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"Siempre, siempre, siempre cree en ti, porque si no lo haces, ¿quién lo hará cariño?"

Nate

Revolvía mi armario en busca de algo elegante para ponerme. Lo único que conseguí fue una chaqueta azul, con esto bastará. Al cerrar el placard, una notita adhesiva cayó a mi pies.

"Si estás esperando el momento perfecto, es ahora"

Mamá.
Últimamente ha estado haciendo esto mucho más que antes. Está feliz, toda mi familia lo está, por lo tanto yo también debería.
Por un lado lo estoy, pero por el otro me siento mal.

Empecemos por el lado malo: Allyson.

Era una gran amiga, me encantaba pasar tiempo con ella y debo admitirlo, me ponía extraño con sólo verla. Siempre me pareció hermosa pero éste último tiempo que nos vimos, aún más. Tiene una increíble personalidad y cambia completamente cuando está conmigo, conmigo es... diferente a como es con los demás.

Llegué a conocerla, compartimos muchos gustos. Pero a pesar de eso, ella es un misterio. A veces sentía que no me estaba contando todo, se portaba extraña y nerviosa hasta que estábamos solos y volvía a entrar en confianza conmigo.

Sin embargo todo eso ahora es pasado. De un momento a otro dejó de hablarme, es como si yo no existiera más y sin importar cuanto intenté hablarle ella me ignoró y simplemente se alejaba.
Tal vez hice algo, no lo sé, aprendí que ella es muy sensible, quizás algo que dije le afectó a tal punto de cortar nuestra amistad.

Por un momento se me cruzó la idea de su novio. Ally quizás le contó que éramos amigos y por lo que vi, es un tipo celoso.
No me metería con alguien en pareja, pero no todo el mundo piensa lo mismo.

Es triste dejar ir una persona que quieres. Pero las cosas sucedieron de ese modo y yo voy a respetar lo que ella quiera.
La saludé un par de veces más en la universidad, pero dejó de ir por un tiempo y cuando volvió casi ni nos cruzamos.

Me enoja al mismo tiempo, que me haya alejado así sin más, sin decirme nada, sin ninguna razón.

Volviendo a la parte buena, en mi casa todo marcha bien, estamos muy bien económicamente, Sam aprobó dos materias que le eran imposible y yo, bueno, estoy viéndome con Anna.

De hecho, ésta noche salgo en una cita con ella a un lugar elegante, y espero que ésta chaqueta sea suficiente.

Ya tuvimos varias citas antes, es interesante y una muy buena persona. Me distrae de todo y siempre me saca una sonrisa. En mi familia la quieren mucho, se quedó a cenar la otra noche y los encantó a todos. Ellos saben lo que me dolió lo de mi ex novia Jasmine y les alegra verme salir con otras chicas.

Bajé las escaleras para irme y me encontré con mi madre y hermana en la sala.

—Ya me voy, ¿qué tal estoy? —les pregunté dando un pequeño giro.

Sam silbó y mi madre se levanto a apretujar mis mejillas.

—Como todo un caramelito, mi príncipe —dijo mamá con voz dulce.

—No sé si es exactamente lo que buscaba conseguir —hice una mueca —. Esperaba algo más como "el hombre más sexy del mundo".

—Eso también tonto —dice Sam riendo —. Que la pases bien, saluda a Anna de mi parte.

Silencio ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora