Un chico ciego que conoce el mundo a través de los ojos de un delincuente.
◕ Errores de ortografía y de narración.
◕ Historia totalmente de mi autoría; prohibida su copia; adaptaciones solo con permiso.
◕ (2018)
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Hoseok recorrió el pequeño y abandonado lugar, sus ojos recorrieron cada rincón hasta posarse en aquel jovencito que estaba sobre el sillón con la camisa abierta.
—Quiero hablar contigo, a solas— Hoseok menciona con un gran suspiro sintiéndose incómodo por la intensa mirada de Kim.
—Oh, ¿no crees que pides demasiado?, ni siquiera tenías invitación y... ¿me pides que corra a mi bello acompañante?— sonrió malicioso Namjoon.
Hoseok arqueó la ceja. —Lo siento, entonces hablaré frente a él.
Jungkook subió sus piernas en el sillón, sonriendo coquetamente observando a Hoseok, esto puso nervioso al mayor, él jovencito era extremadamente atractivo.
No era ciego cómo para no darse cuenta.
—¿Y bien?, ¿Qué sucede?— Namjoon dijo sentándose entré las piernas del menor. Hoseok se aflojo la corbata, comenzaba a sentirse incómodo en este lugar.
—Hablar sobre Min Yoongi, hasta donde sé, aquí vivían los dos y se conocen desde hace años— dijo Hoseok.
—¿Por qué quieres hablar sobre él?, ¿quién eres tú?— preguntó Namjoon cambiando su semblante coqueto a uno serio. No hablaría sobre Min con absolutamente nadie que no fuera Jungkook.
—Lo quiero lejos de Kim SeokJin— dijo seriamente Hoseok. Namjoon se tensó, ese nombre, sabía a perfección que era el del hijo de la familia Kim, en donde ahora trabajaba.
—No tengo nada que decirte sobre Min, pero podemos hablar de otras cosas, precioso— Namjoon dijo, se levantó, caminó hasta Hoseok poniendo su mano en la barbilla de este y sonrío. —Pero podemos hacer un trío.
Y lo siguiente que vio fue el puño de Hoseok en su cara, el azoton de la puerta y las carcajadas de Jungkook.
Hoseok salió del viejo edificio, iba totalmente enojado, acudir a Kim Namjoon fue el peor error, él solamente era un sucio pervertido. Averiguaría por su parte, después de todo, saber sobre el pasado de una persona no era difícil, tampoco esconderlo o huir de él.
Yoongi se sorprendió al ver cientas de copas tiradas en el suelo, caminó hasta el sillón de la sala en donde la señora Kim balbuceaba cosas sin sentido y bebía de una botella de vino.
—Señora Kim, debería dejar de tomar e ir a descansar a su habitación.
—B-ba..sta... Solo llámame JiHyun...— respondió hipando e iba a levantarse pero se cayó al suelo. Yoongi iba a ayudarla a levantarse pero recibió un manotazo.
—¡No me toques, JaeRim!— gritó histérica.
Yoongi se tensó, ese nombre era del señor Kim.
—¿Porqué tenías que engañarme y con él?.... ¿Con un maldito hombre?— decía con sus lágrimas cayendo por sus mejillas y aventó la botella rompiéndose en mil pedazos.
Yoongi cubrió su boca con su mano, sintió su estómago revolverse, sabía perfectamente quién era aquél hombre del que la señora Kim hablaba.
Kim JaeRim tuvo una aventura con Min JooHyuk, su padre.
Yoongi solo pudo observarla conteniendo las ganas de llorar, la mujer estaba destrozada aún después de años de la muerte de su esposo y esa traición arrastraba a SeokJin.
Abrió con cuidado la puerta de la habitación de Jin, lo observó dormir profundamente y se acercó a él, otorgándole un suave beso en los labios.
—¿Yoongi-chi?— preguntó el menor removiéndose.
—Te amo.
SeokJin acuno al mayor entre sus brazos. —Yo también por eso voy a protegerte, lo prometo.
Yoongi sonrió, este chico era la cura para sus malos pensamientos y estaba decidido, si ellos no podrían ser felices por culpa del pasado.
