3

5.7K 501 66
                                    

Thomas

Comer hoy en la cafetería fue lo mas incomodo que he pasado en toda mi puta vida. Sentir cada tres segundos las miradas mal disimuladas de todos sobre mi fue sin duda lo más incómodo. Núnca en vida tuve tantas personas a mi alrededor ni mucho menos tanta atención.

Por suerte tocó el timbre de regreso a clases y me salvé. A Lucio no lo he visto desde que lo desmaye, por un lado quiero verlo para disculparme por hacer eso y por otro lado temo que reaccioné mal y quiera golpearme de nuevo.

Mejor esperaré a que las aguas se calmen y hablaré decentemente con él para aclararlo todo y que esto no termine de una manera muy mala.

Las últimas horas pasaron rápido ya que lo que enseñaban eran muy fácil para mi ya que Arturo, mi antiguo profesor, ya me había enseñado la mayoria de las cosas y eran más como un repaso lo de hoy.

Las clases terminaron por hoy, fuí directo a los pasillos a buscar lo que de hoy en adelante seria el casillero que ocuparía. Saqué el papel donde estaba anotado el número con la clave y comencé a buscarlo.

Llegué al casillero 125-B para inmediatamente abrirlo para poner mis libro ahí dentro, ví mi clave y decidí cambiarla. Según tengo entendido, éste casillero era solo para mí y podía guardar cosas de la escuela ahí dentro como asi cosas personales.

Cuando me propuse irme después de cerrar mi casillero giré y choqué contra algo duro y solido provocando que cayera sentado al suelo.
Levanté la mirada un poco aturdido y ví a un chico rubio, alto y musculoso, de unos ojos esmeralda mirarme furioso.

--Fíjate, ¡Idiota! Me gritó. ¿Otro más? Pregunté internamente, Dios o cualquier Deidad, imploro volver al pié de la montaña, allí por lo menos no vivían gritandome y siendo groseros conmigo.

--Perdón por no tener ojos detras mí, perdón por chocarte por accidente, y no te perdono por llamarme idiota-- le reclamé ya un tanto molesto de la actitud de todo --asi que, adiós.

Me despedí y dí la vuelta rumbo a la zona que al parecer era de deportes. Caminé un rato buscando la habitación donde se guardaban los equipos deportivos hasta que por fin la hallé, pero para terminar con mi poca o casí nula suerte de hoy, estaba ocupada por lo jugadores de fútbol americano, quiénes estaban en entrenamiento.

Sin más remedio y con valor me senté en las gradas a observar como entrenaban ya que era la primera vez que veía jugar en vivo un partido de football americano. Veía atentamente hasta que noté dentro de la cancha a cierto pelirrojo con cierto rubio hablando juntos. Debía de haberlo supuesto, tales groseros tenían que juntarse y llevarse de maravilla.

Los ignoré a ambos y tomé mi cámara para comenzar a buscar a quién sacar fotografías entre los jugadores. De pronto en el cielo se oyó el graznar de un águila que volaba bastante alto, todos los jugadores también la vieron al igual que yo. Era hermosa, era una adulta y sabía que era hembra gracias a sus plumas y la forma que tenía. Silve como había aprendido desde niño y el ave comenzó a descender hasta posarse a unas bancas de dónde yo estaba. De cerca era mucho mas preciosa, no dude un segundo y comencé a tomarle fotos, ella solo se limitaba a moverse de un lado a otro, como si supiera que necesitaba tomas de distintos ángulos.

Todo iba de maravilla hasta que noté que todos en el campo nos observaban, giré mi vista hasta donde un pelirrojo me señalaba descaradamente mientras le hablaba al oido al mismo rubio de hoy.

No sé si exista las deidades, pero tenia en claro que si existían, me detestaban.

Silve de nuevo para que el águila tomara vuelo y se vaya, tomé mi mochila que había dejado en la banca y me iba a girar para irme pero una voz muy gruesa me detuvo.

-¿Cómo has hecho eso muchacho? Me habló el entrenador del equipo.

¿Emmmm? ¿Cómo responder a eso sin revelar mi más grande secreto? No tenía la menor idea posible. ¿Por qué es tan difícil convivir con muchas personas? Dios, si existen y me quieres por lo menos un poquito, ¿Por qué no me salvas de ésta?

-Es que, es mi mascota. Le respondí lo primero que se me ocurrió y quise golpearme de lo estúpido que había sonado. Él pareció sorprendido y luego solo asintió con la cabeza para finalmente seguir en lo suyo.

Agradecí internamente y comencé a alejarme del campo de fútbol, volví a recorrer los pasillos en busca de la biblioteca hasta que la hallé. Entré tratando de no llamar mucho la atención y noté que solo había un chico en el fondo, oculto entre unos estantes de libros y un sofá para leer.

Lo ignoré y busqué un libro sobre naturaleza para ver, para mi un apasionado amante de la naturaleza era muy entretenido leer cosas de este tipo, siempre.

Llevaba ya un rato sentado hasta que decidí irme de nuevo al campo. Llegué y no ví a nadie en los alrededores y supuse que todos ya se habían ido, de a poco y con cuidado comencé a buscar los elementos de deportes que habían quedado repartidos por la cancha y los iba guardando en el armario. Cuando ya tenia el último balón en mano y estaba dentro del armario, aprovechando que estaba de espalda a la puerta, alguien o algo la cerró.

-Ésto es por humillarme hoy, maldito idiota. Me gritó una voz que reconocí como la de el pelirrojo justo del otro lado de la puerta. Acto seguido escuche claramente como esta era llaveada para luego no escuchar nada, claramente me habían encerrado aquí.

Esto si que era totalmente injusto, yo fuí castigado por su culpa y le iba a pedir perdón, pero creo que podré vivir sin el perdón de un ser despiadado como él.

-Saldré de todos modos, o crees que mañana no usaran el equipo deportivo. Qué pasaría si me encontraran aquí dentro y yo les dijera que me has encerrado, seria una lastima ¿no?- le dije lo último con pena fingida -por lo que he visto sos muy problemático, ¿Otro inconveniente más lo tolerarian?

No me gustaba usar éste metodo para conseguir algo, pero eso dos me cansaron el primer día en un instituto, dónde por primera vez conviví con mas de tres personas durante horas.

De verdad abuelita, te amo y todo lo que quieras. Pero tampoco me pidas ser Mahoma o la Madre Teresa de Calcuta, ¿será posible?

°°°°°°°°°°°°°°°°

Bueno, aquí esta el último capítulo de hoy. Mañana intentare subir otros más. (*¯︶¯*)

Me comentarian que les parece la historia hasta ahora, ¿les gusta? ¿quieren sugerir algo?

Desde ya gracias por votar o simplemente leer. Son muy importantes para mi, sin ustedes no seria nada, los ama.

#Memo. ● 3●

Forever© (Edición Y Redacción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora