En manos de mi sádico Hitman - R27 Omegaverse

Capítulo 9 °^°

Estaba medio dormido aun, se acababa de despertar... pero a pesar de eso quería encontrar a Reborn, así que decidió salir del cuarto... realmente no le fue difícil encontrarlo ya que solo siguió los gritos de sufrimiento que se escuchaban, sabia que Reborn estaba ahí ya que el chico que estaba gritando de vez en cuando decía su nombre con un tono lloroso, al salir de allí se encontró con un rubio bastante lastimado tirado en el suelo y con Reborn tomando un café mientras que le apuntaba con una pistola al chico que estaba en el suelo llorando.

-Buenos días, Reborn- dijo Tsuna mientras corría a abrazar al azabache, este se inclino para tomarlo entre sus brazos y besar la frente del pequeño.

El rubio que yacía en el suelo se preguntaba como es que ese sádico podía llegar a ser tan amable con ese pequeño, y tan cruel con el... no le cabía duda de ese niño debía ser la única excepción para el Hitman, es decir el único que se podía salvar de su lado sádico.

Tsuna estaba sentado sobre los hombros del sicario observando como este entrenaba al próximo jefe de Cavallone... o algo así, estaba seguro de que había dicho algo como eso.

-¡¡es injusto que solo yo sufra, porque a el lo tratas bien!!- se quejo Dino sin medir las consecuencias de sus palabras, el sicario al escuchar al rubio quejarse estaba a punto de dispararle... cuando repentinamente sintió como el pequeño estiraba una de sus pequeñas manitas para pararlo.

-¡¡¡Yo también quiero hacer ese entrenamiento Reborn!!!- dijo con una brillante sonrisa y con una gran emoción haciendo sentir mal al rubio por su infantil queja.

Reborn solo observo la cara del pequeño para notar que estaba hablando en serio, sabia que con el castaño no debía contenerse debido a que era bastante fuerte, de todas maneras no lo haría... nunca se había contenido en un entrenamiento y no lo haría ahora... confiaba en la fuerza del niño.

-Bien de acuerdo, entonces comencemos- dijo el Sicario mientras que dejaba al pequeño en el suelo y comenzaba con el entrenamiento.

Para ser un niño y alguien que no sabe absolutamente nada de pelear Reborn había sido bastante duro con el entrenamiento, por alguna razón los hizo escalar una montaña mientras que les tiraba balazos, que claramente fallaba a propósito, pero hacia para que se asustaran... Dino callo unas cuantas veces y Tsuna en todo momento mantuvo la guardia alta consiguiendo llegar a la cima.

Luego de ello le hizo correr mientras esquivaban trampas a nivel Reborn, es decir, "o las esquivas o mueres"

Tsuna en ningún momento detuvo su ritmo al correr consiguiendo pasar todas las trampas con facilidad, y bueno Dino... Dino aun estaba vivo. Por alguna razón en su camino aparecieron osos, Reborn solo les ayudo en una cosa... le tiro un par de guantes y un látigo... Dino velozmente se tiro hacia el látigo para comenzar a pegar al azar intentando ahuyentar al oso... Tsuna camino tranquilo y alerta hacia los guantes poniéndoselos y activando su llama de la ultima voluntad, el oso que se había enfurecido por los golpes de Dino salio ahuyentado una vez el pequeño le dio un golpe... no fue muy fuerte como para dañarlo, pero si lo suficiente como para demostrar quien mandaba allí.

Luego de unas cuantas horas de entrenamiento Tsuna se quejo de hambre y los 3 volvieron para desayunar... aun era temprano, demasiado para el gusto de Dino.

El rubio solo conseguía sentir dolor, y humillación... un pequeño niño de quien sabe cuantos años lo había superado con creces, y también lo había dejado en ridículo en todo lo que habían hecho... claramente no servia para eso de la mafia.

-por cierto Onii-chan aun no te pregunto como te llamas- dijo Tsuna mientras que mostraba una dulce sonrisa y tiraba un poco de la camisa que llevaba puesta el heredero de Caballone.

-Dino, Dino Cavallone... ¿¿y tu pequeño??- dijo el rubio con un sutil tono arrogante, el pequeño podía ganarle en todo lo demás pero el era el heredero de la familia Cavallone, lo cual lo hacia poderoso.

Reborn al notar lo que Dino estaba pensando sonrió sadicamente y respondió por el castaño pensando en lo humillado que se iba a sentir, aun el azabache creía que se lo merecía por presumido.

-el es Tsunayoshi Di Vongola... futuro décimo Vongola- la simple mención del nombre Vongola lo había hecho sentir devastado, ahora si era oficial le había ganado en todo sentido de la palabra.

-¿que es décimo Vongola Reborn?- dijo inocentemente Tsunayoshi al no entender a lo que se refería su futuro esposo, porque si iba a ser su futuro esposo.

-Décimo Vongola va a ser tu puesto cuando seas mayor, por así decirlo tendrás mucho poder... como un rey- menciono el sicario explicando de manera simple para que el castaño entendiera de lo que hablaba.

-¿¿entonces si soy un rey voy a poder tener lo que quiera??- dijo Tsuna con un gran resplandor de emoción en sus ojos.

-eso supongo, no creo que allá algo que no puedas tener con ese puesto en tu poder- dijo Reborn mientras daba un sorbo a su café expresso y leía el diario que se encontraba en sus manos.

-¡¡ENTONCES QUIERO QUE REBORN SE CASE CONMIGO Y QUE REINEMOS JUNTOS!!- GRITO EMOCIONADO Tsunayoshi causando que el Hitman se ahogara con su café y que el rubio explotara en risa por lo dicho por el pequeño.

Reborn al ver que el adolescente se reía le lanzo una mirada de muerte y furia que claramente causo que este se estremeciera al notar lo que pasaría si no se callaba de una vez.

-Tsuna ya hablamos de eso, sabes que no te puedes casar conmigo- dijo el Sicario con la intención de sacarle esa idea de la cabeza de una vez por todas.

-pero Reborn... prometiste que si me volvía muy fuerte lo harías, y Tsuna se volverá fuerte fuerte para poder cuidar a Reborn de los malos... así el se casara con Tsuna y seremos felices por siempre- dijo el pequeño saltando emocionado con una sonrisa dibujada en su rostro, realmente no podía evitar imaginarse lo bonito que iba a ser cuando eso sucediera.

El azabache simplemente suspiro resignado, estaba seguro que eso simplemente duraría por un tiempo y que cuando creciera eso se le olvidaría... o al menos eso es lo que esperaba que sucediera.

Por su parte Dino simplemente observaba atento lo que el pequeño decía, ese niño realmente era tierno y daba esa sensación de querer cuidarlo a pesar de que era mas fuerte que, tal vez si entrenaba podría cuidar a todos los que le importaran.

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Bueno acá capítulo corto empezado y terminado recién, recién... como estuve haciendo otras cosas no subí capítulo así que aquí está... tarde pero al menos esta... espero que les allá gustado y creo que las actualizaciones van a ser lentas pero no dejare de escribir, al menos eso espero (si pasan mas de 2 mese estoy muerta XD).

Espero que les allá gustado y gracias por sus comentarios, lecturas y votos.

Bye~ >w<

Nadii1827.