Bailando bajo las estrellas, contigo entre mis brazos.

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Canción del título: Ed Sheeran - Perfect

Me quede en la casa de Elena solo un par de días, y después de eso regrese a mi vida normal; me mude de nuevo a mi pequeño departamento, trabajaba desde lunes hasta el sábado, y hasta le marque a mi mama para contarle la noticia de mi ruptura con Cameron. Obviamente ella se puso de su lado, y me exigió que yo le pidiera perdón por lo que hice. Le informe que mi vida amorosa no es de su inconveniencia, y si le conté es solo porque pensaba que nuestra relación iba mejorando, pero aparentemente me equivoque. Lo único que mi madre pudo contestar era que me voy a arrepentir de ni siquiera darle el chance de explicar lo que paso.

Nathan no he vuelto a aparecer, y estoy feliz de no verlo. No quiero tener más problemas con los chicos, y mucho menos con los que me han abandonado por otras mujeres. Se lo que el intenta hacer; se siente culpable por dejar a la pobre Amy, y hará todo para que me sienta mejor. Pero lo que sucede aquí, es que yo no soy ningún juguete, y Nathan ya no es un niño pequeño.

Cameron tampoco había mostrado signos de vida alguna. No aparecía en los periódicos, revistas o televisión como solía pasar con mucha frecuencia. Y nadie de su familia tampoco. Lo último que oí de el en las redes sociales, es que su compañía gano un caso muy importante en la carrera de Cameron. Una enorme parte de mi deseaba que ahorita, el estuviese en su casa, ahogando su pena en litros de alcohol, pero la otra sabe que esto no está sucediendo. Él no es de esos chicos quienes lloran por una insignificante chica cual lo abandono.

***

El jueves por la tarde, me di cuenta de que no tenía ningunas ganas de pedir comida a domicilio, así que después de terminar mi trabajo, me fui hacia el supermercado más cercano que estaba de mi casa. Como no soy muy buena en la cocina, pensé que lo más sencillo será comprar un paquete de espagueti y salsa roja, con queso parmesano. Rico y rápido de preparar.

Llegue a la fila, pague todo muy rápido y regrese a mi casa. Pase a la cafetería de la señora Pendefield y platique un rato con ella. Me conto que su hija tuvo un hijo hace varios meses, así que está pensando en cerrar su negocio, para mudarse a vivir a lado de ella. Obviamente me puse bastante triste, ya que casi sentía que esa mujer era parte de la familia, pero tampoco comenté nada al respecto, porque sabía que mi opinión no va a hacer cambiar sus planes.

Subí a mi departamento, muy enojada de que el elevador volvió a romperse, y nadie hecho nada para avisárselo al dueño del edificio. Antes que nada, metí los espaguetis en el agua y después me fui a mi cuarto para cambiarme de ropa.

Encendí la televisión, y enredé una enorme porción de delicia en mi tenedor. Realmente me quedaron bastante bien, y ese pequeño detalle me alegro un poco el día. Al menos, ahora sé que no soy una perdedora total cocinando.

Después de unos veinte minutos, el sueño comenzó a invadirme. Alargue mis pies en la pequeña mesita y hecha la cabeza para atrás. Todos los pensamientos y problemas penetraron mi cerebro, y por eso tuve que abrir los ojos de golpe. Alguien estaba tocando la puerta rítmicamente, como si alguien estaba escuchando la música al mismo tiempo. En seguida el pánico lleno mi cuerpo, y las manos comenzaron a sudarme pensando que la persona que estaba detrás de la pared de madera era Cameron o Nathan. Me mire en el espejo, acomode mi cabello de un lado al otro unas dos veces, lo acomode en un chongo, pero en segundos de abrir la puerta, me lo solté de nuevo pensando que a los chicos le gusta más lo natural.

Pueden imaginar cual fue mi decepción, enojo y confusión cuanto me encontré a Olivia parada enfrente de mí, vestida con un bello vestido negro y una chaqueta igual de color oscuro. Los tacones la hacían ver mucho más alta, y a lado de mi parecía ser una mujer perfecta. Suspire sabiendo como ella me veía en este momento, y lo fracasada que parezco. Viviendo en uno de los barrios más baratos de Nueva York, vestida de shorts deportivos y una playera con la banda que dejo de gustarme hace muchos años y por supuesto, como podemos olvidar mi relación que se terminó con Cameron por culpa de ella misma.

Legalmente suya.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora