Owl eyes. (Camren)

Lie.

La vida cambia en un instante. A veces gira en nuestra dirección, pero con mucha más frecuencia rueda lejos de nosotros, flirteando y haciendo señas mientras se marcha: Hasta la vista, cariño, fue bonito mientras duró, ¿verdad?

Abrió los ojos de golpe, enderezando su cuerpo para poder sentarse en aquella extraña superficie en la que se encontraba. Tragó pesado, tomando con delicadeza el principio de la tela ensangrentada que cubría su torso.

Un profundo suspiró logró escaparse de sus labios, los cuales estaban helados debido al frío que hacía en ese preciso momento. Observó temerosamente la herida que se encontraba en su abdomen.

Era una herida de espada.

Se apoyó de sus manos para ponerse de pie, presentando un poco de dificultad debido a la herida que tenía. Apretó los dientes tratando de ignorar el dolor que sentía sin embargo, le resultaba imposible pues la espada había atravesado su cuerpo por completo.

Giró la cabeza con la esperanza de encontrar algo a su alrededor, desafortunadamente no tuvo éxito. Estaba en una enorme habitación, oscura y vacía con algo de neblina en ella.

Frunció levemente el ceño mientras se acercaba a una de las oscuras paredes de la habitación, sorprendiéndose al notar que repentinamente un enorme espejo de cristal aparecía, provocando así que ella apreciara su reflejo a través de él.

Estoy atrapada en una mentira.

Sus ojos se cerraron con fuerza segundos después de notar que su reflejo cambiaba repentinamente, convirtiéndose en otra persona. Una persona que ya no se encontraba con vida.

Una de las miles que habían muerto por su culpa.

Quiero escapar.

Sintió la frustración invadir su cuerpo al girar una y otra vez sin encontrar un punto de escape. Al no tener éxito, le dio la espalda al reflejo que se encontraba en el espejo, observando cómo la joven de prendas ensangrentadas colocaba ambas manos encima de sus oídos, queriendo ignorar el sonido de las cigarras que se encontraban en el exterior.

Sus rodillas se debilitaron después de un par de segundos, provocando así que su cuerpo cayera directamente al suelo una vez más.

Sus manos temblaron después de que su cabeza quedó apoyada en el frío suelo de aquel inquietante lugar, intentó abandonar su forma física, queriendo invocar a la lechuza que habitaba en su interior intencionalmente.

Su vista se nublo después de algunos intentos, maldiciendo por lo bajo al no ser capaz de conseguir nada.

Soltó un suspiro antes de cerrar los ojos por algunos minutos, un montón de recuerdos pasando por su mente una y otra vez, torturándola con la sangre, el sufrimiento y los cientos de cuerpos sin vida que había visto a lo largo de su existencia dentro y fuera de un campo de batalla.

Abrió los ojos con lentitud cuando escucho el sonido de un aleteo ligero. Levantó ligeramente su cabeza del suelo, una sonrisa inconsciente asomándose en sus labios al notar aquella oscura mariposa que había aterrizado justo frente a su cuerpo debilitado.

¿Te quedarás a mi lado?

La pequeña y oscura mariposa permaneció en el lugar que se encontraba, provocando una risita nerviosa por parte la joven con prendas ensangrentadas.

Ahora... sácame de éste infierno.