Poché POV
+ No deberías moverte mucho Poché –su voz denotaba preocupación-. Es mejor que te acuestes.
- Así estoy bien
+ Sé muy bien que no. Deja tu terquedad, hazme caso.
Resignada decidí obedecer las órdenes de mi amiga, que últimamente actuaba más como si fuese mi madre. Ahora ambas nos encontrábamos nuevamente en la cama, en la que minutos antes habíamos vivido el momento más extraño, aunque realmente hermoso, de toda nuestra amistad.- ¿Ahora sí me vas a contar Dani?
+ No lo sé, es complicado…
- Si en tantos años de amistad no has logrado confiar en mí entonces no sé qué hago aquí
+ No es eso Poché
- Sólo dime qué es lo que sucedió con tu padre
+ Estoy segura de que no lo entenderás
- Cómo quieras… Al fin y al cabo no tiene que ver conmigo –en ese instante la paciencia se me había agotado-.
+ ¿Y si te digo que la discusión con mi padre fue por ti?
- ¿Quéeeeee?
+ Por eso no te lo quería decir
- Sigo sin entender, ¿qué tengo que ver yo?
+ Mi padre quiere que dejemos de ser amigas. Así, sin más. Me lo dijo sin ninguna explicación y supongo que realmente no tiene una razón. Sencillamente quiere controlar mi vida, como siempre, pero esta vez no lo logrará. Creo que llegó el momento de alejarme de él y por eso decidí escaparme de casa. Esa vez era muy tarde y por eso terminé deambulando por el parque, no sabía a donde ir. Supuse que ni siquiera tú estarías dispuesta a recibirme a tales horas. Y bueno, el resto de la historia ya la conoces.
- Soy tu mejor amiga, jamás dudes que siempre estaré para ti
Pude notar que nuestra conversación había afectado a Calle, a tal punto que sus ojos se empezaron a cristalizar. Antes de que pudiera decirme algo la rodee con mis brazos y ella se recostó en mi hombro, dejando finalmente que las lágrimas recorrieran su rostro. Sabía que lo que más necesitaba ella en ese momento era desahogarse, así que solo me dediqué a acariciar su cabello con delicadeza. Luego de algunos minutos, cuando parecía haberse calmado, decidí tomar la palabra.- Puedes contar conmigo para lo que sea, estamos juntas en esto, ¿vale?
Dirigí la mirada hacia ella al no recibir respuesta alguna y noté que se había quedado dormida. Como pude la ayude a acomodarse entre las sábanas y la cubrí con una manta.
Me quedé observándola y me perdí en mis pensamientos. Deseaba haberle hablado de mis sentimientos luego de nuestro beso, pero claramente para ella no significaba nada y yo cada vez estaba más segura de que lo que sentía no era confusión. Te gusta, y mucho –me decía a mí misma-. Entonces decidí acostarme a su lado y poco a poco me fui quedando dormida.*****************
El sonido de la puerta las despertó.
Poché observó la hora en su celular: 7:33 am, ¿quién podría necesitarla?
Estuvo a punto de levantarse pero Daniela le hizo un gesto de negación y se incorporó rápidamente. Yo abro –dijo mientras caminaba hasta la entrada-.
Deslizó la puerta lentamente y se quedó pasmada al ver la silueta de aquella persona en el corredor.- ¿Qué haces aquí? –dijo ella aún atónita por lo que sucedía-.
+ No creo que esa sea la manera de recibirme. Yo vivo aquí.
- Tienes razón, discúlpame Johann, pasa.
+ Eso hago
- Es solo que me toma por sorpresa tu regreso, ¿no deberías estar de gira en Estados Unidos?