2. UN PORRO. EN MI SOFÁ

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Asomé la cabeza por la puerta de mi habitación para adivinar que coño estaba pasando. Eran las 4 de la madrugada y mañana tenía mi primera clase a las 8 y media. Era un domingo por la noche así que no entendía el por que de tanto alboroto. Cuando llegue al salón lo que vi me dejo boquiabierta.

Había un grupo de tíos sentados en mi sofa pasándose un porro. UN PORRO. EN MI SOFÁ. No entendía nada. Me fije en sus caras y no reconocí a ninguna cara conocida hasta que me percaté en la morena que se estaba dando el lote con uno de los chicos. Alaska le estaba comiendo la boca al chico de una manera asquerosa.

Me planté en medio del grupo sin pensarlo dos veces, pero nadie se percató de mi presencia.

- ¿ Quienes sois y que coño hacéis aquí? - Dije mirándolos a todos.

Levantaron la cabeza nada más que me escucharon hablar y se me quedaron mirando un poco extrañados. Excepto Alaska, que seguía con su sesión de besos tan tranquila.

- Wow, me gustan con genio- Dijo uno de los gilipollas mirándome de arriba abajo y parándose justo en mi pecho. Mierda, no llevaba sujetador y se me trasparentaba todo. - Yo soy quien tu quieras, gatita. - Siguió hablando el muy gilipollas. Pero de que coño iba ese tío.

- Alaska, joder. Deja de ignorarme y dime quien coño es esta gente.

Mi compañera de piso por fin se digno a levantar la cabeza y mirarme. Joder, tenía los ojos muy rojos y las pupilas muy dilatadas. Estaba emporrada.

- Ay Ari, mi hermano el muy tonto me ha obligado a hacer una pequeña fiesta de apertura del curso. Pero yo no quería, te lo prometo. - Dijo ella soltando una pequeña risita, mirando de reojo al chico con el que se había estado besando.

- Si, tu no querías. Por eso estás hasta arriba de Marihuana ¿no? - Dije mirándola fijamente con cara de pocos amigos.

- Tía, que ha sido mi hermano de verdad.

Ni si quiera sabía que Alaska tuviera hermanos. No lo había mencionado hasta ahora. Pero me da igual quien fuera su hermano. No tenía derecho a meter a todos sus amigos en mi piso y emporrarse un domingo a las 4 de la mañana. No me daba la gana.

- Pues dile a tu hermano.. - Comencé a decir, pero una voz grave proveniente de mis espaldas me corto a media frase.

- Culpable. - Dijo la voz más ronca y jodidamente sexy que había oído nunca.

Me di la vuelta de inmediato para encontrarme con un chico de pelo castaño, además de alborotado. Unos ojos verdes esmeralda que me atravesaban de pies a cabeza y una pinta de gótico impresionante. JODER. No había visto a un tiarrón de este calibre en mi vida.

- Deja de mirarme como si me fueras a follar aquí en medio. Tenemos público.. - Dijo el muy cabrón, sonriendo de lado. - Aunque si te va ese rollo.. yo no tengo ningún problema.

Mierda, el tío más guapo que había visto en mi vida y del cual me había enamorado fugazmente, era un gilipolllas. Pero, era de esperar, con la que había liado en mi casa a estas horas.

- Eres gilipollas. - Dije yo, alto y conciso. - Sal ahora mismo de aquí si no quieres que te denuncie por allanamiento de morada y consumo de drogas - Dije más cabreada de lo que había estado nunca.

- Con que allanamiento de morada ¿eh? - Dijo él con cara de superioridad. - Esta casa también es de mi hermana, y ella me ha invitado por lo que no me puedes denunciar por eso. Por el tema de la droga si que puedes, pero dime ¿prefieres quedarte aquí a disfrutar de mi compañía o quieres denunciarme para que yo aumente mi fama de chico malo y tu la tuya de aguafiestas?

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Decidme que os parece el segundo capítulo. Soy nueva en esto y la verdad que nunca había escrito nada. Pero tengo algunas ideas que creo que pueden gustar.

Soy una fanática de los fanfics de Harry Styles. Me encantan.

Espero que este os guste, tanto como me esta gustando a mi escribirlo.
Gracias a aquellas personas que me estén leyendo y no olvidéis comentar y recomendar a otros usuarios esta novela. ❤️❤️❤️❤️

Mermaid (h.s.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora