1.29) Llegada de refuerzos

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-Y eso es todo resumidamente. -Terminó de contar el comandante-

-De algún modo... Puedo sentir compasión por todos aquí. -Miro de reojo por la ventana para ver los soldados que seguían movilizándose-

-Ellos eligieron quedarse y morir, yo sólo hago que sea de alguna manera útil. -Cerró los ojos y miró hacia abajo-

-Decirlo así suena frío, viejo. -Lo miré a él-

-Lo sé... -Afirmó con la cabeza-

-He tomado una decisión, no te mataré con una condición. -Dije levantándome de la silla-

-¿Por qué?, ¿Qué te ha hecho cambiar de opinión respecto a mi muerte?

-Yo no pertenezco a Halley, en cambio, soy una maldita marioneta de ellas, lo he sido toda mi vida, y me enteré de la peor forma posible de que mi vida fue una mentira desde el inicio.

-¿Tienes deseos de destruirla?

-Sí, más que nadie, ellos me quitaron a mis posibles familiares, a mis amigos y a la persona más importante que tuve en toda mi vida. -Le dije-. Yo destruiré Halley, aunque sea lo último que haga, haré que todos y cada uno de ellos sufra todo un exponencial de todo lo que sufrí y sufriré yo el resto de mi vida.

-Creo que sé a dónde te diriges.

-Me eres útil, mientras tú vivas, todos esos soldados pueden ser usados, es mano de obra, personas que se pueden usar para la guerra que quiero causar.

-Así que sólo somos simples herramientas para ti... ¿Qué condición? -Preguntó el comandante-

-Primero libera a todos los que tomaste prisioneros del helicóptero.

-Ustedes son el orgullo de nuestra resistencia, ¡Son los primeros en...! -Lo interrumpí-

-¿Quieres morir sin haber sido útil para ellos?, ¿Quieres que ellos mueran? -Dije amenazándolo con las garras en el cuello-. No quería decirlo así, pero si no cooperas, tanto tú como todos ellos morirán aquí y ahora.

-Es que... Agh, no tengo otra opción, necesito vivir más y llevarlos a todos ellos a una victoria, o al menos una ilusión de una. -Se levanto de su asiento y me miró-. No sé a qué quieres llegar, pero cuenta conmigo, confiaré en tus palabras porque me perdonaste la vida, me da lo mismo si mentiste o no, pero la última voluntad de este viejo está a tu servicio. -Terminó de hablar y salió de la habitación-

¿Qué planeas? -Preguntó Slak-

-Como dije, planeo usarlos para cuando necesite soldados una vez que comience a destruir todo esto.

-¿Recordaste quiénes son los malos aquí?

-Sip... Voy a vengarlos a todos, haré que Halley pague por sus crímenes. -Empecé a ver las armas en las paredes-

-¿Crímenes?, ¿Ahora eres un maldito héroe justiciero?

-No, pero yo haré mi propia justicia. -Tomé un rifle de asalto y apunté hacia una taza en el escritorio-

-La justicia puede convertirse en maldad.

-También tienes razón, pero yo no soy ningún justiciero, lo único que haré es imponer mi justicia sobre otras. -Disparé el arma, rompiendo la taza-

-Estoy expectante entonces, espero que me diviertas. 

-Lo haré, de eso no te preocupes, he aprendido a convivir contigo, algo de lo que no me siento orgulloso, pero es un paso adelante. -Caminé hacia la ventana-

Cuando vi por la ventana por última vez pude observar que el comandante dio la orden para liberar a la Profe Kathy, Ángel y Estefania, me alejé de la ventana y salí de la cabaña sin miedo.

El Último CaminoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora