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Miedos

Especial 2/2

Nate

¿Qué pasa cuando sientes que nada es suficiente? Que nada de lo que haces va a ser suficiente sin importar cuánto te esfuerces y lo intentes una y otra vez.
Es como tratar de llenar con agua un globo con agujeros, te hartas de llenarlo y nunca estará completo, siempre se desbordará porque esas pequeñas fallas harán que toda el agua que acumules se escape a través de ellas.

Si en lugar de agua en un globo hablamos de felicidad y relaciones, tampoco sería muy bueno en eso.
Nunca las cosas me salieron bien, y comienzo a pensar que el problema no son ellas, soy yo.

Nunca olvidaré la primera vez que me empecé a fijar en Jasmine, ella era pequeña, tan pequeña que las demás niñas la sobrepasaban en tamaño, y en consecuencia, era el objeto de burla y la acosaban constantemente.
Hasta que, eventualmente, Jasmine creció y se volvió mucho más hermosa que todas las demás.
Un día llegaron a golpearla, solían hacerlo y TJ y yo la defendíamos, pero ese día la habían tratado muy mal, hasta le habían cortado mechones de su largo cabello, pero Jasmine se hartó de todo, se puso de pie y se defendió por sí sola.

Desde ese momento no volvieron a molestarla, y yo estaba muy orgulloso de ella. La quería...
Jasmine había adquirido confianza y una seguridad en sí misma que la hacía sentir invencible.

Se convertía de a poco en toda una mujer, por lo que atrajo la atención de la población masculina, mientras yo sólo estaba en la zona de mejor amigo, y debía conformarme con amarla desde ese lugar.

Un día fuimos a una fiesta todos juntos, y en un momento nos separamos y fuimos cada uno por su lado. Hasta que horas después la encontré borracha y resistiéndose a un grupo de chicos que intentaban tocarla. La saqué de allí y la llevé conmigo, otro en mi lugar se habría aprovechado de la situación pero yo solo quería cuidarla.

Creo que siempre estuvo en mis instintos proteger a los demás.

Jasmine confesó que me quería tiempo después cuando se dio cuenta que nadie la amaba y respetaba como yo, y que podía confiar plenamente en mí, nunca la defraudaría.

Pero la historia se dio vuelta, y la que me defraudó a mí fue ella.
Debí darme cuenta antes, Jasmine estaba cambiando, desde el accidente de Mandy ya no era la misma, se había convertido en lo que es ahora, egoísta, manipuladora, codiciosa y no le importaba pasar por encima de los demás con tal de conseguir lo que quería.

No se detuvo hasta hacerme daño, y luego lo volvió a hacer.
Cuando ya me había levantado y vuelto a creer en el amor, y tenía a mi lado a la chica indicada, me volvió a arruinar.

Pero sé que tal vez es un poco injusto culparla de lo que salió mal en mi relación con Allyson.

Debo entenderla, y lo hago, juro que lo intento. Pero en el afán de protegerla, me olvidé de mí mismo.
Olvidé de ocuparme de mis problemas.

Y fui un egoísta, ella estaba asustada y lo empeoré.
Desde que la conocí supe que era diferente y me lo demostró, me hace muy feliz.

Pero mi maldita desconfianza, y el miedo a vivir todo de nuevo, a tener que sufrir por un amor que no alcanzó, me cegó y no me permitió abrazarla tan fuerte que sus propios miedos se fueran.

Debo aprender que no todas las chicas son como Jasmine.

Probablemente Allyson me odia, por no ser el novio que ella merecía, y no la culpo por compararme con Blake, aunque me duela, debo entenderla.

La amo y no quiero perderla, lo único que rescato de esa última noche que la vi, es haberle confesado cuán profundos son mis sentimientos, que la amo a pesar de todo y contra todo.

Estar tirado en mi habitación no soluciona nada, no lo hizo antes y no lo hará ahora.
Si quiero arreglar las cosas debo arreglarme a mí mismo y salir a buscarla.

Me duché y me vestí, se acabó lo de revolcarme en autocompasión.

En el bolsillo de mi chaqueta encontré un papel doblado, se trataba de una de las notas de mamá, y nunca había sido más cierta como ahora

"Jamás tendrás un gran amor, pero estarás tranquilo, te sentirás seguro. El mundo pasará sin ti, no sentirá tu ausencia. Tendrás miedo a volar, no te crecerán alas.
¡No estés seguro!"

Silencio ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora