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Al día siguiente.

Una vez salí de la ducha me envolví en mi paño con recelo mientras caminaba hasta la cama. Sequé mi cabello y respiré con gusto la leve calma del momento. Miré la ropa que había decidido ponerme pero luego hice una mueca suspirando, no sé realmente que ponerme, hay ropa suficiente pero... Tengo la mente en blanco. Me sobresalté al oír la puerta abrirse y al azabache mirarme detenidamente.

- ¿Que te pasa? Te estás tardando. -reclamó y miré el suelo.

- N-No sé que ponerme... -este rodó los ojos y se puso a mirar la ropa que compró detenidamente, al final sacó una sudadera hasta el ombligo y unos shorts cortos desgastados de talla alta. 

- Ponte eso. -me miró de reojo unos segundos antes de rebuscar en la bolsa de ropa interior. - Y esto. -colocó un conjunto negro con medias de encaje. Me sonrojé al mirarlo, la primera vez que lo vi lo coloqué al final de la bolsa. - Rápido. 

- S-Sí amo. -tomé la ropa interior para luego mirarlo de reojo, este se recargó del marco de brazos cruzados mirándome fijamente, suspiré internamente quitándome el paño y tendiéndolo en la cama. Me coloqué las bragas y el sostén para luego colocar media por media y abrocharlas en sus respectivos sitios. 

- Detente. -ordenó y me quedé quieta, sentí sus manos rodearme las caderas desde atrás y agarrarme con fuerza para luego restregarme contra sus partes. 

- A-Ahmg... -mordí mi labio moviendo mis caderas ansiosa.

- ¿Te pone eso? 

- S-Sí amo... -sentí su respiración en mi espalda, erizando mi piel. 

- Es verdad que te dejé cachonda. -su mano entró por mis bragas tocando de inmediato mi zona sensible mientras me apegaba más contra su cuerpo. - Te mereces una recompensa por ser buena chica... -mordió mi hombro para luego recostarme de la cama boca abajo y deslizar sus manos desde mis caderas hasta la parte alta de mi espalda para luego bajarlas completamente hasta agarrar mi trasero y masajearlo a su antojo.

- A-Ah... -jadeé ansiosa. Sus manos agarraron mis muñecas manteniendo mis brazos atrás de mi espalda mientras sentía como los amarraba. 

- Juguemos algo divertido... -oí como caminó unos cuantos pasos y cogió algo de una gaveta.  Miré por el espejo que hacía,sostuvo una caja negra que dejó a un lado mío y con la otra mano sostenía una larga cinta negra aterciopelada. Cruzó mirada conmigo mirándome fijamente. - No mires... -me nalgueó a lo que chillé.

- L-Lo siento amo... -este bufó.

- Me aseguraré de que no mires. -vendó mis ojos con la cinta. Entre abrí mis labios nerviosa, sentí sus manos posarse en mi trasero acariciándolo un poco para luego sentir una mordida algo dolorosa. 

- ¡A-Ahmg! -me revolví ansiosa. Oí el roce de algo pero no estoy muy segura de que, jadeé deseando saber que hacía.

- Dime... ¿Qué crees que sea esto? -rozó algo frío y creo que metálico por mi espalda, mi piel se erizó y fruncí el ceño.

- N-No... No lo sé amo. - sentí como se sentó a mi lado en la cama, y nalgueó con mucha fuerza mi trasero, chillé adolorida mientras respiraba agitada y el baja mis bragas.

- Respuesta errónea... -posó el objeto en mi entrada trasera y me tensé ya suponiendo que era. - ¿Ya tienes una idea? -empezó a forcejear para meterlo y yo mordí las sabanas con dolor.

- ¡A-Ah! -exclamé una vez entró. 

- Responde. -demandó con voz firme.

- ¡U-Un vibrador!... -sentí como empezó a moverlo con algo de dificultad, no había ningún tipo de lubricación y eso me estaba matando. - Ahg... -escondí mi rostro adolorida, pero al cabo de unos segundos ya se movía con más facilidad y eso implicaba que golpeaba con más fuerza mi interior. - ¡Ahgh! ¡Amo! -me revolví ansiosa, se sentía tan bien pero de repente sentí como paró y se levantó de la cama, jadeé queriendo que siga, moví mis caderas de lado a lado buscando su tacto pero me detuve al oír su cinturón desabrocharse ¿N-No irá a...  Sentí como agarró mis caderas y posicionó algo cálido en mi otra entrada. - ¡E-Espe... ¡Ahhh! -me escondí en las sabanas sintiendo como eran ocupados ambos orificios. 

Levi Ackerman x Reader // Dolorosamente //Donde viven las historias. Descúbrelo ahora