Jodido Destino

Capítulo 24: quiero verte

lo sé... me demoré un poco pero aquí les dejo el capítulo, ahora tendré más tiempo y publicaré dejando un día, disfruten.

    Me acerque a ella, mis piernas flaqueaban, estaba temblando al verla, era inexplicable una sensación de miedo, terror, dolor, angustia mezcladas, solo pensar que podría estar, No, el destino no podría quitármela ahora, me arrodille la gire lentamente note una herida en su frente, estaba rasmillada inconsciente.

-Lena. Susurre, la tome en mis brazos acariciando su rostro.

-No me dejes, no ahora, debes despertar, por favor, mi ángel, te necesito, te amo. No se movía, el dolor en mi pecho era muy fuerte, sentía partirme en pedazos. Mona estaba en el auto se tiro hacia atrás cerró los ojos aguantando el dolor de su brazo el golpe con la van le había fracturado el hombro respiro profundo y abrió la puerta para ir con Yulia. La vio a lo lejos corrió hacia ella.

-Yulia. Se acerco a mi estaba en shock, miro a Lena no la había soltado, Mona la tomo despacio y la puso en el suelo, se agacho poniendo su oído en el pecho de ella para escuchar su corazón el cual latía muy despacio.

-Está viva!!, pero muy débil debemos sacarla de aquí me oyes, no puedo alzarla estoy herida. Dijo y vi su hombro lastimado. Esas palabras le dieron fuerza a mis brazos tanto que sin pensarlo tome a Lena alzándola y camine como pude hacia el auto que estaba a unos cuantos metros lejos de nosotras, Mona abrió la puerta y la deje despacio en el asiento trasero.

-Estarás bien, no vas a dejarme me oyes, no voy a dejar que mueras. Mona subió al auto y lo encendió, Un gran sonido de la explosión de la van nos asusto mire hacia atrás viendo el fuego y el humo, el auto se removió, sujete a Lena. Mona acelero alejándose del lugar.
Llegamos al hospital abrí la puerta y volví a alzar a Lena caminando hacia la entrada.

-Medico, ayuda!!!!!!!!. Gritaba corriendo por el pasillo, la gente curiosa nos veía, llegaron las enfermeras y la pusieron en una camilla.

-Estarás bien, no te dejare, te amo mi ángel. Decía tomando su mano mientras la llevaban a urgencias.

- Debe quedarse aquí. Dijo una enfermera. No quería dejarla mis manos la soltaron y vi como entraban en la sala de operaciones. Mona puso su mano en mi hombro.

-estará bien Yulia. No pude contenerme más y llore desconsoladamente, Mona me abrazo. Las horas pasaban y no teníamos noticias de ella, eso me angustiaba y me mantenía en un hilo. Mona llamo a los padres de Lena, y se comunico con Sergey.

-Yulia. Me miro, me había puesto una manta para abrigarme y bebía algo de café.

-No a un nada. Dije abatida.

-Iván está en la cárcel al igual que todos los que participaron en el negocio, Oleg está grave en el hospital.

-Solo quiero que Lena salga de esto, moriré si le pasa algo Mona.

-Tranquila. Se sentó a mi lado. Los gritos de un hombre nos pusieron en alerta.

-¿Dónde está?. ¿Dónde está mi hija?. Dijo un hombre de no más de 45 años alto, bien vestido y de mirada amable, lo notaba preocupado vi el parecido de mi Lena en él y lo supe. Mona se levanto y camino hacia Sergey Katin.

- Señor Sergey, mi nombre es Mona y soy policía de narcotráfico, su hija está en la sala de operaciones, aun no sabemos nada.

-¿Que paso? Dijo una mujer de cabello rojo, se notaba elegantemente vestida, muy fina y delicada, notaba su tristeza.

- Se lo explicaremos todo.

-Fue mi culpa, yo le hice esto. Dije al borde de las lágrimas.

-¿Y tú quien eres?. Dijo alterado Sergey.

- Por favor, deben tranquilizarse, Yulia siéntate, vamos los llevare conmigo.

-No yo no quiero moverme de aquí hasta saber de mi hija. Dijo Inessa.

-Está bien, venga conmigo. Dijo llevando a Sergey a otro lugar, Inessa se sentó en el sillón del frente. Jamás creí que la conocería así de esta forma, era tan parecida a Lena, la notaba nerviosa me levante y fui por un vaso de agua.

