Capítulo 31

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Es mi hora de salida y no he me ido buscando el momento preciso para no ser vista por mi amiga. Para así poder irme a mi casa en paz y tranquilidad, salí a toda prisa, pero me tropecé con Tara que me mira con reprobación.

—Intentando escapar—dijo con tono acusatorio y entre cerrando los ojos

—No, ¿Cómo crees? Solo voy a casa a cambiarme, no voy a salir así— dije lo primero que me vino a la mente y que sonó lógico para mí.

Tara se quedó en silencio unos segundos pensando de repente me miro con una sonrisa de esa que pone cuando se le ocurre una idea que para ella es brillante y para mí es horrible así.

—Pues te acompaño, así hablamos y de paso veo donde vives

Lo que dije una idea que no es nada brillante para mi más cuando lo que quiero es evitar salir esta noche. Solté un suspiro y sin más remedio la seguí al auto en todo el viaje no dejo de hablar de lo grandioso que será salir de nuevo todos juntos. Yo solo asentía y sonreía hasta que llegamos a mi casa. Me bajé lo más rápido posible, abrí la puerta Grace se sorprendió al verme llegar tan temprano y más cuando vio a mi amiga entra detrás de mí con cara de fascinación.

—Grace ella es Tara mi mejor amiga— las presente, Tara la saludo con la mano y Grace le sonrió.

—Bueno yo ya hice todo lo que me toca, la comida esta lista por si quieren comer y si no me necesita para nada mas ¿Me puedo retirar? ― Pregunto Grace tan amable como siempre.

—Gracias y claro que sí que tengas linda tarde.

Grace me sonrió y desapareció. Me voltee a ver a Tara que aún sigue viendo la casa como si estuviera en Disney o algo parecido.

—¿Tienes empleada? — pregunto con la boca abierta

—Si— dije algo fastidiada

—Por razón te mudaste la casa es hermosa más tienes empleada— dijo mientras seguía analizando su alrededor.

—Esa no fue la razón principal y lo sabes, pero pues ¿Quiere comer? — le pregunté para distraerla asintió en forma de respuesta, me dirigí a la cocina y en ese pequeño trayecto hizo como quinientas preguntas corridas las cuales o no terminaba o yo no escuchaba.

—¡Espera! No te entiendo una pregunta a la vez— Tara se relajó trago lo que estaba comiendo y comenzó a preguntar.

— ¿Por qué no hay ni una sola foto de ustedes?, ¿Les has contado todo sobre ti?, ¿En que trabaja? ¿Conociste a su familia?, ¿Cómo son?, ¿Tiene hermanos? Porque si es así preséntamelo y por último ¿Qué piensas hacer cuando se acabe el año? Digo porque cuando entraste por primera vez llenaste para el internado que quizás te llaman este año y ¿Se van a divorcia como quiera o se quedaran así? — hizo todas estas preguntas en un momento sin tomar aire.

—Si hay una foto de nosotros, pero no me acuerdo en donde la puse, ¿A qué te refieres con contarle todo sobre mí? — la mire algo confundida, aunque me imagino a que se refiere con eso—  Es empresario ya te lo dije, si conocí a su familia son un amor y no tiene hermanos solo hermanas. Lo del internado no creo que se dé y no sé no lo he pensado aun asumo que nos divorciaremos y quedaremos como amigos para los demás, pero tendremos nuestra relación— conteste

—Sabes a lo que me refiero—me dio una mirada fulminante yo la mire dándole a entender que no la entendía soltó un suspiro—sobre tus padres lo que paso con ellos, porque coleccionas las cajas de músicas y... ¿Estás bien? –pregunto preocupada cuando mi semblante cambio por completo al oír sus palabras si hay algo que de lo que no me gusta hablar son sobre esas dos cosas porque están conectada y me duelen mucho.

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