21. Una falta de respeto.

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JONGIN

Había pasado un día muy cansado, tirado en la cama con mis dos compañeros, pero cansado al fin y al cabo. No habíamos peleado a golpes con alguien desde primer año de secundaria, cuando tuvimos que enfrentarnos con el colegio rival: BigShit. Los de SeMen nos agarramos a golpes a medio juego de basquet; como siempre, terminamos ganando sin hacer trampa. ChanYeol aún seguía teniendo cara de idiota, tratando de entender y digerir lo que sucedió, ni se puso a pensar que el día siguiente había clases de recuperación, pero SeHun sí estaba enterado de eso y hasta leía su cuaderno aún estando recostado a nuestro lado. 

Como era de esperarse, el día siguiente después de clases ChanYeol nos insistió en visitar a BaekHyun con la excusa que nos haría bien ver a nuestros novios; sin embargo, SeHun sólo puso cara de estreñido al sentirse excluido porque LuHan no era nada más que una conquista conquistada pero sin saber qué paso dar. SeHun dio a entender que le parecía una falta de respeto. Pero no, querido SeHun, yo tampoco tengo novio. Aún no.

Yo estaba feliz, más que feliz porque vería a mi renegoncito (porque sabía que estaba enojado al meterme en una pelea que no me incumbía, pero también sabía que a la vez era un alivio para él que no hicieran gran daño a su amigo, en el fondo eran felices los cuatro), incluso antes de salir de clases me exigió con maldiciones y todas las groserías del mundo que vaya a su puta habitación para curarme el jodido ojo. Así fue cómo llegamos a la habitación de los tres enanitos y Planton después de tomar un aperitivo, a los aplausos de los estudiantes en la cafetería que nos veían como héroes sin capa por sacarle la mierda a Kasper, quien ni se asomaba allá. Yo tampoco lo haría si estuviera en su lugar, pero por lo menos esperaba que venga con un ramo de rosas y cantando Sorry de Justin Bieber. Como sea, llegamos a la habitación y cada uno nos dirigimos a nuestros respectivos lugares, incluso SeHun con timidez hacia LuHan y Tao. 

El amor es una magia, una simple fantasía y al fin lo encontré, es como una luuuuz.

— Yo no sé quién te manda a defenderlo, mira cómo te dejaron la cara —me regañó aquel pequeño con el ceño fruncido mientras colocaba hielo en mis heridas. 

— Tú hubieras hecho lo mismo si ellos serían golpeados —susurré, sólo para que el escuchara, refiriéndome a los tres. 

— Es verdad.  

A KyungSoo le hacía difícil admitir algunas cosas, una de ellas era el cariño que les tenía a sus compañeros. Recuerdo que me confesó el haberle manoseado muchas veces el trasero a Baekhyun mientras éste dormía, y agregó que fue una grata experiencia similar a lo que sentía una lesbiana.

— Espero que lo boten del instituto —tomé de la cintura a mi enojón, atrayéndolo hacia mí para que dejara de parlotear groserías e insultos al orejón de mi amigo, y más que eso para evitar que le saque el un segundo ojo morado al pobre. 

No sabía si esa tarde iba a ser la más cursi de toda mi vida, podía escuchar a SeHun tratar de explicar su decisión, ChanYeol cantando a su cerdito Stay With Me, y yo regalando besitos en toda la carita redonda de mi no novio... Hasta que pasó, todo el mundo callado, sólo los pájaros de invierno haciendo la real bulla. 

¿El azotador de Tao era el directo?  

Es una fanática de lo sensual, ella tiene una foto mía, y ya me la puedo imaginar lo que hace cuando está solita, pero no le voy a preguntar, escuchar su voz cuando se agita. 

KyungSoo se quedó quieto, a medio beso y con los ojos abiertos mirando a la nada. No necesitaba de esos poderes para leer mentes, porque sabía que estaba atando juntando piezas, a la vez que todos también lo hacían. 

"Felices los cuatro" (EXO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora