Un Idiota Entrando En Mi Casa

cosas raras

Narra Alex

Hoy  era sábado y saben lo que significa día libre, no tengo que ir a trabajar, después de comer la pizza en la cena mi hermana se quedó a dormir en mi habitación conmigo sinceramente no sé, ni tengo idea de lo que me espera el día de hoy, pero que se le va a hacer.

Veo la hora en mi teléfono y veo que recién son las once de la mañana me voy a levantar ya me aburrí, al levantarme de la cama veo a bam bam echado a los pies de la cama durmiendo pero al pararme de la cama se despierta y da un bostezo.

-hola precioso-le dije acariciándole la cabeza el solo se dedicó a lamerme la mano-ven bebe vamos a hacer algo genial contigo.

Lo tomo en mis brazos y me dirijo hacia la habitación del simio, abro la puerta muy despacio para no hacer ruido, pero lo único que logo hacer es que salga un chirrido como esos de las películas de terror, aun con mi bam bam en mis brazos me dirijo hacia su cama y coloco el trasero del perro encima de su frente mi trabajo aquí está hecho.

Salgo de la habitación y me dirijo hacia la cocina para prepararme algo de comer, cuando estoy entrando me sorprendo a mi hermana cocinándose algo.

-buenos día- me dijo ella.
-hola ¿Qué haces despierta tan temprano?-le pregunte.
-me dio hambre y baje.
-okay
-por cierto que asías en la habitación de Caleb?
-¿yo? Nada-le respondí fingiendo no saber a lo que se refería.
-sí, claro-me respondí sarcástica.
-ya está bien, fue a dejar el trasero de bam bam en su cara.
-¿te he dicho que tienes una mente muy perversa?
-tu no, pero de otras personas si he recibido ese comentario.
-lo imagine, bien como yo ya comí iré a ver un poco de televisión.
-nada indebido.
-sabes que en casas ajenas no, pero no puedo e decir lo mismo de la mía.
-cochina.

Mi hermana sale de la cocina dejándome sola preparando mi desayuno, tomo la caja del cereal y me sirvo un poco en un pocillo. Justo cuando voy saliendo para ir a ver televisión con mi hermana  aparece el simio por la puerta bostezando a la par con bam bam.

-buenos días-me dice él.
-buenos días-salgo de la cocina dejando al simio solo  y me dirijo hacia la sala donde está mi hermana.

-¿Qué vemos?
-tu nada.
-ya enserio ¿Qué estás viendo?
-la rosa de Guadalupe.
-¿Por qué razón estás viendo la rosa de Guadalupe?
-porque me gusta ¿y a ti no te enseñado que no debes cuestionar a tu hermana mayor?
-no, me enseñaste lo contrario a eso.
-hice muy mal.
-totalmente.

Al rato después llega el simio con un tazón con cereal con leche se sienta al lado de mi hermana y deja a bam bam en sus piernas. Creo que el perro quiere más ha el que a mí que lo adopte. Ya estaba en la parte final del capítulo de la teleserie y se han fijado que siempre sierran los ojos y sale un viento mágicamente y que solo los protagonistas lo sienten, eso es raro.

Giro un poco mi cabeza para hablar algo con mi hermana y veo que ella y Caleb están con los ojos cerrados.

-¿pero qué demonios están haciendo?
-¿acaso jamás as visto esta serie hasta el final?-me pregunto Caleb.
-amm no ¿Por qué?
-no tienes nada de cultura hermana mía, no mereces que te dirijamos la palabra.
-pero no entiendo.
-sabes que hacer Caleb- ambos asintieron la cabeza a la misma vez, luego la giraron mirando en dirección contraria a la mía y estiraron sus manos en dirección a mi cara, hasta el perro lo hizo.

-háblale a la mano-dijeron ambos al mismo momento.
-no los entiendo.
-estas mejor así.

Seguimos mirando la series y como siempre todas las tardes a la misma hora, el simio se prepara para salir no se adonde pero pronto lo sabré. Cuando está a punto de salir le hablo.

-¿A dónde vas?- cuando hable paro de caminar y se quedó estático hay en su lugar.

Se gira lentamente aún muy cerca de la puerta mira el reloj de la sala y luego posa su mirada en mí.

-la respuesta está en tu corazón- y salió corriendo de la casa.
-eso fue raro-dijo mi hermana.
-o sí que lo fue, ya verás no se liberara de mi interrogatorio en la noche.

Pase toda la tarde viendo series y películas con mi hermana, pero al final se tuvo que ir y me quede sola ¿que podría hacer?

Al parecer estuve pensando un rato muy largo por que escuche que abrían la puerta al dirigir mi mirada hacia la puerta me encuentro con un simio de lo más relajado. Aquí comienza la misión de averiguar que está pasando en la vida de ese simio.

-¿Dónde estabas?
-en un lugar-me respondió con un tono de voz sarcástico y juguetón a la vez.
-¿en qué lugar precisamente?-le volví a preguntar.
-¿Por qué tanto interés en mi vida Alex?
-solo simple curiosidad.
-la curiosidad mato al gato ¿recuerdas?
-sí, pero el gato murió sabiendo.
-totalmente cierto.
-¿preparo la comida o aun no?
-si tengo hambre.

Narra Caleb

Después de ver la rosa de Guadalupe con Alex y Carly vi la hora y me acorde de algo que tenía que hacer como todas las tarde, recojo mis cosas y cuando estoy a punto de salir Alex me llama y me pregunta que a donde voy y como no soy bueno para mentir se me salió la primera frase que me vino a la mente: la respuesta está en tu corazón.

Lo se soy un asco de mentiroso pero no le puedo decir a nadie que cada tarde a la misma hora voy a la casa de la abuela a ver telenovelas con ella y comer las cosas ricas que me preparan, pase toda la tarde con ella debatiendo sobre temas de la telenovela o criticando las actuaciones are que esta abuela vea teen Wolf u otras series que no sean telenovelas mexicanas. Cuando llego el momento de irse la abrase como lo hice el día anterior y me voy de la casa, al llegar veo a Alex sentada muy quietamente que me daba miedo creo que escucho la puerta porque voltio su mirada a mí  y practicante me bombardeo con preguntas. Respondí, pero creo que no de la forma en la que ella quería.

¿Qué querían que hiciera? Llegar y decirle a la primera pregunta “estuve en la casa de la abuela, ya que todas las tardes voy para allá a ver telenovelas y comer cosas ricas junto a ella” nohhh eso jamás, mientras preparo la comida ella pone la mesa y cuando está todo listo no sentamos a comer.

-¿te acuerdas el juego que hicimos en el centro comercial el día que vimos  miguel?- le pregunte a Alex.

Ella solo asintió ya que estaba masticando la comida dentro de su boca.

-si ¿Por qué la pregunta?
-por qué te toca a ti contestar las preguntas.
-está bien has las preguntas que quieras que yo responderé.

Continuará...
él próximo sabado. Las leo luego