— ¿Estás bien? —Habló Zayn aun con sus manos en mi cintura—
— Si, ¡Suéltame! —Sollocé—
— ¿Qué te pasó? —Habló y me miró de manera seria—
— ¡No te interesa! —le hablé molesta, me subí al coche y recordé el mensaje que le enviaron a Austin, cambie de dirección hacia el hotel donde él con su amante habían quedado.
Al llegar aparque a un costado de la vereda, me quede dentro del coche, pasaron alrededor de diez minutos cuando vi a Agustín junto a una rubia plástica. Se besaron en la entrada del edificio antes de entrar.
— Cerdo asqueroso. —Sollocé—
Decidí no perder el tiempo y me dirigí rumbo a mi casa, al llegar fui subí las escaleras directo a mi habitación me tiré en mi cama y seguía llorando. Me sentía traicionada y dolida por pensar que Austin de verdad me amaba y que había cambiado, pero por lo visto sigue siendo un idiota asqueroso que jugo suciamente con mis sentimientos, sé que debía terminar con él, pero no podía porque lo amaba o eso creía.
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A la mañana siguiente me desperté con un fuerte dolor de cabeza, me levante y me dirigí al baño, me tome una ducha, luego al salir de éste me aplique crema en el cuerpo y me tome una pastilla para el dolor de cabeza, al fijarme en el espejo del baño me di cuenta de que tenía aún lo ojos hinchados y ojeras, las cuales las cubrí con un poco de maquillaje.
Busque algo en el almario para colocarme, termine escogiendo un vestido color rosa pálido, con unos zapatos altos del mismo color, mi cabello lo até con una coleta y salí, maneje hasta el instituto, busque donde poder aparcar, al encontrar un sitio deje el coche y me baje de éste al momento de estar guardando las llaves en mi bolso sentí que me abrazaban por detrás , al girarme asustada me di cuenta de que era Harry.
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— Hola Preciosa. —Besó mi mejilla—
— Hola Hazza. —hice una mueca—
— ¿Qué pasó? —Me miró de manera seria—
— No paso nada Harry. —le dije y me fui caminando rápido al salón—
La mañana paso sin ninguna novedad. A la hora de comer fui a la cafetería y pedí solo una manzana, no tenía mucha hambre y estaba buscando una mesa desocupada cuando escuché a alguien gritarme.
— Bebe, aquí estoy —sonríe— Ven a sentarte conmigo.
—Hice una mueca— No hay sillas Austin.
— Pero eso se arregla. —ríe, me tomó de la cintura y me sentó en sus piernas—
Estaba realmente incomoda al estar con los populares, no temía tema de conversación, solo escuchaba como las porristas hablaban de zapatos, los chicos de chicas lindas y de fútbol, yo me concentre en terminar mi manzana.
Al terminar de comer la manzana, justo término el receso, me pare rápidamente de donde estaba sentada para dirigirme a la siguiente clase.
— Tenemos que hablar. —Me besa—
— Austin no... —hice una mueca—
—Suspiró— Escucha, quiero pedirte perdón por lo ayer, no debería de haberte tratado de esa manera, estaba fuera de sí, no era mi intención hablarte de mala manera y obligarte a acostarte conmigo, anoche después de que te fuiste me quede pensando en el daño que te hice y en lo idiota que fui contigo, entiende que me coloque muy celoso al verte con ese tipo abrazada, perdóname ¿sí? —me mira—
—Hice una mueca— Austin, no... No Lo sé... yo no puedo... —sollocé—
— Bebé, prometo que cambiare, nunca más haré eso ¿sí? pero no me provoques —me paso la mano por la cintura y la subió por mi espalda—
Camine llorando al salón y al entrar no me percate de que estaba Harry con los chicos ahí y lo que menos quería era que me vieran llorar, pero creo que fue demasiado tarde.
— ¿Qué paso? —Liam fue el primero en preguntar—
— Nada Liam. —sonreí lo que salio como una mueca—
— Vamos a hablar —Habló Harry, me tomó de la mano y me llevó al pasillo— ¿que pasó ____? ¿porque estas así? —me miro preocupado—
— Nada Hazza, solo extraño a papá —mentí—
— Tranquila, yo estoy aquí —me abrazó—
Estaba apoyada en el pecho de Harry, en eso levante la mirada y pude apreciar que de lejos Austin estaba mirando esta escena, lo que menos quería era tener problemas con él, así que me aleje rápidamente de Harry, tenía miedo, miedo a que terminara conmigo. Lo sé estúpida ¿no?
