En tu mirada| YOONJIN

45| Una despedida

— Tal vez debí quedarme ciego para seguir ignorando el mundo real — Seokjin dijo observando fijamente una fotografía de Hoseok junto a Taehyung. —Del cuál no estoy listo para enfrentar.

Hoseok se acercó hacía Jin negando con la cabeza. — ¿Y el mundo que deseabas conocer?

— Nisiquiera he tenido tiempo para apreciar las bellezas del mundo. Me he enterado de cosas horribles — SeokJin dejó caer su cabeza sobre el regazo del mayor.

— El Jin que conozco no es así. Se que es muy difícil saber lo que tus padres te ocultaban pero debemos ser positivos — Hoseok sonrió acariciando la mejilla contraria. —Tenemos un mundo por conocer, todo aquello que deseas conocer te espera allá afuera.

SeokJin se enderezó mirando fijamente a su semejante. — Tienes unos ojos preciosos, Hoseokie. Eres tan atractivo justo como imaginé, tú también eres una belleza del mundo.

Hoseok se sonrojo furiosamente y bajo la mirada. El que Jin le diera un cumplido así lo puso nervioso, había olvidado lo mucho que este chico movió su mundo e inevitablemente sonrió.

— ¡Hoseokie! — la dulce voz de Taehyung resonó en toda la habitación y sintió calma en su corazón.

Es cierto. Taehyung se había encargado de borrar todos aquellos sentimientos malos que alguna vez sintió y ahora su corazón y mente eran simplemente gobernados por este chico.

Taehyung dejó caer las bolsas que traía en su mano al ver a SeokJin inmediatamente su vista se nublo debido a las lágrimas y se abalanzó hacía Jin estrujandolo en sus brazos.

Su hermoso niño había vuelto.

— Te extrañé tanto — lloriqueo Taehyung aferrándose a Seokjin. Había estado deseando cada día poder volver a tener así de cerca a Jin.

SeokJin sonrió emocionado, Taehyung era tan dulce y tierno.  — Yo también te extrañé, demasiado, a todos. Desde que recupere la vista trataba de imaginar sus rostros.

Después de media hora, también Jimin se unió al encuentro y los tres mayores no querian soltar a su precioso ángel. Lo habían necesitado tanto en su vida.

Y aunque SeokJin estaba feliz de conocer físicamente a los guardianes que siempre lo cuidaron y protegieron. Se sentía triste por el rechazo de YoonGi. Hoseok le había dicho que tal vez Yoon sintió miedo. Pero Seok, creía que si estaban juntos cualquier duda o tormento del pasado podría ser fácilmente superado.

— ¿Alguno de ustedes podría darme la dirección del empleo de Yoon? —preguntó Jin ante la atenta mirada de los tres mayores.

Si Yoongi había decidido huir, él lo enfrentaría.

Yoongi se colocó su abrigo y salió del restaurante para irse al departamento de Namjoon porque no había regresado al de Hoseok y Taehyung pero al salir y levantar la mirada, se vio reflejado en los ojos color avellana de su chico.

SeokJin sonrió con las mejillas rojas, tenía un enamorado muy bonito pensó, al ver de cerca a YoonGi, su piel pálida y sus ojos negros le daban un toque encantador y su mirada felina lo hacía un ser misterioso. Pero a pesar de que la belleza de Min eran impactante, estaba mucho más feliz de saber que los sentimientos que poseían eran mutuos.

De que está persona frente a él era su primer amor.

— Yoongi... sus palabras se vieron interrumpidas ya que el rubio siguió caminando y lo ignoro totalmente.

Pero SeokJin quería que Yoongi lo enfrentará, el no estaría decepcionado, sin importar cual sea lo más cruel que pudo haber sido en el pasado.

— Por favor. Dime porque me ignoras — suplico SeokJin tomando la manga del abrigo ajeno. — Soy yo, SeokJin, tu Jinnie.

— Lo siento. No soy adecuado para ti perdóname por favor— Yoongi no se atrevió a mirar la cara de Seokjin.
— S-solo... adiós, SeokJin.

Y siguió caminando dejando a Seokjin atrás, camino sin voltear pero cuando se dió cuenta de su error regresó corriendo a toda prisa en busca de SeokJin, pero no había rastros de él.

SeokJin se había ido.