r o s y c h e e k s

1.7K 219 7
                                    

— ¿Estás bien? No pareces ser tú...

— Estoy bien Seol, sólo que hablar sobre ella me pone sensible.

— ¿Por qué estás aquí? ¿Qué hiciste exactamente?

Ya no había vuelta atrás, quería saber la razón de la estadía de Tae en aquel lugar, y no era momento para arrepentirse.

— Intenté matar a su novio. -Me miró.- Le disparé. -Rió.

— Le disparaste... -Susurré.

— Pero no murió.

— No murió... -Volví a susurrar.

— Se recuperó. Y siguió su relación con... ella.

— ¿Cuál era el nombre de "ella"? -Me acerqué un poco a Tae.

— Kang Ji Soo.

— No puede ser... ¡no puede ser ella! -Exclamé, elevando el tono de mi voz, mientras me llevaba ambas manos a la cabeza.

— ¡Baja la voz Seolhyun, nos descubrirán! -Colocó su mano sobre mis labios, en un intento por hacerme bajar el volumen de mi voz. 

Parpadeé varias veces, tratando de asimilar lo que Taehyung había dicho. Su razón de estar aquí, y cómo todo eso se conectaba. 

— Kang Ji Soo... -Murmuré una vez Taehyung quitó su mano de mis labios.

— ¿Qué pasa Seol, por qué lloras?

— ¿Qué? -Lo miré con el ceño fruncido.

— Estás -Deslizó su dedo índice sobre mi mejilla.- llorando.

— Estoy llorando. -Sollocé.- ¿Por qué estoy llorando? -Miré a Tae.

Tae me miraba confundido, sin saber qué responder o qué hacer.
Porque claro, él no entendía qué me había hecho aquella desagradable chica.

— Seol... -Se acercó a mí, y tomó mi rostro en sus grandes manos.- No llores, ¿de acuerdo? No me gusta verte llorar, te ves muy linda cuando sonríes, así que hazlo. -Me sonrió.

Estaba oscuro, lo único que alumbraba aquel pequeño pasilla era la luz de luna que se colaba entre una de las ventanas y una vieja lámpara del hospital, a pesar de eso, Taehyung notó mis lágrimas. La tristeza reflejada en mis ojos, y mi alma partida en pedacitos; de nuevo.
Y yo vi su sonrisa.

De nuevo éramos solo nosotros dos. El mundo dejó de funcionar.

Tae me envolvió con sus brazos protegiéndome de cualquier mal que amenazaba con consumirme, y llevarse la poca cordura que aún conservaba.

Me protegió de los demonios que me jalaban hacia la locura y soledad completa.

Fue mi soporte.

— No llores mi querida Seol, lo que sea que haya sucedido entre ustedes dos, por favor, ignóralo. Ella no se merece tus lágrimas, son demasiado valiosas. -Volvió a su tono infantil que siempre usaba.- Calma.

Comenzó a acariciar mi cabello, haciendo que me aferrara más a él, sintiéndome segura y por primera vez en mi vida, querida.

— Olvida el pasado y céntrate en el presente, no ganas nada recordando viejos momentos malos, mejor vive. Aférrate a algo que te haga querer vivir y llegar a los cien años, que te haga querer hacer locuras.
En cuanto salgas de aquí, prométeme una cosa. -Rompió el abrazo y tomó mis rostro en sus manos.

— ¿Qué?

— Primero prométemelo y después te diré.

Asentí.

— Serás feliz.
Escribirás un libro y viajarás a muchas ciudades para firmarles aquel libro escrito por ti, amarás a tus fans y ellos a ti. Pero en especial, te amarás a ti misma; pase lo que pase.

No pude evitar sonrojarme, sentí el calor en mis mejillas, apoderándose de ellas. 

Nadie me había dicho algo similar a lo que Taehyung acababa de decir, nadie se había preocupado por mi felicidad y lo que me gustaría hacer en un futuro.

Nadie me había pedido ser feliz como lo había hecho Taehyung.

— Tú también. Prométeme lo mismo. Y que cuidarás a pay de queso. -Sonreí.

— ¿Es una promesa?

— Es una promesa. -Respondí.

Psychiatric. ➳ Kim Taehyung.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora