·Forbidden Love· -3ra Parte-

·Capítulo 6 : Enamorar·

<Anastasia>

Anastasia Grey, eso es lo que esta grabado en mi pluma. Es un regalo de bodas por parte de mi marido que ahora no para de observarme como admiro el regalo. Fausto nos ha dejado toda clase de comida sobre la larga mesa, lógico que se lo agradecimos invitándolo pero él dice que ser invitado en una cena de novios recién casados es como ser el moco en la salida de novios. Para nada quiso acompañarnos sino que se fue diciendo que aprovecharía su día y medio libre. 

-¿Dejaras de comerme con la mirada? - pregunto divertida y niega.

-¡No porque eres mía por completo! ya no tengo que andar disimulando de nada - tomo un sorbo de vino y parece mas embriagado por la noche que por la bebida. 

Esta feliz y yo estoy igual si él lo siente así. 

-¡Si alguien te viera diría que te hice sufrir por años para casarnos! - bromeo y niega con lentamente con el dedo. 

-¡Años no! pero sí meses - cambia de nuevo la mirada recordando de seguro el momento que despertó y no me vio - fueron horribles esos meses sin ti, era como volver a nacer y hacer de cuenta que no existías en mi mundo cuando en realidad estabas tan presente en mi mente y alma, simplemente fueron duros esos días, saber que andabas por ahí viajando por toda europa y suponiendo si tal vez pensarías en mi como yo lo hago - sonríe de costado - te dí un tiempo para que descansaras, por supuesto que debía recuperarme para salir de vuelta al mundo que reclamaba por mi, pero no creas, no hubo momento en el que dejara de buscar de tu paradero, seguí tus pasos, Estonia, Luxemburgo, Grecia, Letonia, Hungría, Letonia, Irlanda, Holanda, Portugal, Malta y mas países .. - dice casi todos los lugares donde he estado este tiempo .. lo sabía todo - fue mucho tiempo Anastasia, largos y agobiantes seis meses en el que pensé que te había perdido para siempre, en los que imaginé que Ivelic había cometido su fin de separarnos, hasta que te habías escapado con él pero al saber que partiste sola como me lo habías dicho antes de toda esa mierda, me quedé tranquilo - toma otro sorbo de vino y hago lo mismo, aunque no me guste tomar necesito del alcohol para pasar este momento de confesión - cuando realmente supe el motivo de tu necesidad de viajar lo entendí, entendí que te ansiaba ocuparte personalmente de los papeles sobre tu abuela, porque hasta ese entonces estuvo en manos de Ivelic. Querías despegarte de todo lo que te relacionara a él por eso te encargaste tu misma, y por eso me aparecí ayer en el cementerio, porque tenía un presentimiento que te encontraría ahí. 

-Christian .. yo no quise irme así nomas, hubo muchas cosas en el medio que no sabes .. - me duele que piense así. 

-¿Mi madre? lo suponía, ella no te quiere .. lo sé, no eres la clase de mujer que debe estar a mi lado sino alguien como mi ex prometida, pero eso lo deje muy en claro antes de venir a Italia, haga lo que haga no le daré el gusto de que me maneje, hace rato lo deje estar - tal vez él piense así pero para una madre que le arruinen la vida de su hijo es la peor tortura de todas. 

-¡Christian! ¿como piensas que te dejaría por un simple dicho de tu madre? la respeto pero tampoco me voy a dejar pisotear ni me alejaría por sus palabras, sólo tu puedes hacerlo, ni siquiera la loca de tu ex prometida puede hacer algo conmigo - hago una pausa y lo vuelvo a mirar decidida - mas allá de que le caigo de la patada a tu madre .. sé que me quiso decir con eso de alejarme de ti, no sabes cuanto me dolió dejarte postrado en un cama de hospital para ir a atender mis asuntos, tal vez podría haberlo pospuesto para mas adelante pero era algo tan mínimo que me estaba atando a Aris, necesitaba librarme de toda relación - .. sin olvidar que me matará apenas me vea porque eso ha dicho, si llegaba a escapar lejos de él volvería a buscarme para terminar con todo. 

Se levanta y viene hacia a mi, con un pequeño mando pone a reproducir música de salón, ballroom,  se mueve tan bien que ni tengo idea de como habrá aprendido semejante baile.