[Akashi]
Los miraba esperando algún movimiento para poder atacar tambien.
Ambos me miraban, estaban furiosos pero yo lo estaba más por el simple echo de que habian secuestrado a alguien muy importante para mi.
El primero en acercarse a mi fue el lacayo del que parecia ser el jefe.
Agarro el bate del tipo que estaba tirado y lo agitó frente a mi, estos delincuentes no peleaban limpio asi que debería de tener cuidado.
Me quite mi chaqueta y la enrede en mi brazo izquierdo para poder amortiguar los golpes.
Me puse en posicion para poder atacar.
Tiro el primer golpe y lo esquive pronto, volvió a tirar otro y tambien lo esquibe. Fruncio el entrecejo y tiro el tercer golpe, esta vez lo recibí con el brazo que tenia la chaqueta y lo golpee en el estómago haciendo que cayera de rodillas.
Golpee su cabeza dejándolo inconciente en el piso tambien.
-Malditos inutiles, si quieres acabar con algo tienes que hacerlo tu mismo- el que parecia ser el jefe de los secuestradores miraba a sus lacayos quienes estaban en el suelo.
-Eso lo hubieras echo desde el principio en vez de meter a personas inocentes-
-Era necesario, aunque al principio no sabia que tenia relación con el joven señorito de la familia Akashi, tendré que agradecerle muy bien a mi novia esta vez-
-¿Que tiene que ver eso ahora mismo?-
-Que todo esto era solo un susto hacia ella, pero al recibir tu llamada nos dimos cuenta de que podia sacar algo más, todo empezó como una venganza de mi novia hacia la tuya pero mira, en que termino todo- sonreia.
-Eres un hijo de perra, ¿sabias?- lo mire engreida mente.
-Maldito...- eso lo enfadaba. Sonreí de nuevo.
Corrió hacia mi, esta vez fue sin ningún objeto solo con el puño limpio. Perfecto.
Solo que no vi su movimiento por completo y su puño fue a dar a mi cara haciendo que callera de rodillas.
-Seguro que no te lo esperabas, pensaste que al no usar nada seria facil, te equivocas- sonrio alardeando.
Lo mire, escupí un poco, el sabor a hierro lo sentia por mi boca. El maldito me dio un buen golpe.
Era rapido, ademas de que tenia una gran fuerza, su físico a pesar de que se veía como una persona común guardaba una fuerza enorme y sumandole, tenia una buena agilidad.
Me levante, limpie la poca sangre que me habia quedado en el labio. Lo mire sonriendo.
Su posicion era la de un boxeador, un boxeador contra una persona que habia aprendido artes marciales. Seria interesante.
Ambos nos enfrascamos en una pelea reñida donde ninguno dejaba de acertar a su enemigo, soltando golpe a diestra y siniestra.
Empezaba a acostumbrarme a sus golpes, analizaba cada movimiento que utilizaba. Una idea paso por mi cabeza, utilizar esa habilidad que tanto me habia ayudado en el basketball, el ojo del emperador y el rompe tobillos.
Me aleje solo unos centímetros. Lo suficiente para hacer unos movimientos utilisando un balón imaginario, el tipo miro desconcertado y callo al suelo de nalgas. Era mi oportunidad.
Abrí mis brazos y agarre velocidad haciendo un movimiento como si fuese aplaudir pero con su cabeza entre mis manos. Aturdiendolo y rebentando sus tímpanos.
Cayó desmayado.
Mi respiracion era agitada, nunca habia recibido una buena paliza como ahora pero eso no importaba ahora.
Me apresure a ir con Chizuro quien parpadeo un poco al mirarme.
-Tranquila, te sacaré de aqui ahora mismo- desate las cuerdas y le quite la cinta de su boca.
La mire inspeccionando por alguna herida, me senti aliviado cuando solo la vi con suciedad y no con heridas.
-Iremos a casa, perdóname por no hablarte en este tiempo, me di cuenta muy tarde que si dejaba que mi orgullo ganara yo te perderia- la mire mientras la ayudaba a levantarse.
-No te disculpes, en parte tambien tuve la culpa, por mi culpa estas tan herido- toco mi mejilla la cual tenia un corte.
--Vámonos de aqui- estaba por ayudarla a caminar cuando ella abrio los ojos sorprendida.
-¡Atras de ti!- grito.
Gire la cabeza, tarde. El golpe llego directo a mi estomago tomándome por sorpresa, tosi un poco.
-¡Akashi!- la voz de Chizuru me hizo reaccionar.
-A... aleja... te... - mi voz a penas y salio.
Veia como ella empezaba a llorar asustada.
Estaba en el suelo tirado tratando de recuperar la fuerza, el maldito bastardo aun seguia en pie despues del golpe que le habia dado, era un monstruo.
Vi como sacaba algo de su pantalón, era una navaja. Sonrei ironicamente, si tenia un arma.
Me prepare, el golpe que me habia dado me habia quitado fuerzas y no podia ponerme en pie.
Pero el golpe nunca llego, más bien senti un peso que caía a mis pies. Mire sorprendido y asustado.
-¿Chizuru? Oye, contesta- mi vista fue adonde ella tenia su mano.
En el estomago tenia una mancha de sangre la cual se hacia cada vez más grande, puse mi mano sobre la suya llenándome de su propia sangre.
-Lo... siento, dijiste que... retroce... diera- ella sonreia pero tristemente.
-No hables, te llevare al hospital ahora mismo, no cierres los ojos Chizuru, oye- le golpee un poco su mejilla al ver que empezaba a cerrar sus ojos.
-Tengo... sueño-
-No cierres los ojos maldita sea, Chizuru, oye, ¡Chizuru!- sus ojos se fueron cerrando poco a poco.
La moví un poco, escuchaba a lo lejos un grito desgarrador, sentia mi garganta arder, ah, era mio ese grito.
-Eso le pasa por entrometida- escuche.
Levante la vista. El tipo estaba sonriendo con la navaja en mano, tenia sangre de Chizuru en sus manos, la deje recostada en el suelo y enfadado me levante.
-¿Que, ahora vengaras a tu novia?- su sonrisa me hacia enfadar más y ver las cosas nubladamente.
No conteste más sin embargo le atine un golpe con la palma de la mano con toda mi fuerza a su tabique, escuchando un crujido de su nariz rompiéndose.
Una patada a las costillas y otro hacia el femur, sentia tanta rabia que queria matarlo. Pero unos brazos me detuvieron.
-Joven amo, tranquilicese, no vale la pena, la señorita Chizuru sigue viva asi que vaya con ella, no se manche las manos con sangre de personas que no valen la pena- lo mire.
Era la persona que siempre se habia quedado conmigo, mi chofer. Poco a poco empecé a volver en mi.
Asenti, fui hasta donde Chizuru y me asegure de que seguia viva y asi era, su corazón seguia latiendo pero débilmente.
Si a ella le pasaba algo yo me iria con ella.
ESTÁS LEYENDO
Mi emperador. (Akashi Seijuro )
Fanfiction《TERMINADA》 Chizuru. Una chica la cual es transferida de escuela, conoce a la generación de los milagros. Pero sólo uno de ellos capta su atención. Después de cierto tiempo, ella se enamora pero... todo eso conlleva mucho peligro. ¿Akashi podrá sent...