Un chico ciego que conoce el mundo a través de los ojos de un delincuente.
◕ Errores de ortografía y de narración.
◕ Historia totalmente de mi autoría; prohibida su copia; adaptaciones solo con permiso.
◕ (2018)
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Últimamente SeokJin no podía dejar de pensar en una cosa o mejor dicho en una persona y esa única persona era:
Min Yoongi
Quería imaginarse como era, que apariencia tenía, cuál era el color de su cabello, sus ojos, que tipo de sonrisa tenía. Él menor había aprendido a conocer primero el interior de las personas, luego estaba él imaginarse como serían físicamente aunque pensaba que eso era lo de menos. No se necesita saber como era físicamente una persona para poder apreciarla, SeokJin sabía eso, amaba a todos las personas que lo rodeaban sin necesidad de saber como lucían.
Lo que él creía era que la belleza de una persona estaba en el interior. Entonces sabía que su nuevo amigo debía ser hermoso pero su corazón quería más, ese misterioso chico necesitaba tener una imágen en su mente.
Hoseok entró a la habitación del menor, sonrió al ver la imagen que el castaño otorgaba. Envuelto en sus cobijas mientras abrazaba un suave peluche que Taehyung le había obsequiado.
—Jinnie... Jinnie— Hoseok murmuró con suavidad pero solo logro que él castaño se revolviera en sus cobijas tomando una mejor posición, nuevamente sonrió pero al voltear hacía la mesita noto que la máquina de escritura especial que el menor utilizaba para su cecografía, sobresalían unas palabras "Mi nuevo amigo es misterioso, huele a tabaco pero también a menta, su voz me gusta...".
Hoseok volteo a ver a Jin con una mirada preocupada dejando la hoja en su lugar. —¿Nuevo amigo?— suspiró acercándose hacía el menor, paso suavemente su mano por el suave cabello ajeno para luego salir sin hacer ruido.
Él llegó a la sala de la mansión, ahí se encontraba sentado en el sillón comiendo palomitas un chico rubio, él cuál al ver entrar al mayor en la sala de un salto se levantó. —¿Y Jinnie?
—Está dormido— dijo Hoseok aún sin dejar de pensar en aquellas palabras escritas por el menor.
De pronto él chico rubio poso su dedo en la frente del mayor negando con la cabeza. —Si sigues arrugando de esa manera la frente, te volverás viejo antes de tiempo.
Él pelinegro alejo con amabilidad la mano del chico. —Ocurre algo malo, Taehyung.
—¿A que te refieres?— preguntó curioso Taehyung sentándose nuevamente.
Hoseok dejo salir un suspiro. —Creo que alguien se ha estado metiendo a la casa, se ha hecho amigo de Jinnie y si no me equivoco se trata de un delincuente, esto debe ser un error.
Taehyung solo pudo observarlo en silencio no por qué no tuviera que decir pero ambos tenían perspectivas diferentes, al parecer el rubio ya había visto antes entrar por la ventana de la habitación de Jinnie a aquel chico, al principio se alarmo pero al escuchar la risa del menor y verlo cada día más feliz, no se sintió capaz de quitarle esa felicidad además no le parecía malo esa amistad, él amaba a SeokJin como si fuera su hermanito menor y lo que más deseaba era la felicidad de ese chico que sonreía sin importar lo demás o que sonreía para los demás con el simple hecho de hacerlos feliz.
