Un chico ciego que conoce el mundo a través de los ojos de un delincuente.
◕ Errores de ortografía y de narración.
◕ Historia totalmente de mi autoría; prohibida su copia; adaptaciones solo con permiso.
◕ (2018)
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El reloj marcaba las 6:00 a.m, era hora de que todos los miembros de la seguridad de la familia Kim se despertarán.
Yoongi se removió entre las sábanas, quería dormir más, normalmente despertaba hasta que quisiera pero ahora tenía que cumplir con su nuevo trabajo, suspiró antes de abrir totalmente los ojos de pronto solo sintió como alguien brincaba hacía su cama.
Yoongi abrió los ojos, observando al chico frente a él. — Bájate.
—Tu cama es más cómoda— Tae amplio una enorme sonrisa, "tan temprano y ya está de buen humor" pensó Min.
—Si ya están despiertos, apresurense que no es momento de jugar— demandó Hoseok asomándose un poco por la puerta que Taehyung había dejado abierta. Yoongi bajo a la cocina, observó a Hoseok quién estaba cocinando, se sentó a un lado de Jimin quien parecía absorto en una lectura, "aburrido" pensó. Luego llegó la presencia más extrovertida.
—Tengo hambre, ¿que preparaste papá?— preguntó Taehyung, Hoseok lo observo avergonzado, Jimin alzo un poco la mirada dejando salir una risita, Yoongi los observo sin decir nada, ahora que convivía más con ellos pudo notar que eran realmente extraños.
"Como una familia" tal vez.
Yoongi entro a la habitación de SeokJin, observando al menor dormido, se sentó a su lado, contemplando su rostro sereno, paso su mano para quitar el cabello que caía en la frente de este.
—Te quiero— murmuró cerca de los labios del menor, ni siquiera los rozó, se mantuvo al margen para luego alejarse. Sus latidos comenzaron a acelerarse de sobre manera cuando recibió de respuesta, "Yo también te quiero".
Volteo observando como SeokJin tenía el cabello apuntando a todas direcciones, se perdió en esos ojos, deseaba poder ser visto por él, que sus miradas se conectaran. Odiaba no poder reflejarse en su mirar.
—Yoongi-chi— dijo Jin buscando con su mano la del mayor, al hacerlo, busco entrelazar sus dedos. —Mi Yoongi-chi... Te quiero mucho.
Yoongi estaba a punto del colapso, era la primera vez que alguien le decía esas palabras pero no debía confundirse, SeokJin era alguien con un enorme corazón pero solo por esta vez quería tomar esas palabras a su conveniencia.
Aparto sus pensamientos negativos y sonrío. —¿Quieres desayunar?
—¡Si!— respondió Jin con su enorme sonrisa.
Yoongi le revolvió el cabello con una sonrisa. —Hoseok dejo comida.
—¿Ya se fue?... Entonces mamá tampoco esta?, hace tiempo que no comemos juntos— murmuró Jin un poco desanimado.
Yoongi lo observo atentamente. —No te preocupes, por eso estoy ahora contigo, yo seré tu compañía.
—Por eso me gustas— dijo SeokJin con una risita, las mejillas de Yoongi tomaron color e iba a decir algo pero una tos fingida lo hizo voltear.
—Buenos días, Jinnie...— Jimin apareció y se acercó confundido ante la atmósfera del lugar.
—¡Jiminie!— exclamó el menor emocionado.
Jimin caminó hasta él con una sonrisa. —Vamos, te ayudaré con tu baño.
—¿¡Que!?— exclamó Yoongi exaltado.
Jimin lo observo con molestia rodando los ojos. —Él se baña solo, es solo por si necesita algo.
Jimin tomó de la mano al menor metiéndolo al baño y cerro la puerta casi en la nariz de Yoongi, quién chasqueo la lengua y se sentó en la orilla de la cama.
Jimin salió después de unos minutos, observando con molestia a Yoongi. —¿Qué?, nunca dije que me quedo adentro, Jinnie puede valerse por si mismo.
—Nunca dije tal cosa...— Yoongi se levantó y salió de la habitación con una gran sonrisa.
