- ¿Servilletas de color beige o violeta pastel?
Hugo estaba sentado con la cabeza apoyada sobre ambas manos y la cara larga. Había quedado con Alis en una cafetería en el parque más cercano y le contó todo sobre lo ocurrido los últimos días. Alis se emocionó tanto con la noticia del matrimonio que no pudo evitar comenzar a planear los detalles desde el primer momento.
- Vamos, Hugo, eso es muy importante ya que definirá el color de todo el evento - juntó ambas manos en forma de súplica -. ¿De verdad que te interesa tan poco un día tan especial como este?
Hugo resopló y levantó la cabeza dejando los brazos sobre la mesa.
- Claro que me importa, pero sin Elmer estas decisiones son una estupidez. Él no podrá ver lo bonita que será la boda y eso me echa bastante para atrás. Tal vez debamos casarnos de forma civil y olvidarnos del asunto.
- Entiendo cómo te sientes Hugo... ¡pero ni de broma! - se levantó la chica con energía. Hugo se encogió asustado por aquel repentino movimiento -. Elmer fue quien te pidió la mano y seguro que quiere que tú disfrutes la boda más que nadie en el mundo.
- Alis pero...
- Eh, eh, eh - le puso el dedo índice sobre los labios haciéndole callar. Hugo concentró la mirada en ese punto poniendo los ojos bizcos -. Nada de peros. Elmer y tú tendréis la mejor boda del mundo y todo porque yo, tu Celestina, voy a hacer todo lo posible porque se realice en condiciones y bajo el menor presupuesto.
Habiendo dicho lo que quería, Alis apartó su mano. Hugo esbozó una leve sonrisa. La chica seguía llamándose Celestina desde sus años de instituto y su relación no había cambiado en nada; siempre había sido como una madre para él.
- Está bien, confío en ti - accedió -, pero necesito hablarlo con Elmer primero.
- Adelante - sacó su propio móvil y buscó el contacto -. Aquí tienes.
No había tardado nada en reaccionar.
- ¿Ahora mismo?
- Sí, ¿por qué no?
- No lo sé... - Hugo se rascó la nuca mirando hacia cualquier lugar con tal de no establecer contacto directo con Alis -. Igual está ocupado, los estudios, Jake, ya sabes.
- ¡Venga ya! - volvió a exclamar en un tono ligeramente más elevado que el usual sin pararse a pensar siquiera sobre lo que Hugo intentaba explicar -. ¡Esto es una cuestión vital!
La joven alzó los brazos indignada por aquella pasividad de parte de su amigo, tanto que todas sus razones se rebajaron a inadmisibles. En ese momento el mismo camarero que les había tomado nota se les acercó esquivando los brazos de la morena.
- Aquí tienen su batido de vainilla y el de melón - dejó con cuidado las bebidas sobre la mesa.
Alis casi le vuelve a dar al bajar los brazos.
- Gracias - sonrió Hugo con una tímida expresión de disculpa por la hiperactividad de su amiga.
El camarero le devolvió la sonrisa y los dejó solos. Inmediatamente después Alis giró bruscamente la cabeza hacia Hugo.
- ¿Has visto lo guapo que era ese chico? - dijo casi en un susurro con una mano cubriéndose la boca.
- Alis, que me voy a casar... - se encogió de hombros arqueando las cejas.
La morena mantuvo un breve silencio y entonces enterneció su expresión golpeando suavemente la frente de Hugo.
- Solo era una prueba, cabeza de chorlito. Sé que jamás te acostarías con alguien que no fuera Elmer; al contrario que hace cinco años. Ahí los tenías a todos.
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Sin azul (SR #3) [BL]
Teen FictionSecuela de 6eis meses de la trilogía Solitaria Realidad. Tercera parte. "El azul es un color bonito, ¿verdad? El color del cielo, de su reflejo en el agua...También es el color que representa sangre cargada de oxígeno y vida. Últimamente solo veo s...