La historia de un veela y su compañera

Capítulo 42

-Espera- La detiene el rubio agarrándole una de las muñecas para evitar que le bajara el bóxer -¿Estás segura? No tenemos porque seguir si no quieres-

Pero Hermione no le respondió, en su lugar le sonrió con cariño y lo beso esperando distraerlo. Draco se dejo hacer y llevo una mano a la espalda de ella para desabrocharle el sujetador y así dejarla completamente desnuda mientras ella se disponía a hacer lo mismo con él.

-No sabes cuánto te amo- Le dice él besando su cuello para después ir bajando y terminar deleitándose con los suaves montículos que parecían estar ofreciéndoseles.

-Draco- Gime ella agarrándolo del cabello para acercarlo más a ella mientras arqueaba su espalda,

Draco se dedica a atormentar los senos de Hermione mientras esta no podía hacer más que disfrutar de la atención que el rubio le brindaba. La joven se dedica a acariciarle la espalda y pronto comienza a bajar sus caricias hasta que termina pasando por las caderas de él y más allá.

-Hermione- Jadea Draco dejando de besar su piel para separarse un poco de ella cuando siente como la mano de su compañera acaricia tímidamente su erección -Detente por favor-

-¿Por qué?- Pregunta mordiéndose el labio con nerviosismo, pues nunca había estado en una situación parecida y todo era desconocido y nuevo para ella -¿Acaso no te gusta? ¿Lo estoy haciendo mal?-

-No es eso amor- Dice él mirándola con ternura antes de acomodarme mejor sobre ella y así quedar frente a frente -Es que ya me siento un poco descontrolado y si sigues así aras que pierda la cabeza completamente-

-Creo que esa era mi idea- Dice riendo la joven antes poner sus brazos alrededor del cuello del rubio -Eres sexy cuando te dejas llevar-

-Eso no sería bueno cariño- Dice despacio él acariciándole la mejilla -Ninguno de los dos sabe como reaccionaria si me llego a perder-

Hermione lo besa para hacer que el rubio se calle, era obvio que no quería que parara, el hecho de que su cuerpo había tomado la forma del veela cuando este se excitaba se lo confirmaba. El veela se aprieta contra el cuerpo debajo de él y gime en la boca de su compañera al sentir su piel caliente y suave contra la suya.

Draco no sabía si estaba haciendo bien en dejarse llevar, sin duda su hermosa castaña se merecía más que un viejo sillón reformado y algunas velas flotando por la habitación. Pero los gemidos y la forma desinhibida en que Hermione le acariciaba la espalda y los hombros pidiendo que continuara le hacían imposible detenerse.

Hermione se queda hipnotizada cuando se separa para tomar aire, el joven tenía los ojos completamente de un gris plateado que parecía brillar y el pelo parecía una fina cortina de plata que caía a los costados creando una burbuja de completa intimidad que los envolvía a ellos dos. Ambos vuelven a besarse mientras el joven comienza a acariciar la cintura de ella y va bajando hasta que acaricia uno de sus muslos haciendo que esta, en un acto reflejo, separa más la pierna para dejarle completa libertad de acción.

-Merlín, estas tan húmeda- Gime Draco cuando sus dedos se pasean a lo largo de la raja de ella para comprobar si estaba preparada para recibirlo.

-Por favor Draco- Gime Hermione arqueando su espalda mientras enterraba su cara en el hombro del rubio -Ya no lo soporto más-

-Yo tampoco puedo esperar más- Le confiesa el dejando de atormentarla para separarse un poco de ella y tomarle la barbilla para que lo mire, entonces Hermione ve como los ojos se le aclaran más si es posible -Te amo-

No le dejo responderle antes de atacar sus labios en un beso completamente diferente a todos los anteriores, este beso transmitía pasión pura y no permitía rechazo. Mientras la joven se aferra a los hombros de él ante el asalto, el veela le sostiene la cadera y se mueve para alinearla con la suya.