NOVELA GANADORA EN EL PINCEL DE ORO CATEGORIA ROMANCE
Detención.
Detención, para mi, definitivamente fue algo mas que solo un lugar para "reflexionar sobre lo que hice"
Ahí conocí a tres personas que cambiaron mi vida.
Se hacen llamar, "Los problem...
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—¿Lista para el viaje?— preguntó Amy con una sonrisa de oreja a oreja
—¿Tengo otra opción y decir no?— pregunté alzando una ceja
—Noup— contestó y yo rodé los ojos, bajamos las escaleras ya que Nate le envió un mensaje a Amy diciéndole que estaban afuera.
El viaje dura ocho malditas horas.
Si, ocho horas en el mismo auto que el.
Pero gracias al cielo Dan igual irá.
Amy abrió la puerta de mi casa para salir y James vi Nate estaban justo afuera
—Hola amor— sonrió y Amy besó a su novio.
Con la frente en alto, Maddie.
Esto no te duele en lo absoluto, piensa en lo que te dijo Dan.
—¿Las ayudamos?— preguntó James, yo asentí.
Inconscientemente miré a Nate, no lo veía desde el último día de clases en detención, su mirada chocó con la mía y luego la bajó al collar que me regaló por navidad, lo tenía puesto y eso le hizo sonreír.
Ya, Nate, borra esa maldita sonrisa de tu malditamente apuesto rostro.
Te encanta y lo sabes.
Cállate, consciencia
Deberías callarte tú y besarlo.
Y justo después de eso tirarme por un puente, claro.
—Nuestras cosas están por ahí— Amy señaló un punto de mi casa y ellos entraron
—Vayan a subirse por mientras— dijo James, Amy asintió y tomó mi brazo, ya afuera vimos a Beth en el asiento del copiloto del auto.
Era un auto bastante grande, de la madre de James según Amy, tenía tres filas de asiento, la primera del piloto y copiloto, la segunda habían dos asientos y en la tercera tres asientos.
—¡Rubia, enana!— Beth sacó su cabeza por la ventanilla— ¿Y Dan? Dijiste que venía, ¿No?— preguntó Beth
—Si, debe estar por...— no acabé de hablar y vi a mi primo bajarse de un taxi— Ya llegó.
—Genial, entre más seamos, mejor— sonrió Beth— Además es demasiado sexy.
Sonreí negando con la cabeza.
—¿Ya nos vamos?— preguntó Amy cuando cuando todas nuestras cosas y también las de Dan estaban dentro del maletero del auto.
—Si, vamos— contestó Nate.
James se fue manejando y a su lado se fue Beth, en la segunda fila fueron Amy con Nate y en la tercera Dan y yo.
