Hope. Segunda temporada.

Capitulo uno.

Capitulo uno.

Enero 26.

Corría por los pasillos del hospital con Niall delante de mí, emocionados y nerviosos.

Habíamos recibido la llamada de _____ de que había roto fuente. Niall comenzó a temblar y salió corriendo de su casa, gritando que iba a ser papa.

-¿En qué habitación se encuentra _____? – le pregunte a Niall mientras esperábamos el ascensor.

-Supuestamente en la cinco. – sonaba nervioso.

Salimos del ascensor y seguimos corriendo hacia el área de parto. Allí estaba la madre de _____ que le lanzo una mirada asesina a Niall. Este la ignoro y se sentó en los sillones donde uno esperaba. Yo me senté con él y me puse a pensar, a pensar en todo como hacia todos los días.

A los pocos minutos, unos llantos se escucharon dentro de la sala. Sophie había nacido.

Meses después.

Habían pasado cuatro meses y medio desde que Louis y yo terminamos. Oh, bueno, el me termino a mí. He llorado desde entonces insaciables veces, maldiciéndome por ser tan ingenuo e idiota. Por ser tan estúpido. Por haberme enamorado de la persona equivocada. Por todo.

Volvía a ser el mismo Marcel de siempre. Pasaba todo el día estudiando, no tenía tiempo de nada. Los fines de semana los youtubers me invitaban a videos y yo iba y me divertía, luego volvía a casa de Niall y me encerraba en su cuarto.

Cuando Sophie cumplió tres meses, Niall gano la custodia de la niña y se la quito a _____. En esos pobres tres meses, la niña había sufrido de desnutrición. Niall había hecho todo lo posible por mejorar a Sophie, todos lo ayudábamos. Hasta su madre y su padre. Los dos dormían en la habitación más grande, la de huéspedes. Era un cuarto acogedor pintado de rosa claro con estampados de mariposas, una cuna blanca y una cama individual en donde Niall dormía, una mecedora, una peinadora en donde se encontraba todo lo necesario para cuidar a una bebe y un comunicador. Se podría decir que todos maduramos. Niall ya no anda de bar en bar, ni de mujer en mujer, ahora trabaja con su padre en el negocio de los abogados como ayudante. Había establecido una relación con Rose, no del todo formal, pero era una relación. Aunque seguía viéndose con Zayn por internet. Yo había conseguido un trabajo dando clases particulares en las tardes. Ahora solo buscábamos un departamento lo suficientemente grande para vivir los tres.

Tire mi bolso en la cama y me tire en el piso quitándome los lentes. Vaya día. Eleanor me había tirado un vaso con agua encima, nadie en el comedor rio, solo Louis. Muchos lo miraban con enojo, otros con asco.

Diablos, mi vida era tan miserable.

Me levante cuando escuche a la mama de Niall llamándome por la puerta.

-Harry, ¿Puedes tener Sophie un momento? Saldré a hacer unas cosas.

-Claro – abrí la puerta y vi a la pequeña bebe de cachetes rosas. Vestía un onesie blanco con dibujos de biberones.

-Vuelvo en seguida.

Tome a la bebe en brazos y camine hasta su cuarto, busque un biberón ya que eran las dos y le tocaba la comida. Me senté en la mecedora con la música que Niall le pone para dormir.

-Que linda eres mi pequeña bebe – le mire con ternura hablando como lo hacen todos al ver un bebe - ¿Eres hermosa? Si, lo eres. ¿Quién es la cosa más bella de todo el mundo?

-Tú.

Gire mi cabeza y vi a Ian apoyado contra el marco de la puerta. Apreté a Sophie contra mí como si el mundo dependiera de ello y me levante.

-¿Qué haces aquí? – le pregunte suavemente.

-Harry, mi amor, quiero que comencemos de cero otra vez. Discúlpame por todo lo que te hice pasar, te lo pido. He visto como el imbécil de Louis te ignora y es feliz con Eleanor. – baje la cabeza.

-Estoy bien como estoy, gracias.

-Imagínate a nosotros así, un bebe quizá dos, tu, yo, una familia.

-Ni en mis más locos sueños me imagino yo contigo.

-Te imaginas con Louis, ¿No es cierto? – dijo su nombre como si soltara algún acido.

-Me imagino solo.

-Niall se buscara una esposa, se casara y tendrá más hijos. ¿Crees que tendrá tiempo para ti?

-No, pero sus bebes sí.

Ian puso los ojos en blanco. Se acerco a mí y yo me aleje. El, por un momento, se quedo para con la mano tendida, pero luego la bajo y con él, su cuerpo. Se arrodillo en frente de mí, con los ojos llenos de lágrimas.

“¿Por qué ya no me amas...? se te nota en la mirada... Ya nada es como antes, puedo dejarte ir y ser feliz.”

-Por favor, Harry, sal conmigo de nuevo, te lo pido.

-Lo hare. – Puse a Sophie en su cuna, ya se había dormido – pero a la primera locura que hagas, esto se acaba.

Ian me miro con sus ojos grises como la neblina, se acerco a mí y me dio un beso suave. Sus labios sabían a fresas con menta, eran suaves, pero rústicos. Nada en comparación a como Louis me besaba.