-Ella estará bien. Dije ofreciéndole el vaso. Inessa me miro extrañada.

- Gracias, ¿conoce a mi hija?. Dijo algo confundida. Aun no debía decir lo que significaba para Lena.

-Sí.

-¿Cómo se llama?.Dijo bebiendo el agua.

-Yulia Volkova. Ese nombre le sonaba en la cabeza sabia que lo había escuchado pero no se acordaba donde.

-Soy Inessa Katina madre de Lena, ¿sabe lo que sucedió con mi hija?

- Perdóneme, todo esto es mi culpa, sino hubiera regresado ella estaría bien.

-¿Regresado?, explíqueme, usted la trajo al hospital.

-SI. Iba a preguntar cuando el doctor se acerco a nosotras.

-Usted es la señora Inessa madre de Lena. Inessa se levanto rápidamente.

-Sí, ¿dígame como esta doctor?.

- Ella tuvo heridas internas, perdió mucha sangre pudimos estabilizarla, sanamos sus heridas externas, rasguños y algunos cortes, su brazo derecho se disloco por la caída, ella está en observación un golpe en la cabeza nos tiene preocupados, veremos cómo evoluciona en 48 horas. Esas palabras fueron puñaladas en mi pecho, observación, cabeza, evoluciona se repetía en mi cabeza una y otra vez. Inessa se puso la mano en la boca, las lágrimas salían de sus ojos.

-Lena, no otra vez, mi hija no.

-Tranquilícese señora, solo debemos esperar y tener fe. Inessa se sentó angustiada.

-Déjeme verla doctor.

-No es conveniente ahora, pero la tenemos vigilada por cualquier reacción.

- Se lo suplico, solo un minuto.

-Está bien, la dejare verla solo un minuto.

-¿Y usted es?. Mirándome desconcertado. No respondía

-Su nombre es Yulia Volkova, fue la que la trajo.

- Lena fue afortunada, si hubieran tardado más tiempo en traerla, Lena no hubiera resistido y estaría muerta ahora. Inessa me miro impactada.

-Bien venga conmigo, recuerda solo será un minuto. Asintió y la llevo a la habitación. Me quede sumergida en mis pensamientos.
Escuche pasos detrás acelerados eran Sergey Katin y Mona que llevaba un vendaje en su hombro.

-Usted. Dijo irritado acercándose a mí. Me tomo de los hombros

- No sé porque mi hija se involucraría con ese hombre y con usted, pero la quiero lejos de ella, no quiero que vuelva a venir me oye, aléjese de mi hija. Dijo enojado y frustrado. Haciéndome volver a la realidad.

-Señor Sergey. Dijo Mona tratando de que me soltara. Inessa salía y vio la escena.

-Sergey, pero que sucede. Acercándose a él y tomando su brazo. – Ella le salvo la vida.

- ¿Salvarle?, ella es la responsable de que mi hija este aquí, es su culpa- Me miro fríamente. - No quiero volverla a ver. Dijo mirándome con odio.

-Señor debe tranquilizarse, Yulia no tiene la culpa. Dijo Mona alejándome.

-No él tiene razón, sino la hubiera conocido nada de esto hubiera pasado, perdóneme solo quiero que vuelva abrir sus ojos, que se salve. Baje la mirada y me aleje de ellos a paso acelerado. Mona miro a Sergey.

-Se equivoca con ella señor, ella jamás le haría daño a su hija, pero como le dije es mejor que Lena se lo explique. Sergey la vio confundido, Mona me siguió

-Yulia!!!, espera. Dijo siguiéndome hasta la puerta de salida -Yulia!!!!!. Me detuve

- El tiene razón Mona, Lena esta aquí por mi culpa.

-Basta, eso no es cierto, Lena te ama, te necesita, han pasado por mucho no te rindas ahora, ya no hay nada que impida que estén juntas. La mire con los ojos rojos hinchados por llorar.

-Ella te necesita. Agache la mirada, ella tenía razón, no me rendiría ahora.

-No me rendiré.

-Su amor es muy fuerte, ha resistido todo creo que también es a prueba de balas. Sonreí.

-Gracias Mona por todo.

- No gracias a ti, ustedes merecen ser felices después de todo lo que han pasado, Lena despertara y podrás estar con ella, estoy segura, mañana iremos a la policía para que hagas las declaraciones, ¿tienes donde ir?

