Dime Que Si

Capítulo 25

Me desperté al sentir los rayos del sol, que se cuelan por la ventana, en mi en rostro me siento como si hubieran dormido por meses. Me senté en la cama maldiciendo, me duele todo el cuerpo.  Miré a mi alrededor, pero no vi a Mark, miré el reloj y maldije de nuevo, no me desperté para ir a la universidad. Me puse de pie e hice mi rutina de todos los días con un poco más de prisa. Tome mis cosas, baje la escalera y vi a Grace limpiando la sala.

—Bueno días señora ¿Cómo se siente? — pregunto Grace al verme.

—Bueno días Grace, me siento mejores gracias por preguntar.

— Me alegro mucho ¿Va a desayunar?

—No, no tengo tiempo estoy muy retrasada.

— ¿A dónde vas? — escuche la voz de Mark detrás de mí, me gire y lo vi parado en las escaleras.

— A la universidad y ya voy tarde gracias por no levan-tarme.

—De nada y si bien recuerdo necesita reposo ¿O me equivoco?

—Ya reposé y con tu permiso— caminé hacia la puerta y me volví a sentir mareada, me recosté de la pared en lo que se me pasaba el mareo.

—No estás bien aún, quédate hoy— dijo acercándose a mí, le miré y asentí.

—Está bien me quedo.

—Grace por favor sírvele el desayuno.

Grace asintió y se fue a la cocina yo la seguí y Mark me siguió a mí. Grace puso un plato lleno de comida en-frente de mí y las pastillas que me tengo que tomar, deseo salí ya de esta anemia, termine con mi desayuno bajo la mirada de Mark.

— ¿Qué se supone que haga todo el día? —pregunte

—Descansar—me dio un beso en la frente y se fue.

—Oye espera ¿A dónde vas? —me puse de pie y cami-né detrás de él.

—A mi despacho si necesitas algo estoy ahí. —subió la escalera.

Las horas pasaron, recorrí todo la casa, escuche música, leí algunos libros, pero seguía muerta del aburrimiento, así que salí de mi habitación y entre al despacho de Mark está hablando por el teléfono mientras mira unos papeles parece molesto decidí retirarme antes de que se percatara de mi presencia, pero fue en vano  me vio y me hizo señal para que éntrala cosa que hice. Me senté en la silla que está enfrente de la mesa y me quede mirándole deseando que con quien esté ha-blando cuelgue ya y si como mis deseos fueran órde-nes Mark cuelga.

— ¿Todo bien?

—Si solo vine a hablar contigo— dije tomando unos papeles de su escritorio, pero no entendí nada así que los volví a poner en su sitio.

— ¿De qué quieres hablar? — dijo acomodando los papeles que puse en su escritorio.

—No sé de cualquier cosa de...— en ese momento se me vino a la mente mi conversación con Emma y la declaración de guerra de Stephanie— ¿Te puedo hacer una pregunta y no te enojas? — pregunte tímida.

— ¿Cuántas veces he contestado esa pregunta? Sabes que sí y no me enojare ¿Cuándo lo he hecho? — dejo de hacer todo para prestarme atención.

—De acuerdo hace tiempo atrás cuando conocí a Step-hanie me dijiste que tuvieron algo y pues me entere de que fue ese algo y....— me detuve a examinar su expresión mis palabras le están borrando la sonrisa de la cara y eso no es bueno, pero ya comencé y tengo que terminar— ¿Todavía sientes algo por ella? —  que acabo de hacer, su expresión cambio por completo se ve sorprendido, confundido y serio muy serio todo a la misma ves creo que lo peor que he hecho es hacer la pregunta.