Más hueona y no nazco; Chilensis.

Carrete. (1/2)

La miré. Ella me miró a mi. Yo me cague de la risa. Ella igual.

Llevabamos así como media hora con la Vale. Se había venido el mismo día viernes para poder conversar y pasar más tiempo juntas. A parte el carrete era en la noche, asique nos teníamos que arreglar.

- Hueon, ¿Cómo nos vamos a venir al final?

- Nos vamos a quedar allá po hueona- le dije mientras le daba like a una de las fotos que habia subido Kylie Jenner  a Instagram.

- Ah buena po, así nos ahorramos el peligro de venirmos de noche.

- Si po, aunque mis papás nos van a ir a buscar a las nueve mañana.

- Ah dale, alcanzai de más a comerte al Renato- se río.

- Hueon, no creo que pueda.

- ¿Por qué?

- Va el Hans.

- ¿Me estai hueviando?

- No hermano, va en serio.

- Puta la hueá- se quedó callada un rato- puta no importa, en algún momento van a quedar solos igual.

- Si hueón, tengo que comermelo si o si.

- Vo dale no más.

Mi mamá entró a mi pieza con una bandeja con cositas para comer. La dejó arriba del velador y miró todo el desorden que teniamos arriba de la cama.

- Ustedes desordenan por mil.

- Ay mamá, si son poquitas cosas.

- Tss, ustedes tienen cualquier tontera- se puso a reir- ya tomense el tesito para que se empiecen a arreglar, miren que se demoran más que la chuña.

- Ya bueno mami.

- ¡Gracias tía!- le gritó la Vale antes de que saliera- Hueon amo a tu mamá, siempre nos hace esto.

- Si sé, mi mamá es tan tierna.

Nos pusimos a comer como chanchas. Mi mamá nos había llevado pan tostado con mantequilla, queque, panqueques, té y un cupcake para cada una, pero yo me comí el de la Vale porque me encantan los cupcakes de mi mamá.

Después de terminar fui a dejar la bandeja abajo mientras la Vale se bañaba. En la cocina me encontré con mis papás.

- Anais, ¿a qué hora se van?

- Como a las nueve yo creo.

- Ya bueno, las tengo que ir a dejar.

- Si pi.

- Ah y ven altiro para pasarte plata- sacó la billetera y me pasó un billete de veinte- yo creo que con eso te alcanza, ¿o no?

- Si papá, si no creo que compremos tanto. Total ya le tengo el regalo al Renato.

- Ah dale, pero igual llévate esa platita.

- Si si, gracias papá.

Subí a mi dormitorio y saqué la ropa que me iba a poner.

Eran unos jeans azules rajados en las rodillas, una polera negra y una camisa encima. Unas converse blancas y estaba da' pal éxito.

Cuando la Vale salió del baño me metí yo y me bañe. Estaba muy nerviosa hueon, enserio mal. Me revisé si estaba bien depilada y todo, uno nunca sabe. Me puse la ropa en el baño y cuando salí la Vale se estaba pintando.

- Hueon te vei super bien.

- ¿Tu deci?

- Si hueon. Más de algún hueón va a andar detrás tuyo hoy día.