-Tengo mi departamento pero no quisiera estar allí.

-Entiendo, ven te llevare al mío y podrás descansar.

-Gracias.

Los días pasaban en el departamento de Mona mientras ella se recuperaba del hombro, no podía salir ya que el caso se había conocido por todo Rusia y Mona no quería que saliera a ningún lado para protegerme pero ella me informaba del estado de Lena, aun seguía en observación aunque estable pero aun no despertaba, sus padres y solo algunos amigos iban a verla. Iván iría a juicio al igual que los que participaron con él la prensa sacaba imágenes y entrevistas por el caso, el hospital estaba repleto de periodistas que querían saber del estado de Lena. Mona llego a su departamento y me vio dando vueltas alrededor si seguía haciéndolo seguro haría un agujero en medio de la sala.

- Necesito verla, no aguanto más.

-Tranquila Volkova. Mona veía el lugar la colilla de cigarrillos, el televisor prendido con el canal de noticias, varios periódicos en la mesita.

-Te llevare al hospital y entraremos sin que nos vean.

- ¿Cómo?, necesito verla.

- Te llevare mañana de incognito. Me cerró el ojo.

-¿Qué?

-Confía en mi Volkova.
Al amanecer Mona me dejo unos jeans bastante anchos una camisa celeste de algodón en la cama, unas almohadillas, un jockey negro unos bigotes, peluca oscura en la cama y el abrigo.

-¿Pero qué es esto?. Pregunte curiosa

-Un disfraz Yulia, así nadie te reconocerá.

-¿Bigote?. Ella sonrió.

-¿quieres ir o no?

-Claro que sí.

-Bien entonces qué esperas. Entre al baño y después de unos minutos Salí, realmente era irreconocible. Mona rio.

-Eres un hermoso hombre Volkova, jajajaja.

-Sí, sí con esto asustare a Lena cuando me vea. Señalando el bigote falso

- SI te dirá, como has cambiado Yulia, jajajaja.

-Muy graciosa, bien vamos que quiero verla.

- entonces vamos.

Salimos del apartamento con cuidado de que nadie nos viera, ser el testigo principal en el caso más famoso de narcotráfico en donde la hija de los Katin estaba involucrada era sensación para los medios de comunicación, cuando se supo invadieron el hospital como hormigas, Me habían mantenido oculta desde entonces, aun no sabían las represarías, todos estaban expectantes de lo que pasaría en el juicio.
Llegamos al hospital rodeado de periodistas. Nos estacionamos cerca de la puerta

-Bien entrare primero me sacare a los periodistas de encima y tu entraras después te espero en el ascensor, suerte guapo. Sonreí y espere que avanzara hasta la entrada luego baje, el bigote picaba al igual que las almohadillas en mi abdomen. Pero no podía quejarme pronto vería a Lena.

- Hay Volkova, lo que sea para verte mi ángel. Sonreí camine hacia la puerta, sin que me reconocieran seguí hasta el ascensor vi a Mona esperarme me acerque a ella y subimos al ascensor que estaba repleto. Mona me susurro.

-estoy nerviosa, esto de ser Cupido es agotador. Sonrió. Me hizo reír y los demás nos observaron. La puerta se abrió y salimos.

-Mona, esto me pica.

- Ya deja de quejarte y moverlo, todo saldrá bien. Mona miro el pasillo estaba vacío, desde que los periodistas acechaban el hospital, Sergey pidió encarecidamente que colocaran a Lena sola y custodiada, pagaría lo que fuera mientras estaba allí recuperándose, por orden de la policía y el juez se puso vigilancia las 24 horas, así que entrar a la habitación no era sencillo solo doctores enfermeras y gente muy conocida a Lena. Observe a Sergey sentado cerca de la puerta de la habitación de Lena, junto a un guardia. Trague saliva.

-¿Bien ahora qué?.

-No lo sé. Dijo apenada.

-Que!!!, pero.

- Baja la voz Yulia o nos descubrirán, te dije que te llevaría al hospital aquí estamos. Resople tomándome la frente. Fuimos interrumpidas cuando vi salir de la habitación de Lena a Nastya y a Vlad,

-Vlad??????????????????

-¿Quién es Vlad?. Me miro extrañada.