Capítulo 7

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Horrible, es lo único que puedo decir, ¡Esto es horrible! Y no planeo poner buena cara a una chica, menos a una nueva que no ha hecho más que hacerme enfadar continuamente. Calma, calma Alexander, este bochornoso momento se irá tan pronto como la situación lo amerite, ¡Es que aun así es terrible! No tiene idea de lo enfurecido que me encuentro, a mi punto de vista las chicas también se ven molestas y no entiendo el porqué, si es por estúpidos celos pues, que ni se preocupen tanto porque me encargaré de hacerle la vida imposible a esta extranjera. Para el colmo, Chris no deja de golpear su mesa con esos fastidiosos lápices, ¡ah! Me ponen más tenso.

—Evangeline... ¿cierto? —Chris detiene esos estrepitosos sonidos de sus lápices y junto con ellos, mis pensamientos

Puedo percatarme de la manera en la que la ve, bah, él siempre ha sido más sociable que yo, así que debe saber perfectamente que no tengo intenciones de tratarla ni mucho menos.

—¿Eh? —contesta de manera torpe—Si... Evangeline Price y tú eres... ¿Chris?

—¡Si! —esboza una enorme sonrisa, tan típica de él cuando haya de qué hablar— Chris Anderson, ¿inglesa cierto?

—Pues sí...

Él tiende la mano.

—Gusto en conocerte, yo también soy inglés, qué lindo es Londres ¿Cierto? ¿Cierto?

—Sí, bastante —sonríe nerviosa, correspondiendo a su gesto, no me extraña, Chris tiende a ser muy extrovertido y aventado apenas le abran las puertas de una conversación

—Eh Alex, ¿Por qué no le das la bienvenida a nuestra nueva compañera?

Arqueo la ceja, ¿Disculpa? ¿Me veo con cara de querer darle la bienvenida?

—No tengo porque hacerlo—respondo fríamente, no voy a ocultar el hecho de que ella me desagrada, mejor que se entere de una vez

—De todas maneras, no es necesario —contesta seria

Si planea hacerse la indignada conmigo, no va a funcionar, así que solo la fulmino con la mirada. Qué irritante.

—¿Qué te trae por aquí Evangeline?

—Nada en especial, sólo es por transferencia

—¿Ah sí? Qué interesante, pensé que venías por la tonta idea de que te harás famosa o algo así

—¿Por qué vendría por eso?

Me mantengo ajeno a la conversación, solo contemplo de manera vaga su perfil y sus pómulos, tiene buenas facciones. De hecho, al verla más detenidamente me percato de detalles como lunares cerca de sus orejas, una mirada un tanto... no lo sé, está entre melancólica, nostálgica y a la vez alegre. Qué extraño.

Chris la mira con total atención cuando ella ríe, no sé si de verdad es porque le causa curia o porque planea que ella se vuelva una víctima más a sus encantos.

—Eso sí que es novedad—Chris responde con un gesto amigable—entonces dinos... ¿Qué tipo de música te gusta?

—Ah, realmente no tengo un género favorito, pero la combinación de la música electrónica y clásica suena muy bien

Dirigí mi mirada hacia ella, ¿Dijo clásica? ¿De verdad aún hay chicas que amen la música clásica tanto como yo? Relajé mí cuerpo y me acerqué solo un poco para confirmar lo que había dicho.

—¿Clásica? ¿Te gusta el piano o el violín? 

—Pues, sí, solo sé tocar el piano, y el violín... No tanto

Alexander, memorias de un violinista (#2 Saga Amor entre acordes) EDITANDO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora