Una frase y cuatro palabras:
Qué paja la vida.
Ni siquiera sé porque me pasan tantas hueás a mi, ¿A quién le hago daño yo? No molesto a nadie... porque la Alisson no cuenta.
Necesito un cambio, con urgencia.
Pero primero les voy a contar una histor...
- Esque Anais, terminaste en urgencias- se puso a reír y le tiré una almohada.
Ya habíamos llegado a mi casa. Llegamos como a las cinco de la mañana, cuando volvimos del hospital con el Renato y sus viejos. Llamé a mis papás y nos fueron a buscar al tiro, a pesar que la tía decía que no teníamos que irnos, porque el cumpleaños no había terminado todavía. Mis papás me ofrecieron quedarme otro rato, pero me dio mucha plancha por todo lo que había pasado. Al final nos acostamos y estuvimos durmiendo hasta como las tres de la tarde.
- te juro que nunca más le voy a hablar hueon.
- ¿y por qué?
- ¿Como que por qué? Pasé la vergüenza del siglo conchetumare...
- Ya si no es para tanto tampoco.
- ¡Como que no!
- No po- se acerco un poco a mi- una vez mi vieja me pillo con mi ex.
- ¿Dandose un beso?
- No hueona, estabamos dale que dale- la miré con los ojos más abiertos que las piernas de la maca- me castigo y estuve un mes sin ver a mi ex.
- ¡Que atroooooooooz!
Me puse a reir mal. Esta hueona salia con cada hueá. Pasamos harto rato hueando, aunque lo unico que la Vale queria era que le hablara al Renato. El pobre me habia mandado mensajes por whatsapp, pero yo le dije que tenia malo el tactil y que por eso no podia contestarle- le mande un audio, obvio-. Me quiso llamar por telefono, pero lo puse en modo avion y asi creia que estaba ocupada. Me sentia muy perra, pero no podia hablar con el. Me daba demasiada vergüenza.
- ¿Qué van a hacer hoy dia mis niñas?- mi mamá retiro los platos de la mesa y nos miró.
- tengo que ir a la casa del Camilo, porque necesita ayuda para algo y me pidió que fuera.
- Chuta que fome,¿y tu vale que vas a hacer?
- Yo me voy ahora tia, porque tengo cosas que hacer.
- Chuta mijita que fome, pero si tienen que hacer trabajos haganlos al tiro.
- Si po.
Subi a mi pieza y me bañe de una. Me pegué una arregladita rapida y ordene mis cosas para irme a la casa del Camilo. Ahí habiamos quedado para hablar de lo que sea que fuese la hueá. La Vale tambien se baño y se arregló, aunque esa hueona se demoró mas que la chucha. Cuando bajamos mi mamá nos dijo que tuvieramos cuidado y nos fue a dejar hasta la calle, diciendo que quería ver si de verdad ibamos a la casa del Camilo.
Cuando me subí a la micro me despedí de la Vale y me fui escuchando musica por el camino. La casa igual quedaba super lejos, asique aproveché y subí una foto a Instagram.
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