Capítulo 16

200 8 0
                                    


Golpeó una vez.

Golpeó otra vez.

Luego de segundo de golpear se abre la puerta dejando ver a una mujer junto a dos niños.

—Buenas noches señora — saludo a la mujer — Nos hemos perdido y veníamos a pedirle si nos dejaría pasar la noche en su hogar.

—Pasen — ella hace un gesto con la mano.

Junto a Petrov entramos y nos sentamos en unas sillas.

—¿Quienes son ustedes? — nos pregunta.

— Soy Alisa — lo primero que se me ocurre es el nombre de ella, el nombre de mi madre.

—Yo soy Andrey — se presenta Petrov.

—¿Y que hacían tan tarde? — pregunta la mujer.

—Nos dirigíamos a la ciudad, pero obscureció muy pronto — dice Petrov mirando a la mujer.

—¿Son pareja? — pregunta una pequeña niña.

—Si — respondo rápidamente sin pensar.

—Que jóvenes son — dice la mujer mirándonos — Pueden pasar la noche aquí, no se preocupen.

—Muchas gracias señora — le agradezco.

—No es nada — nos sonríe ella.

La niña pequeña se acerca con comida para nosotros.

—Gracias — le sonrío aceptando el plato de comida.

—Gracias — le sonríe igualmente Petrov.

Enseguida empezamos a comer ya que no habíamos comido desde la mañana.

—Parece que no habían comido — dice ella sentada frente a nosotros.

— Si— digo mirándola — No habíamos comido desde muy temprano.

Luego de terminar la comida se nos acercan los niños.

—Eres muy lindo — dice la pequeña niña mirando a Petrov.

— Gracias — le sonríe Petrov — Tú eres muy bella.

— Tú novia es realmente muy bella — le dice ella a Petrov para luego mirarme —¿Que haces para serlo?

—No hago nada — apoyo mi mentón en mi mano.

—Quisiera ser tan bella como tú — ella baja su mirada.

—Créeme que lo eres — toco su brazo a lo que ella levanta su mirada.

—Hija, déjalos ellos tienen que descansar — le dice la mujer a su hija.

—Si mamá. Yo los llevaré al cuarto — le dice la niña poniéndose de pie.

Junto a Petrov nos ponemos de pie y seguimos a la niña que nos lleva finalmente a un cuarto con una cama.

—Espero que duerman bien. Adiós — se despide la niña para enseguida cerrar la puerta.

Hay solo una cama.

—¿Que haremos ?— preguntó mirándolo.

—Tú dormirás en la cama y yo me quedaré en la silla — dice el mirándome.

—Está bien — respondo insegura para enseguida recostarme en la cama con lo que tengo puesto.

No puedo cerrar los ojos sabiendo que Petrov está dormido en una silla todo adolorido.

—Petrov — llamó su atención a lo que el abre los ojos.

Realeza prohibida Donde viven las historias. Descúbrelo ahora