POV Anastasia
Maldición, nuevamente mi Wanda se averió, salgo de mi cochecito y antes de ver donde se averió escucho que me llaman por mi nombre;
- ¡Anastasia!- Me volteo y de un taxi veo salir a mi amigo
-¡Jose!- El se acerca y me abraza muy fuerte pillandome por sorpresa, ahora que recuerdo el anunció que hoy vendría.
- Hola Ana,¿Como has estado?- Sonríe y se aparta un poco de mi para observarme.
- Bien...me alegro que estés aquí- le digo sonriendo, el es mi amigo del alma.
- Buenas tardes- esa voz, me hace estremecer.
- Señor...señor Grey- digo nerviosa al verlo parado en frente de mi.
Jose, me suelta, pero deja su brazo posesivo sobre mi hombro.
- He visto que su auto se averió...y quise venir ayudarla- dice con voz fría, mirando con expresión impasible a José
- Señor Grey, el es Jose Rodriguez, mi amigo...Jose el es el señor Christian Grey- tengo la extraña sensación que debo darle explicaciones al señor Grey.- Jose, esta de visita en Seattle, por unos días, se quedará en mi casa...el y yo nos conocemos desde hace años- ¡Callate! Estas diciendo estupideces, me regaña mi subconsciente.
- Señor Rodriguez.-
Christian le tiende la mano con mirada impenetrable.-Señor Grey -lo saluda Jose estrechándole la mano.
De repente el ambiente se ha puesto hostil.
- Así que usted va a quedarse en casa de la señorita Steele- Su expresión sigue siendo impasible, pero sus palabras...es como si estuviera ¿Celoso? Seguramente son imaginaciones mías.
- Así es señor Grey...Ana me va hospedar - el brazo de José rodea mi cintura. No me gusta lo que está haciendo, me siento incomoda.
- Anastasia- su lengua acaricia mi nombre, y mi ritmo cardiaco empieza acelerarse, apenas puedo respirar - me gustaría llevarlo a su casa. - Oh dios.
- No se preocupe señor Grey, de Ana, me preocupo yo- responde José. Creo que mi amigo esta tomándose atribuciones que no le corresponden.
- Agradezco su ayuda señor Grey- saco el brazo de Jose de mi cintura.- Mi Wanda se averió, pero yo puedo solucionarlo- ¿Que tendrá este hombre que me pone nerviosa?
- Si le preocupa su vehículo puedo enviar a Taylor por el-
- Ana, puedes venir conmigo en el taxi...después llamamos a alguien para que lo recoja- Jose vuelve tomarme por la cintura. Estas tomandote demasiada confianza Jose.
- Esta bien señor Grey, acepto su oferta- José abre los ojos como plato, atónito y el señor Grey, sonríe triunfante.
- Señor Rodriguez, usted viaja en su taxi, y la señorita Steele, viene conmigo- Christian, coge mi mano y me aparta bruscamente de Jose. Y nuevamente siento esa corriente como si tocara un cable suelto.- Vamos a mi audi- esboza una amplia sonrisa. José me mira furioso.
- Nos vemos en el departamento- le digo a Jose, Christian, borra su sonrisa de inmediato y hace una mueca de como si hubiese tragado algo desagradable.
Christian y yo caminamos con nuestras manos entrelazadas hasta el auto. Los latidos de mi corazón se aceleran aun mas.
- Adelante, señorita Steele- miro a su chofer, quien observa a Grey desconcertado.
- Hola ¿Taylor?
- Un gusto en verla, señorita Steele- me dice con amabilidad. Grey, sostiene la puerta abierta del audi.
Entro al auto en la parte trasera, Christian, cierra la puerta...rodea el auto y entra por el otro lado sentándose al lado mio. Su chofer se sienta en el volante, espera que Grey y yo nos pongamos el cinturón de seguridad, para arrancar el motor.
Taylor se incorpora el trafico. Yo me remuevo incomoda en el asiento, la presencia del señor me afecta y mucho, incluso su olor a perfume caro invade mis fosas nasales.
- Un dólar por tus pensamientos- me dice Christian.
Me giro hacia el, el está observandome fijamente, mi mirada baja hasta sus cincelados labios. Como me gustaría besarlo...mierda, no puedo tener esos pensamientos.
POV CHRISTIAN
No puedo apartar mis ojos de Anastasia, es tan hermosa, me hierve la sangre de imaginar que estará sola con ese idiota de José Rodriguez en su departamento. Es obvio que ese maldito esta pillado por Anastasia, pero si el estúpido piensa que voy a permitir que se quede a sola con Anastasia, está equivocado.
- Un dólar por tus pensamientos - ella se gira de inmediato hacia mi, sus hermosos ojos observan mis labios, me gustaría besarla aquí y ahora. Ella traga saliva, esta nerviosa, yo la pongo nerviosa, saber que tengo ese efecto en ella es gratificante.
- ¿Por que enviaste esas copas?- Pregunta y muerde sus labios.
Joder...esos carnosos y sensuales labios, como me gustaría follar esa boca, de inmediato empiezo ponerme duro. Oh...nena, no sigas mordiendo ese labio, si no terminaré follandote aquí, y como si hubiera oído mis pensamientos ella deja de morder su labio.
- Te las regalé, porque rompí las tuyas...¿Por que las devolviste?- Necesito pensar en otra cosa, que no sea su boca, ni sus ojos.
- Era demasiado...y te pido disculpa, por haber roto dos...eso fue infantil de mi parte...disculpa- juega con sus dedos.
- Me pareció gracioso, que regresaste dos copas rotas- ella sonríe.
Me calmo de inmediato, su bella sonrisa tiene ese efecto.
- Pensé que te había molestado- oh nena, si hubiera sido mi sumisa y me devuelve un regalo te hubieses llevado una buena paliza.
- No.
- Hemos llegado- anuncia Jason, cuando aparca en frente del edificio donde vive la señorita Steele.
Maldición yo quería seguir disfrutando de la presencia de la señorita Steele.
- Gracias, por el aventón- me dice y se desabrocha el cinturón de seguridad. Yo hago lo mismo y salgo del auto.
- Yo lo hago - le digo a mi chofer cuando veo que se acerca para abrirle la puerta del auto para que Anastasia salga.
Abro la puerta, y tiendo mi mano, la señorita Steele lo coge y otra vez siento esa extraña sensación de electricidad. Hago caso omiso a esa sensación.
- Ya está en tu casa...y de tu auto - si es que esa cosa se puede llamarle auto- no te preocupes, Taylor, se encargará-
- No debió molestarse...así que gracias - ya esta irritandome que agradezca tanto.
Un taxi aparca cerca de mi audi, y de inmediato baja el idiota de Jose. Maldito ni creas que te dejare a solas con Anastasia.
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ELLA ES PARA MÍ
FanfictionUna fiesta de máscaras, que lo cambia todo. Una hermosa mujer, que salva a un extraño de ser asesinado. Un hombre inteligente, y mujeriego. Que no sabe quien quiere deshacerse de él. Una amenaza que lo llevará conocer lo que nunca imaginó, y lo que...