie no sabes cuánto me alegro de oír tu voz"
"¿Dónde estás? Tenemos que ir a buscarte inmediatamente" – Dijo esta centrándose ya que esto era algo importante.
"No sé las coordenadas del lugar, solamente sé que se llama Pangea" – Le dijo Naminé.
Pangea... no conocía ningún mundo con aquel nombre – "Espera que voy a rastrear tu señal ahora mismo" – Le dijo poniéndose manos a la obra.
"De acuerdo"
Pero sus esfuerzos eran completamente inútiles, aunque el ordenador fuese capaz de recibir la señal de los restos de la nave cuando parecía que iba a obtener las coordenadas del lugar, la máquina le daba error y cuando intentaba colocar la procedencia de la señal en algún punto del mapa espacial esta era también incapaz; era como si ese mundo, Pangea no existiera... o no quisiera ser encontrado. Para colmo la señal de Naminé se había vuelto de repente muy inestable, había un montón de interferencias hasta le pareció oír como un montón de personas hablando a la vez.
"Naminé ¿Has dicho algo? – Dijo Yuffie – "No puedo rastrear tu señal, es como si no estuvieras en ningún lado del universo"
"Creo que ya sé la forma de que encuentres mi señal, a lo lejos creo que veo una ciudad" – Le dijo ella y eso llamo bastante la atención de la ninja.
"¿Una ciudad? ¿Sabrías decirme cuál es?" – Tal vez si ella sabía el nombre de dicha ciudad a lo mejor le sonaría o podrían ser capaces de contactar con sus habitantes.
"No, pero si voy para allá creo que sabré darte mis coordenadas" – Le dijo – "No sé cuánto tiempo pasará hasta que pueda contactar contigo Yuffie pero espero que sea lo antes posible, por favor dile a los demás que estoy bien"
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Ecos de un Pasado Lejano.
FanfictionUna serie de sucesos extraños están ocurriendo en la vida de Naminé, noche tras noche la misma pesadilla se repetí. Pero un día ella encuentra un libro, el cual podría contener la respuesta a estos extraños sueños. Lo que no se esperaba era adentrar...