Alexander, memorias de un violinista (#2 Saga Amor entre acordes) EDITANDO

Capítulo 20

—¿Y bien? — Chris arquea la ceja, mirándonos a ambos—¿Son novios?

Es de las pocas veces que veo a Chris realmente furioso, incluso me hace sentir mal.

—A los ojos de muchos, lo somos—expliqué

Pero al ver que él me miraba con desprecio, sinceramente sentí que le había fallado. No por otra cosa, sino porque no le conté nada al respecto y sé que él es muy sensible con ello. Nuestra amistad siempre se basa en honestidad, pero esta vez quería o, mejor dicho, quiero cargar con el problema yo solo.

—Chris, de verdad lo siento, sé que ese día te mentí, pero...

—¿Respecto a qué? —interrumpe Evangeline

—Oh nada —él suspira irritado —vi las noticias y llegué a preguntarle si tenía un secreto que tenía que aclararme, como una novia —me fulmina con la mirada —Pero claro, el hielo andante me mandó por un tubo, me dijo que eran farándulas y hoy dice que tú eres esa chica ¡Bravo! Me siento ofendido hermano

—Lo sé, lo sé —iba a estirar mí mano para apaciguar su enojo, aunque creo que es más probable que me arranque el brazo —no era mi intención quebrar tu confianza

—Pero eso no responde mi pregunta, ¿ustedes son novios?

—A los ojos de todos, lo somos—respondí

—¿Y a tus ojos?

Me miró fijamente. Tragué saliva con dificultad, a mis ojos es un noviazgo como cualquier otro... supongo. Incluso si intentara explicárselo probablemente termine por mofarse de lo que le diga.

—Para empezar, ¿Sabes lo que quieres?

Fruncí el entrecejo, sabe perfectamente que diciéndome esas cosas sólo me sentiré mal conmigo mismo. Al ver que no respondo, él solo bufa burlón y rueda los ojos como canicas.

—Como lo pensé, lo tuyo no es más que turismo emocional

—¿Qué has dicho?

—Lo que oíste, puedes mentir todo lo que quieras pero el único que se miente a sí mismo eres tú, Evangeline no necesita un novio como tú

—Ja, ¿Qué? —me crucé de brazos, me siento realmente ofendido, ¿de cuándo acá él me dice esas cosas?

Para empezar, ¿quién se cree él para decidir quién merece o no estar con ella?

—Si no mal recuerdo Alexander, alguna vez me dijiste que mantener sentimientos con otra persona solo era una pérdida de tiempo y causaba un desvarío emocional, ¿Por qué de manera tan drástica decides empezar una relación y para el colmo ficticia? ¿Eso te salvará de tus responsabilidades? ¿Eso te va a ayudar a sentirte mejor?

Estoy muy disgustado. Totalmente disgustado con su comentario, ¿y qué si lo dije? ¿no puedo cambiar mi parecer? ¿estaría mal si intento aprender a ver con buenos ojos las cosas que me desagradan? Además, mis responsabilidades con Eveshka y mis frustraciones son cosa mía.

—Dices conocerme... —digo serio—Pero no sabes nada

—Lo sé y por eso te lo digo

—¿Y tú qué? —alcé la ceja—¿Por qué dices cosas como estas?

—Porque definitivamente no estoy de acuerdo

—No espero que lo estés

—Entonces no juegues con ella

—No lo hago

—Si tú lo dices, pero dado que tú sigues con tus secretos y que ella no es tu novia, entonces puedo pasar por alto tus estúpidos argumentos