Hope. Segunda temporada.

Epilogo.

 Epílogo.

Estaba caminando por un parque, específicamente el Hyde Park, de la mano de mi esposo. Ambos estábamos observando a dos niñas que iban delante de nosotros, una rubia y la otra castaña. Mi esposo y yo no pudimos evitar sonreír cuando ambas nenas se abrazaron después de discutir por un largo rato que iban cenar. Decidimos sentarnos en una banca luego de caminar unos metros más, las niñas se fueron corriendo hacia unos patos que pasaban por ahí. Cuatro años de casados pasan rápido cuando tienes una hija y una sobrina, un esposo, un perro, un trabajo y una casa que mantener.

-Es increíble lo rápido que el tiempo puede pasar – su voz me saco de mis pensamientos. Louis miraba lo que las niñas hacían.

-Increíble es el tiempo que he estado soportándote – reímos por eso. Una fría brisa de otoño meció mis rulos.

-Papi, papi – me grito Steph, la nena de cuatro años que Louis y yo adoptamos seis meses después de la boda, fue una decisión muy difícil porque todos nos decían que éramos muy jóvenes, yo tenía veintiuno y Louis veintitrés, pero decidimos hacerlo. También decidimos quedarnos con Sophie, que era dos años mayor que Steph, era obvio – ahí viene la tía Gemma.

-Oh, mírate que grande estas – grito Gemma a Sophie, luego miro a Steph y sonrió – y tu, que hermosa.

-Tú también te ves muy linda con esa pancita – le dijo Soph riendo. Gemma estaba esperando un hijo de Jhon, ya tenía seis meses. Las niñas terminaron de saludar y se fueron para seguir molestando a los patos.

-¿Listos para la cena de esta noche? – rio ella sentándose del lado de Louis.

-Nena, yo nací listo – se movió graciosamente.

-Lou, no vuelvas a hacerlo – le di un golpe suave.

-¿Por qué no? – siguió haciéndolo.

-Te ves idiota – le dije sincero.

-Uhmm, pero amas a esta idiota – se fue acercando a mí.

-Oh, no, no, no, no frente de mi no.

Todos reímos. Teníamos una cena para volver a estar todos juntos ya que nos habíamos separado por un tiempo porque cada quien estaba viviendo su vida. Era familiar también porque quería estar con mi familia y la de Louis, así que sería una gran cena.

Horas más tarde Louis estaba terminando de ponerle un vestido color azul a Sophie y yo uno verde a Steph, la ultima se fue corriendo a la habitación de juegos mientras la primera se quedo ahí parada, sin decir nada, mirando hacia la nada.

-Tío Harry…

-Si princesa, dime – le mire.

-¿Papi Niall tampoco vendrá esta vez, cierto? – era la cuarta vez que la niña en sus seis años de vida preguntaba que si Niall vendría algún día, yo siempre le decía que él estaba en otro lugar mucho mejor y que siempre lo iríamos a visitar. Ella se iba sin decir nada y yo lloraba, lloraban y era consolado por Louis.

-No amor, el no vendrá tampoco hoy y ya hemos hablado de eso – comento Louis cargándola – ve a jugar con Steph, ¿Vale?

-Vale – sonrió, pero antes de irse, volvió a vernos a ambos – la tía Gemma está embarazada… tío Lou, ¿De donde vienen los bebes?

-Eh…ah… bueno… Hazza – me miro buscando ayuda, yo solo reí – linda… los bebes vienen porque…

-Cuando seas más grande entenderás – le sonreí.